Por Raymundo Jiménez
Columna: Al pie de la letra
2012-01-01 | 20:07:01
* MORELIAZO

La anulación de la elección municipal de Morelia, la capital del estado de Michoacán donde el priista Fausto Vallejo fincó su apretado triunfo electoral como candidato a gobernador, prendió los focos rojos en el bunker del precandidato presidencial del PRI, Enrique Peña Nieto.
A tal grado parece llegar su preocupación, que el último viernes de diciembre de 2011, en su segundo mitin abierto organizado en Campeche, el ex gobernador mexiquense afirmó que su partido trabajará para ganar holgadamente las elecciones de 2012, y así evitar que ningún tribunal se equivoque y cambie la voluntad de la gente.
“Lo que buscamos es que en democracia, los partidos tengan una actitud civilizada para participar en ella, para privilegiar la propuesta y no la descalificación, porque no queremos que ocurra lo que pasó en Morelia, en donde un fallo de un Tribunal Electoral echó abajo la decisión mayoritaria de los morelianos. Pero el partido, respetuoso de las instituciones, ha acatado este fallo.
“Por eso, hoy estamos buscando que en esta elección que presenciaremos y participaremos el próximo año, el PRI se muestre con gran fuerza y con gran vitalidad, para que el triunfo sea contundente, para que los tribunales no se equivoquen y menos pretendan cambiar el rumbo que la ciudadanía habrá de marcar. El PRI ganará la Presidencia de la República”, sentenció.
Para ello, los operadores del ex gobernador del Estado de México han comenzado a aceitar la aplanadora priista. Un caso, por ejemplo, es la organización denominada Expresión Política Nacional (EPN, las mismas iniciales de Enrique Peña Nieto), que es una continuación de la estructura paralela que el peñismo heredó del gobierno de Arturo Montiel y que desde el 2003 al 2005 coordinó el dirigente estatal priista Isidro Pastor: Fuerza Mexiquense.
Fuerza Mexiquense fue una red paralela, financiada con fondos del erario estatal y donaciones de empresarios beneficiados por los contratos de obra pública de Montiel. Fuerza Mexiquense apoyó campañas priistas en varios estados de la República cuando el PRI nacional se quedó prácticamente en bancarrota a raíz de la multa por el Pemexgate y la derrota en el 2000 frente a Vicente Fox.
Desde su llegada al poder, en octubre de 2005, Peña Nieto transformó Fuerza Mexiquense en Expresión Mexiquense (EM) y se la encargó a Jesús Alcántara Núñez, un político y empresario del autotransporte que se vinculó al actual gobernador desde el gobierno de Montiel.
De 2000 a 2003, Alcántara Núñez fue alcalde de Acambay, sede de la dinastía de autotransportistas y financiadores priistas fundada por su tío Jesús Alcántara Miranda. En 2003 fue diputado suplente de Peña por el distrito de Atlacomulco. De 2006 a 2009, Alcántara fue diputado federal y operador directo de Peña Nieto en la Cámara de Diputados. Desde 2009 es diputado local y ha sido asesor de Luis Enrique Miranda Nava, quien en la administración peñista fue el “hombre fuerte” desde la Secretaría de Gobierno.
Jesús Alcántara es socio de la empresa Autotransportes Herradura de Plata, de Enlaces Terrestres Nacionales y de Ómnibus de México. Está emparentado con Roberto Alcántara Rojas, heredero del emporio Grupo Toluca que incluye la flotilla de autobuses más grande de la entidad, socio fundador de las aerolíneas Viva Aerobús y Volaris, que creó junto con Emilio Azcárraga Jean y Pedro Aspe. Roberto Alcántara fue en 2006 el responsable de “pasar la charola” con los empresarios en el equipo de campaña de Roberto Madrazo.
Una función similar le corresponde ahora a Jesús Alcántara, quien le ha confiado a sus amigos que “lo que se puede comprar con dinero es barato”. Otros lo conocen como “el hombre del maletín” porque lleva los recursos y las órdenes de Peña Nieto.
Desde 2009 tiene a su cargo tres estructuras paralelas y con el mismo fin: crear redes de apoyo para Peña Nieto. De Expresión Mexiquense (EM) surgió 7:11 EM, siglas que hacen referencia a julio de 2011, fecha en que ganaron la gubernatura del Edomex mediante el reclutamiento de jóvenes promotores del voto. Otro grupo tiene las siglas DMD (Dos mil Doce) con la clara referencia a este año de la sucesión presidencial.
En 2009, las estructuras paralelas de Jesús Alcántara apoyaron a varios políticos que lograron una diputación federal, lo que le permitió a Peña Nieto controlar directa o indirectamente a cerca de 100 de los 237 diputados priistas.
Entre 2007-2010, Expresión Mexiquense envió apoyos y operadores a las campañas de Javier Duarte, en Veracruz; Jesús Calzada, en Querétaro; Fernando Toranzos, en San Luis Potosí; Ivonne Ortega Pacheco, en Yucatán; Rodrigo Medina, en Nuevo León, y de José Francisco Olvera, en Hidalgo, los cuales forman parte del bloque de gobernadores priistas que apoyan ahora la candidatura presidencial de Peña Nieto.
Y aunque perdieron en entidades como Baja California, Sinaloa, Puebla, Oaxaca y Guerrero, pero fueron claves para las victorias del PRI en Guadalajara, Mérida y Cuernavaca, capitales que recuperó el PRI.
En Veracruz, Expresión Política Nacional tiene proyectado abrir casas de gestión social en las 100 principales cabeceras de los 212 municipios del estado. El viernes antepasado, 23 de diciembre, abrieron la primera en Teocelo, cuyo ayuntamiento está en poder del PRD.
Pero EPN de Alcántara Núñez no es la única organización política que trabajará para Peña Nieto. Por ejemplo, otro personaje clave en la red paralela que ha construido el peñismo es su compadre Felipe Enríquez Hernández. En 2005 este personaje cercano al ex gobernador regiomontano Natividad González Parás renunció como director de Fomento Metropolitano de Monterrey (Fomerrey) y se sumó al proyecto del mexiquense apoyando a los aspirantes priistas en Quintana Roo, Yucatán, Durango, Hidalgo, Tamaulipas, Nuevo León, Campeche y a Roberto Sandoval Castillo, ganador en las elecciones de Nayarit.
El nocaut que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación le acaba de propinar al PRI en Morelia ha hecho que Peña y su equipo movilicen una aplanadora con la que pretenden no sólo ganar la elección presidencial con una contundente ventaja en la votación –como sucedió en julio del año pasado en la elección de gobernador del Estado de México–, sino arrasar también con carro completo en los comicios para diputados y senadores al Congreso de la Unión.
¿Lo lograrán? Ya se verá.

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