Cuando después del “hermanamiento” de Toluca y Xalapa, a principios de septiembre pasado, al gobernador Javier Duarte de Ochoa se le vino el mundo encima con el tiradero de decenas de cadáveres en la zona conurbada Veracruz-Boca del Río y una ruda campaña mediática precisamente por el problema de la inseguridad y la polémica aprehensión de un par de tuiteros porteños, algunos connotados priistas locales comenzaron a inquietarse porque no veían en reciprocidad el apoyo del ex gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto, a quien el mandatario veracruzano –sin medir los costos políticos que esto le representaría no solo entre los grupos internos del PRI sino también en los de la oposición que desde ahora se disputan fieramente el poder presidencial– había “destapado” al exaltar que el mexiquense sería “el mejor candidato del PRI y el mejor presidente de México”.
De hecho, Peña Nieto y el poderoso grupo político y financiero que respalda su aspiración presidencial no ha hecho sentir aún su solidaridad hacia Veracruz, donde el gobernador Duarte parece cabalgar como el “Llanero Solitario” entre la multitud de apaches que salvajemente lo quieren bajar de su caballo “Plata”.
Por ejemplo, el ex gobernador mexiquense tiene el control no solo del grupo legislativo del PRI en la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión sino que sus personeros también presiden las más importantes comisiones legislativas, entre ellas las que pueden modificar el Proyecto de Presupuesto de Egresos para 2012 que le fue turnado a esa Soberanía por el presidente Felipe Calderón a través de la Secretaría de Hacienda, y en el cual al estado de Veracruz se le pretenden recortar 12 mil millones de pesos para el próximo ejercicio fiscal.
Sin embargo ahora, cuando el gobernador Duarte más oxígeno puro necesita para librar la campaña mediática que ahora han enfocado en su contra por la sospechosa guerra que presuntos grupos paramilitares han desatado contra la delincuencia organizada identificada con el cártel de Los Zetas, Peña Nieto parece haberse olvidado olímpicamente de su principal aliado en Veracruz.
Y es que ha trascendido, por ejemplo, que el ex gobernador del Estado de México y el senador Manlio Fabio Beltrones, que también pretende la candidatura presidencial del PRI –aspiración que habría motivado que el legislador sonorense, celoso por el abierto apoyo que el mandatario veracruzano manifestó hacia el mexiquense, le lanzara agrias críticas a Duarte de Ochoa por haber dizque “minimizado” la matanza de 35 personas supuestamente vinculadas al crimen organizado– pactaron con la dirigencia nacional de su partido tiempos y lugares para debatir el contenido de lo que será la plataforma electoral tricolor para 2012.
Peña Nieto y Beltrones se habrían reunido en privado el pasado viernes 30 de septiembre por la noche para delinear la ruta, que incluye la organización de tres foros a realizarse en este mes de octubre: el día 10, en Chihuahua; el 17, en Chiapas, y el 21, en Querétaro.
Originalmente se había considerado la realización de un cuarto foro en Veracruz, pero trascendió que los precandidatos lo descartaron ante el clima de violencia que prevalece en la entidad que gobierna Javier Duarte.
En estos foros, los ex gobernadores del Estado de México y Sonora presentarán sus propuestas sobre política económica, política social y política interior, respectivamente.
Peña y Beltrones, quienes acudirán a todos los encuentros, acordaron que el foro final se llevará a cabo el 27 de octubre en la ciudad de México, con la finalidad de presentar las conclusiones de la consulta realizada por la Fundación Colosio y las propuestas anunciadas en estos foros, a los que estarán invitados expertos sobre el tema, académicos, intelectuales, cuadros nacionales del PRI, representantes de organizaciones no gubernamentales, artistas y empresarios.
Todo muy bien, pero a Veracruz lo dejaron fuera. ¿No que muy “hermanos”?

EL MAGO FIDEL

Sobre el ex gobernador Fidel Herrera Beltrán llegaron a correr últimamente descabellados rumores, uno de ellos aseguraba que el ex presidente Carlos Salinas de Gortari le habría sugerido irse del país porque presuntamente el gobierno federal tenía abierto un expediente penal en su contra por presumibles vínculos con un cártel de la delincuencia organizada arraigado en Veracruz.
La semana pasada se difundió la versión de que habría sido abucheado, junto con su esposa Rosa Borunda, en un concierto de la cantante veracruzana Yuri en el Auditorio Nacional de la ciudad de México.
Sin embargo, como el mítico Ave Fénix, Herrera ha vuelto a resurgir políticamente aunque no como él lo soñaba siendo aún gobernador, pues no solo trabajó hasta el final de 2010 para encartarse en la próxima sucesión presidencial sino que en estos últimos meses le atribuyeron también pretensiones de ser postulado al Senado de la República.
Fidel acaba de ser designado secretario regional del CEN del PRI, cargo equiparable a la rifa del tigre, pues le encomendaron atender cuatro estados gobernados por priistas, pero con graves problemas políticos y de inseguridad por la narcoviolencia.
Al ex gobernador de Veracruz le fueron asignados los estados de Tamaulipas, Nuevo León, Durango y… Coahuila, la entidad que recién gobernó el dirigente nacional priista, Humberto Moreira, donde el escándalo por la megadeuda pública que le heredó a la administración de su hermano Rubén dará todavía mucho de qué hablar hasta las elecciones presidenciales de julio próximo.
Así que para que el PRI gane las votaciones de 2012 y recupere la Presidencia de la República, Herrera Beltrán tendrá que echar mano de su empolvado libro de magia electoral. No por nada en la sucesión estatal de 2004 él mismo se automotejó como el “Harry Potter” veracruzano, pues primero muchos dudaban de que llegaría a ser el candidato del PRI a la gubernatura de Veracruz y luego muy pocos creían que pudiera ganar la elección constitucional.