Por Raymundo Jiménez
Columna: Al pie de la letra
Ejemplo brasileño
2011-10-26 | 21:58:27
Hasta antes de la doble administración presidencial de Luiz Inácio Lula da Silva (2002-2006 y 2006-2010), Brasil era mundialmente atractivo por el carnaval de Río de Janeiro y sus astros de futbol soccer.
Ahora, luego del gran desarrollo económico y social logrado en los últimos nueve años, veracruzanos y mexicanos han puesto su mirada en los visionarios inversionistas y políticos de este gigante de Sudamérica.
Este martes 25, por ejemplo, directivos de la empresa brasileña Odebrecht y su filial Braskem se reunieron en Xalapa con el gobernador Javier Duarte, al cual le confirmaron la inversión millonaria anunciada en julio de este año durante la visita del mandatario veracruzano a Brasil.
Marcelo Bahía Odebrecht, director presidente de Odebrecht, S.A., y Carlos José Fadigas de Souza, presidente de Braskem, formalizaron la construcción en el sur de Veracruz del complejo petroquímico Etileno XXI, de una planta de etanol y una presa para dotar de agua a Xalapa.En el proyecto Etileno XXI, con su filial Braskem y en sociedad con la mexicana Idesa, Odebrecht invertirá tres mil millones de dólares en la región sur de la entidad y estará generando 800 empleos directos, dos mil 200 indirectos y entre seis mil y ocho mil empleos temporales durante la construcción. La planta de etanol tendrá una inversión cercana a los dos mil 500 millones de dólares y creará dos mil empleos directos.El gobernador Duarte de Ochoa dijo que las inversiones de Odebrecht y su filial Braskem en Veracruz, unas de las más importantes que hacen en todo el Continente, vendrán a consolidar el desarrollo, el progreso y la prosperidad no sólo del sur sino de toda la entidad.
Ese mismo martes, pero en reuniones privadas que tuvieron lugar en el Distrito Federal y en la ciudad de Querétaro, el ex presidente brasileño Lula Da Silva daba sus consejos a líderes e intelectuales de la izquierda mexicana y al priista Enrique Peña Nieto sobre cómo ganar una elección presidencial y también acerca de cómo gobernar.
Según versión de algunos miembros de la dirigencia nacional del PRD, Lula les hizo un llamado para que resuelvan pronto sus diferendos internos y que los partidos progresistas salgan juntos a la calle a darle confianza a la sociedad rumbo a la elección presidencial.
Da Silva, quien hasta el cuarto intento como candidato ganó por primera vez la Presidencia de Brasil en 2002, reveló que “cada vez que perdía me convencía de que iba a ganar la próxima elección. Entonces, poco a poco fui descubriendo que el discurso de mis campañas no respondía a una parte de la población, tenía que atraer a la gente. Por eso decidimos construir un nuevo discurso, construir un Lula nuevo y, entonces, logramos el porcentaje necesario”.
A los dirigentes de la izquierda les recomendó anteponer los movimientos sociales y hacer alianzas sólo con quienes se coincide políticamente.
A los que ejercen el poder les aconsejó consultar a su esposa o a su madre antes de salir de casa para gobernar. “Una madre puede tener diez hijos y si tiene un pedacito de carne, ella lo va a repartir a cada hijo. Nadie va a comer un pedazo más grande que el otro. Pero si uno de esos hijos está débil o enfermo, es a ese al que la mamá le va a dar un pedacito más y, en mi opinión, es como se debería gobernar al mundo”, expuso Lula, quien reprobó a los políticos que hablan de los pobres sólo en las campañas. “Hablan mal de los banqueros y de los empresarios y bien de los pobres, pero después de la elección sólo almuerzan con los banqueros y a los pobres ni un desayunito les invitan”, criticó.
En otro evento, donde recibió la Medalla Amalia Solórzano de Cárdenas por considerársele un hombre que luchó por la igualdad, la democracia y la integración latinoamericana, Lula da Silva recomendó a la clase política mexicana no gobernar con pragmatismos rastreros, sino con el sentimiento.
Ante Cuauhtémoc Cárdenas y otros políticos de la izquierda en México, Lula criticó que existan gobernantes que sólo creen en las estadísticas inmediatas y no ven, o no quieren ver, que detrás de cada número hay una mujer, un hombre, un niño, un jubilado, un ser humano que merece respeto.
“Gobernante que no sueña, no transmite esperanza. Hay gobernantes que solamente actúan a partir de cálculos o pragmatismos rastreros y nunca con el sentimiento”, recriminó el ex mandatario brasileño, quien sonriente afirmó que no desmentiría los elogios que la familia Cárdenas e intelectuales mexicanos habían dicho sobre él, pues consideró que “más que reconocimiento personal, este premio constituye un reconocimiento al pueblo brasileño, que en los últimos 8 años realizó una revolución económica y social, un enorme salto cualitativo en el camino a la prosperidad y a la justicia”.
Pero Lula también se reunió en privado en Querétaro con el ex gobernador mexiquense Enrique Peña Nieto, el más fuerte aspirante presidencial del PRI, al cual le habría explicado su propuesta de abrir a Pemex a la iniciativa privada como en Brasil se hizo exitosamente con Petrobras.
“Esto va a servir a lo que, espero, haya oportunidad de llevar más adelante a cabo”, dicen que expresó Peña Nieto al término de su encuentro con Lula.
Pero cuentan que cuando Peña se despidió del ex presidente de Brasil, en el pasillo un grupo de 20 personas gritaron “¡Arriba el Peje!”.
Lo más interesante es que no se trataba de perredistas sino que eran asistentes a un congreso empresarial.
Así que quien crea que con Peña el PRI ya tiene en la bolsa la Presidencia de la República, bien podría llevarse aún tamaña sorpresa en el ya cercano 2012.
Y es que como bien decía aquel famoso cronista radiofónico de beisbol cuando todavía faltaba por caer el out 27: “¡Esto no se acaba hasta que se acaba!”.

Nosotros | Publicidad | Suscripciones | Contacto

 

 

Reservados todos los derechos 2018

Nosotros | Publicidad | Suscripciones | Contacto

 

 

Reservados todos los derechos 2018