Por Marco Antonio Medina Pérez
Columna: La escena veracruzana
El lugar sin límites
2016-10-24 | 09:03:12
A propósito del reciente fallecimiento del actor Gonzalo Vega, recordamos una memorable actuación que lo hizo merecedor de un Ariel por mejor coestelar en la película “El lugar sin límites”, dirigida por Arturo Ripstein en 1977 y basada en la novela homónima del escritor chileno José Donoso. Novela y película impactantes, en ellas se relatan los extremos a los que puede llegar la condición humana y una situación social límite. Pancho (Gonzalo Vega) es el acosador y violador al que temen una joven mujer y su padre homosexual y que ha convertido sus vidas en un pequeño infierno, el lugar sin límites, título extraído de La Trágica Historia del Doctor Fausto de Christopher Marlowe, dramaturgo inglés del siglo XVI. Muchos lugares en México y Veracruz semejan el lugar sin límites del que habla esa historia: pueblos fantasmas acosados por el narco, el entorno en el que viven mujeres acosadas y vulneradas en sus derechos, jóvenes perseguidos por el solo hecho de ser jóvenes, periodistas viviendo en peligro constante, familias con hijos desaparecidos y sepultados en decenas de fosas clandestinas. Cuando el Fausto de Marlowe pregunta a Mefistófeles donde se encuentra el infierno, éste responde: “El infierno no tiene límites, ni queda circunscrito a un solo lugar, porque el infierno es aquí donde estamos...” Lugar sin límites es un país en donde suceden cosas tan crueles e inhumanas, como la desaparición de 43 jóvenes de la noche a la mañana, ejecuciones sumarias como las de Tlatlaya, feminicidios sin justicia alguna. Un país sin límites engendra instituciones similares que justifican y legitiman la política actual y alimentan el becerro de oro de la codicia. Ahí tenemos el caso de los 7 magistrados electorales electos como cuotas de 3 partidos y gobernadores como Duarte con ilícitos faraónicos a la vista de todos y ahora tránsfuga igualmente predecible, gracias al “pitazo” recibido en las altas esferas del poder. La Cámara de Diputados refrenda su posición como el lugar sin límites para el despojo y la ambición. Al aprobar la Ley de Ingresos de Hidrocarburos y la Ley de Ingresos de la Federación, con la única oposición de los diputados de MORENA, queda claro que continuará la misma situación de pobreza y agobio constantes que padecen muchas regiones y poblados del país, caldo de cultivo para tantos infiernos locales. Porque detrás de estas leyes están, por un lado, el privilegio del que se
guirán gozando empresas y consorcios para seguir saqueando al país y, por el otro, la aplicación de impuestos que continuarán afectando a los que menos tienen. La Ley de Hidrocarburos permite deducir a las empresas petroleras que exploten los recursos del país hasta el 60% de lo que deban pagar por barril de petróleo, cuando se asocien con otras compañías. Cabe señalar que a Pemex sólo se le permite una deducibilidad del 12% y que de acuerdo a la reforma energética la explotación petrolera tiene prioridad en el campo por encima de cualquier otro uso y los campesinos y ejidatarios podrían ser expropiados en cualquier momento si se encontrarán en sus tierras yacimientos de hidrocarburos. Despojo en despoblado. Por otro lado, continuará la extracción desproporcionada de recursos de los bolsillos de los que menos tienen. No es necesario que aumenten nuevos impuestos, si ya con los que se tienen basta y sobra: el IVA, que es un impuesto desproporcionadamente injusto para los pobres. El IVA para las zonas fronterizas, que coloca a los mexicanos de esas regiones en condición de suma desventaja frente a sus pares allende la frontera; el impuesto a la gasolina, por el que seguiremos pagando 5.60 pesos por cada litro e impacta a toda la economía. El impuesto a los productos con alto contenido calórico que afecta a varios artículos de consumo popular y al que ahora se agregan 9 productos más. La Cámara Baja aprobó hacer ajustes al proyecto de ley de ingresos y se las ingenió para aumentar los ingresos de los que dispondrá el gobierno federal: cambiando la previsión del tipo de cambio, de 18.20 a 18.62 pesos por dólar; incrementando 19 mil barriles diarios la producción petrolera nacional y aumentando la eficiencia recaudatoria. Y además aprobaron 5.3 mil millones de pesos extras de deuda, aparte de lo solicitado por Peña Nieto. Y todo esto para fondear, entre otras cosas, el sagrado poder de los diputados de disponer cada uno de 20 millones de pesos para obras en sus distritos, que se convierten en “moches” de un 10% mínimo para sus arcas personales. Un lugar sin límites para la corrupción. Afortunadamente hay excepciones y ya los diputados de MORENA denunciaron esto y se excluyen de esta práctica. Los lectores tienen la palabra.
marco.a.medinaperez @gmail.com

Nosotros | Publicidad | Suscripciones | Contacto

 

 

Reservados todos los derechos 2018

Nosotros | Publicidad | Suscripciones | Contacto

 

 

Reservados todos los derechos 2018