En su comunicado semanal de este domingo, la Oficina de Comunicación Social de la Arquidiócesis de Xalapa, que dirige el presbítero José Juan Sánchez Jácome, aborda nuevamente el tema de la seguridad pública.
Con el encabezado “La colaboración de las Iglesias en el restablecimiento de la paz”, el vocero de la Iglesia católica xalapeña alude a una reciente reunión convocada por el titular de la Secretaría de Seguridad Pública del estado, Arturo Bermúdez Zurita, y el doctor Ghaleb Victorio Krame Hilal, director del Área de Proximidad Institucional y Prevención del Delito de la SSP, con representantes de seis diferentes credos religiosos de la capital veracruzana, a los cuales se les dio a conocer el programa nacional para la prevención social de la violencia y la delincuencia “México nos mueve la paz”, lo que –dijo el sacerdote Sánchez Jácme– provocó una reflexión sobre estos temas tan sensibles para la sociedad y las Iglesias.
“Desde nuestra propia perspectiva religiosa compartimos el poder tan grande de la oración que realizan nuestros fieles y que se ha convertido en un recurso espiritual de suma importancia para suplicarle al Señor nos ayude a reconstruir un ambiente de paz en México y en Veracruz”.
“Reconocemos los esfuerzos que se están haciendo para cambiar radicalmente el rostro de la policía en Veracruz y por eso para nosotros fue sorprendente encontrarnos con este giro que se viene operando y con los programas que se vienen impulsando para lograr mejores resultados en el restablecimiento de la paz en nuestras ciudades y comunidades. Sabemos que hay muchos retos por delante pero es fundamental constatar el nuevo rumbo que quiere emprender esta corporación tan importante en la vida de nuestro estado.
“Las Iglesias convocadas a este encuentro tuvimos la oportunidad de reiterar nuestro apoyo, por lo que esperamos que esta campaña y estos objetivos mantengan la nueva dirección que se le quiere dar a los cuerpos de seguridad en el estado de Veracruz. Este acercamiento institucional que se ha propiciado permite también que diferentes sectores sociales sean escuchados y se sumen al restablecimiento de la paz tan necesario para alcanzar una vida digna”.
“Nuestra labor como sociedad y como Iglesias es seguir exigiendo más resultados en materia de seguridad y en otros rubros fundamentales para la vida de nuestra sociedad. Sin embargo, también reconocemos los esfuerzos que se vienen haciendo y por eso esperamos que estas iniciativas no sean temporales sino que representen el nuevo rostro de la política y el nuevo rostro de la policía que honraría a nuestro pueblo que merece lo mejor de sus servidores públicos y que siempre ha demandado honestidad, transparencia y justicia en sus gobernantes.”
El reto para Bermúdez y compañía no ve nada fácil pese a que de acuerdo con los últimos reportes y estadísticas del Sistema Nacional de Seguridad Pública –los cuales se pueden consultar en su sitio web para medir el comportamiento de la incidencia delictiva en cada uno de los estados del país–, Veracruz ya se ubica como una de las entidades que este año registró un decrecimiento considerable en la comisión de delitos como homicidios dolosos, secuestros, extorsión, robos y robo en casa-habitación.

Pero la percepción es engañosa porque el comparativo del SNSP se basa sólo en las denuncias formales que las víctimas presentan ante el Ministerio Público del fuero común o federal, dependiendo del tipo de delito. Y, en muchos casos, los agraviados prefieren no acudir a las agencias ministeriales porque se trata de trámites muy engorrosos que además les implica pérdida de tiempo ya que luego tienen que presentarse a ratificar su declaración, y al final terminan frustrados porque casi nunca detienen a los culpables.
Precisamente hace un par de meses, a mediados de septiembre, Ghaleb Krame –licenciado en Ciencia Política y Relaciones Internacionales por el Centro de Investigación y Docencia Económicas, A.C.– encabezó una reunión en Xalapa con representantes de la iniciativa privada para hablarles acerca del “Nuevo Modelo Policial”, pero los empresarios se comenzaron a quejar de la serie de robos que se venían dando de manera recurrente e impune en los comercios capitalinos.
A los empresarios poco les entusiasmó que Krame Hilal les presumiera que la SSP cuenta con 12 mil policías que en promedio perciben un sueldo decoroso de 12 mil pesos mensuales, y que muchos de ellos tuvieran estudios de licenciatura y algunos hasta de maestría.
Lo que la ciudadanía xalapeña demanda –le respondieron– son policías con mejor imagen, sí, pero más eficaces que garanticen plena seguridad.
Este jueves 7, a las 4 de la tarde, en la avenida Murillo Vidal –donde hay decenas de policías y agentes de tránsito, e inclusive hasta un módulo de “Proximidad Social” de la SSP– una señora fue amagada por dos mujeres armadas cuando iba a abordar su coche. La subieron a un taxi y la trajeron durante tres horas sacando dinero de diversos cajeros automáticos de la ciudad. Alrededor de las 19:00 horas fue abandonada por Banderilla luego de quitarle su reloj, teléfono celular y hasta el abrigo. La víctima está emparentada con un funcionario de la Procuraduría General de Justicia del Estado que hace un par de meses fue arteramente golpeado en un restaurante de Coatepec pero el cual no pudo presentar la denuncia penal porque el agente del Ministerio Público ¡no se la quiso recibir!
¿A poco deveras sólo nos quedará rezarle al Señor de los cielos, y no precisamente al extinto capo Amado Carrillo Fuentes?