Por Raymundo Jiménez
Columna: Al pie de la letra
TRÁNSITO, LA CUEVA DE ‘ALÍ BABÁ’
2011-01-13 | 21:44:54
Ahora que el gobierno del estado, con la aprobación unánime de los Ayuntamientos del puerto de Veracruz y Boca del Río, anunció que se hará cargo de los servicios de tránsito y vialidad de esa zona conurbada debido a las constantes denuncias ciudadanas por la extorsión casi institucionalizada que venían ejerciendo los patrulleros y motociclistas de ambas dependencias municipales, en Xalapa automovilistas y hasta algunos agentes de Tránsito local están solicitando que la nueva administración del gobernador Javier Duarte de Ochoa ejecute también la misma atracción.
Este jueves 13, por ejemplo, el director de Tránsito y Vialidad del municipio de Xalapa, Marco Antonio López Domínguez, reconoció que diariamente se reciben entre una y dos denuncias en contra de elementos de esa corporación por actos de corrupción.López Domínguez –uno de los compadres renegados de Miguel Ángel Yunes Linares, fracasado ex candidato del PAN a gobernador– dijo que ante una denuncia bien fundada y motivada se procede al proceso administrativo para que todos los malos elementos salgan de la corporación.El director municipal de Tránsito, quien acaba de ser ratificado en el cargo por el presunto padrinazgo del ex secretario de Gobierno y actual subprocurador encargado del despacho de la Procuraduría General de Justicia del Estado, Reynaldo Escobar Pérez, informó que el año pasado causaron baja tres elementos de esa dependencia al comprobarse que incurrieron en actos de corrupción, ya que las denuncias en su contra estuvieron bien motivadas y fundadas.Sin embargo, en un documento que agentes de Tránsito municipal hicieron llegar a este medio de comunicación –los cuales, por obvias razones, solicitaron se protegiera su identidad– denuncian detalladamente la presunta red de corrupción y complicidades que persisten en esa dependencia municipal a cargo de López Domínguez, quien en el sexenio del gobernador Patricio Chirinos fue director del reclusorio de Pacho Viejo y luego fue acomodado por su compadre Yunes Linares en la Dirección de Tránsito y Transporte del Estado durante la administración de la directora Graciela Patricia Gómez viuda de Ibarra.
Ahí subsistió, en el gobierno estatal, hasta la mitad del régimen de la Fidelidad con la directora Martha Montoya, a la cual habría cortejado con el regalo de algunas joyas de oro.
A mediados del trienio del alcalde David Velasco Chedraui (2007-2010) pasó a hacerse cargo de la dirección municipal de Tránsito, presuntamente por la recomendación del ex munícipe Reynaldo Escobar, luego de la renuncia del ex director Edmundo Martínez Zaleta, quien a su vez había sustituido a Hilario Arenas Cerdán, quien sólo duró unas semanas en el cargo porque los mandos medios se le rebelaron quejándose de su trato duro.
Esta dependencia del Ayuntamiento, según acusan los propios agentes de Tránsito, es una auténtica cueva de Alí Babá.
Por ejemplo, exponen que a cada uno de los elementos conocidos como de “pie tierra” les piden sus superiores una cuota de entre cien y doscientos pesos diarios. Actualmente suman alrededor de 250 agentes.
Los que quieren conducir una patrulla les fijan una tarifa de 5 mil pesos mensuales. Los motociclistas, por su parte, deben entregar 3 mil pesos al mes. Esto muy aparte, dicen, de la cuota diaria de 200 pesos.
Acusan que a cada conductor detenido por aliento alcohólico o en estado de ebriedad le cobran 5 mil pesos que presuntamente van a parar al bolsillo de los “superiores”. En promedio, señalan, caen alrededor de cinco automovilistas por noche en el transcurso de la semana, pero exponen que el número de conductores alcoholizados se duplica regularmente los viernes y sábados por la noche, y domingos en la madrugada.
Según denuncian, las multas por estado de ebriedad las pueden revocar si los afectados les dan dos mil pesos.
A los traileros y conductores de camiones de carga pesada supuestamente les cobran entre 30 y 50 pesos nada más por cruzar la ciudad de Xalapa.
A los agentes que les asignan patrullas o motocicletas los obligan a pagar las composturas y el consumo de gasolina, aunque oficialmente el Ayuntamiento se hace cargo del gasto por el mantenimiento, la reparación y el combustible del parque vehicular de Tránsito municipal.
A los conductores que son infraccionados por conducir a exceso de velocidad, presuntamente los dejan ir si les dan lo correspondiente a la mitad de la multa, estipulada en 25 salarios mínimos.
Además piden investigar a Roberto Cornejo, del área administrativa, pues es señalado de no ingresar a caja lo correspondiente a la mitad de los permisos expedidos para circular.
Exponen también presuntas complicidades que hasta pudieran tipificarse como “delincuencia organizada”, pues acusan que los agentes de Tránsito tienen como informantes al personal de seguridad de las discotecas y antros, los cuales, a cambio de una buena propina, les dan el “pitazo” acerca de los vehículos conducidos por clientes que salen ebrios. No sólo les dan color y marca del automóvil sino el número de placas y hasta el rumbo hacia el que se dirigieron.Estos agentes de Tránsito municipal denuncian también que “ay (sic) muchos meritorios que no sabemos cuántos son, pero pagan una cuota alta por trabajar con uniforme.”
Y finalmente señalan que la Contraloría Interna, de manera sospechosa, no investiga a fondo las denuncias ni todo este ambiente de corrupción.
Este jueves 13, en el portal del periódico digital alcalorpolitico.com, el ciudadano Javier Torres Rodríguez envió una carta en la que denuncia que grabó un video el pasado martes 11 de enero, poco después de las 13:00 horas, en el que captó a un oficial de Tránsito municipal tratando de extorsionar a un motociclista detenido en el cruce de las avenidas Miguel Alemán y Américas, al parecer porque ni el señor ni el niño que lo acompañaba portaban casco protector.
Este video se puede ver en YouTube a través del siguiente vínculo: http://www.youtube.com/watch?v=67jvxDTHRAg .El autor de este video, como muchos otros automovilistas xalapeños, manifestó que “yo quisiera que el señor López Domínguez prestara atención a tantas y tantas denuncias de corrupción y se tomara unos minutos para, de alguna forma, dar respuesta a las inquietudes de ciudadanos hartos de este proceder interminable de los agentes de tránsito, que sólo hace pensar que no sólo son tolerados, sino solapados por sus superiores.”
Torres Rodríguez dijo que por su parte aguarda “alguna comunicación a mi correo electrónico” (jajtorr@hotmail.com) y que “ojalá no espere en vano”.
Habrá que ver si el gobernador Duarte, como lo hizo a solicitud de los Cabildos del puerto de Veracruz y Boca del Río, le entra también al toro por los cuernos en Xalapa y atrae el servicio de tránsito y vialidad cuya mala fama ha trascendido a otras entidades del país. Sólo falta que las autoridades municipales de la capital veracruzana se lo propongan al titular del Poder Ejecutivo del estado. ¿Se atreverán a desprenderse de tan codiciada “caja chica”?

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