Por Raymundo Jiménez
Columna: Al pie de la letra
Veracruz empeñado
2011-12-18 | 20:31:42
Aunque legalmente está impedido para hacer proselitismo abierto durante los próximos tres meses por su calidad de “precandidato único”, el priista Enrique Peña Nieto se dejó venir este domingo a Veracruz donde asistió como invitado de honor a la ceremonia de toma de protesta a los miembros de los 212 Comités Directivos Municipales, de los 4 mil 880 Comités Seccionales así como a los 2 mil 043 altos comisionados políticos del PRI en la entidad.
No fue un evento menor. Se calcularon alrededor de 12 mil asistentes en total, los cuales atiborraron los cuatro salones “Tajín” del World Trade Center de Boca del Río.
Un día después de haber recibido la constancia oficial de su precandidatura, Peña Nieto vino en busca de la calidez y entusiasmo del priismo veracruzano, como ya en ocasiones anteriores lo han hecho otros aspirantes del PRI a la Presidencia de la República, después de dos semanas difíciles por la campaña de linchamiento desatada en las redes sociales, portales de internet y medios de comunicación a raíz de su dislate en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara y luego por su desafortunada entrevista concedida al diario español “El País”.
En enero de 1994, por ejemplo, cuando la campaña de Luis Donaldo Colosio Murrieta no levantaba por los insistentes rumores de que el exsecretario de Desarrollo Social estaba por ser sustituido por el canciller y comisionado para la paz en Chiapas, Manuel Camacho Solís –lo que en su momento obligó al presidente Carlos Salinas de Gortari a reunir a su gabinete y a toda la plana mayor del CEN del PRI para aclararles que “no se hicieran bolas”, que el candidato era Luis Donaldo–, el sonorense decidió recorrer Veracruz, cuya militancia lo reactivó a tal grado que sus enemigos sólo pudieron frenarlo dos meses después mediante el cobarde atentado en Loma Taurinas, una colonia marginada de la ciudad de Tijuana.
Por eso, ayer, el gobernador Javier Duarte de Ochoa, en su condición de militante priista, dijo en un breve mensaje que “hoy es un día muy especial para el priismo veracruzano, lo es porque en Veracruz el PRI está activo, está más vivo que nunca, está trabajando y aporta lo mejor de sí para seguir abriendo nuevas rutas hacia la prosperidad”.
Al darle la bienvenida a Veracruz –cuyo padrón electoral es el tercero del país, después del Estado de México y el Distrito Federal–, Duarte le dijo a Peña que “aquí está tu gente, aquí están tus amigos, aquí, Enrique, están tus aliados permanentes”.
En este acto en el que –remarcó– “se fortalece la vida democrática del partido” al renovarse los comités seccionales y municipales del PRI en la entidad, el gobernador de Veracruz comprometió a la militancia “que adquiere nuevas responsabilidades el día de hoy”, a “sumarse a la acción cotidiana y al trabajo comprometido de priistas y simpatizantes que están dispuestos a llevar la consigna que hiciera Luis Donaldo Colosio: ‘Todo el partido, en todo lugar, en todo tiempo’ “.
Duarte los arengó a estar preparados “para el debate de ideas, las ideas que contribuyan a mejorar la vida de las personas en el estado y en el país”, pues expresó que “estamos convencidos que la injuria no es el argumento, ni la falsa descalificación brinda respuestas a las necesidades más apremiantes”.
“Rechazamos a quienes pretenden crecer sólo a costa de la descalificación obsesiva, de quienes se empeñan en mirar un pasado imaginario en donde sólo existen rencores. Dejemos que esa práctica sea para aquellos que no han podido encontrar otros caminos o que no han sabido luchar por encontrarlos.
 “¡Que no se confundan: debatiremos sobre ideas, sobre propuestas, sobre todo aquello que tenga que ver con el progreso del país y de la gente, pero rechazaremos el debate hueco, sin propuestas, sin ruta, sin destino!
“Es por eso, por el compromiso con la gente, que  no podemos confiarnos, tenemos que actuar decididamente y con gran eficacia para que prevalezcan nuestros compromisos sociales. No podemos permitir que se arrebate a la gente lo que tanto nos ha costado, ni podemos permitir retrocesos, no podemos detener el ritmo del avance que requiere la sociedad.
“Este es el PRI en el que creemos, el PRI que estamos convencidos que llevará a México a un mejor destino, un PRI que construye con la gente un horizonte más justo para todos. Los convoco a trabajar por el partido, sabiendo que tenemos la mejor propuesta, al mejor partido, la mejor organización y como ustedes aquí lo demuestran, a la militancia más comprometida”.
Javier Duarte refrendó que “en Veracruz vamos para adelante” porque “quienes militamos en el PRI sabemos que es en los principios, en la actividad diaria y en los resultados oportunos donde la política encuentra su mayor fortaleza”.
“Vamos para adelante en la consolidación de una organización política que asume una nueva visión y renovados compromisos. La fortaleza del PRI radica en la unidad, en el talento y la entrega de su militancia; la fortaleza del PRI radica también en su capacidad para abanderar las causas y los justos anhelos de nuestra gente”.
Y al tomar de ejemplo los resultados del gobierno de Peña en el Estado de México, Duarte de Ochoa se pronunció por una política de corresponsabilidad, “donde sociedad, sectores productivos y gobiernos asumen un papel activo en la búsqueda de la prosperidad; una política que sabe lo que hay que hacer, pero, sobre todo, sabe cómo hacerlo y hay que decirlo, hacerlo bien”.
“Como gobernador, (Peña Nieto) emprendió una nueva forma de hacer política, la de asumir y cumplir compromisos frente a la sociedad, un gobernador que en los hechos demostró saber interpretar las necesidades y actuar a la altura de los retos. Compromisos cumplidos es la marca de una manera de ejercer la política, cercana a la gente y eficaz en los resultados entregados.
“Nuestro mayor reconocimiento a los resultados alcanzados y al cumplimiento de la palabra empeñada. Éste es el PRI en el que creemos, el PRI que estamos convencidos llevará a México a un mejor destino, un PRI que construye con la gente un horizonte más justo para todos”, resumió Duarte.
Por su parte, Peña Nieto, al reconocer “la presencia, el respaldo político de quien es el primer priista de Veracruz, Javier Duarte”, sumamente emocionado agradeció también “las muestras de afecto, de calidez y de hospitalidad” de los priistas veracruzanos. “Está en ustedes, en su entusiasmo y en su compromiso la mayor inspiración que tengo para trabajar, para recorrer el país, para comprometerme con México y dar lo mejor de mí en esta campaña y a partir de alcanzar la aspiración de ser el Presidente de los mexicanos, de servir con todo a México”.
Al llegar a este acto, en el que tardó casi 40 minutos saludando de mano a quienes lo aguardaban en la orilla de la valla, dijo que sobre todo las mujeres “me expresaban de manera muy sincera: ‘aquí en Veracruz lo queremos y lo amamos’. Hoy, Enrique Peña le quiere decir a los veracruzanos: Enrique Peña ama Veracruz, Enrique Peña cree en Veracruz y Enrique Peña confía que con el respaldo del priismo de Veracruz de todos los veracruzanos y de todos los mexicanos, ganaremos, insisto, la Presidencia  de la República”.
Peña les advirtió que será una campaña muy difícil, ya que formalmente aun no ha iniciado “pero los ataques de los adversarios están a la orden del día, y más que ocupados por ver qué le plantean a México, están dedicados a ser ataque constante y permanente a quien tanto temor le tienen, a quien tanto les preocupa, al mejor partido de México, al Partido Revolucionario Institucional”.
“Les preocupa lo que hoy aquí vemos: la fortaleza del partido, la cohesión del partido, la unidad y organización que el partido tiene, pero sobre todo el compromiso que el PRI tiene para que dentro de la democracia compitamos de manera civilizada, madura, con respeto al electorado, con respeto a la sociedad, y le planteemos una oferta viable y de compromiso para todo México”, pues argumentó que “hoy el PRI tiene memoria y sabe muy bien lo que México no ha logrado en la última década (…), que tenemos más gente en condición de pobreza (…), que en esta década no se ha generado el crecimiento económico que permita generar los empleos que la población demanda (…), que no se han generado condiciones para que los jóvenes que egresan de sus estudios tengan oportunidades dignas para trabajar”.

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