El pasado viernes 28 de enero, la secretaria de Turismo del estado, Leticia Perlasca Núñez, estuvo en el estudio de Televisa Veracruz, donde fue entrevistada por el conductor del noticiario nocturno Rogerio Pano.
Le concedieron más de tres minutos, que en el horario triple A de la televisión comercial son muy cotizados.
Pero cuando todo mundo esperaba escuchar los acuerdos, convenios y otros logros conseguidos durante su estancia en la Feria Internacional de Turismo (Fitur) de Madrid, España, la funcionaria del gobierno duartista no tocó para nada tan importante asunto y sólo se concretó a hablar de la fiesta de La Candelaria que estaba por iniciarse en Tlacotalpan.
Perlasca ha sido duramente criticada porque al igual que en el pasado, la funcionaria se fue a hacer turismo político a Europa acompañada de algunos colaboradores, obviamente con cargo al erario del estado, no obstante la delicada situación financiera que está enfrentando la administración del gobernador Javier Duarte de Ochoa, quien acaba de presentar un Plan de Austeridad que pretende generar ahorros por 6 mil millones de pesos para destinarlos a obras de infraestructura y a otros proyectos productivos que reactiven la economía de la entidad.
No está mal que la ambiciosa ex directora del COBAEV decida tirarle flechas a la luna; sólo que en estos momentos, por la contingencia financiera, debería hacerlo con más inteligencia y eficacia. Y es que fue precisamente Televisa la que le dio la receta, con la producción de un estupendo spot sobre la fiesta de la Candelaria que a iniciativa de Emilio Azcárraga Jean el consorcio televisivo decidió transmitir desde hace una semana por los canales de la TV comercial y los de cable, no sólo de México sino también de Estados Unidos, para promover turísticamente a esta población gravemente afectada el año pasado por las inundaciones que trajo el huracán Karl y la tormenta tropical Matthew.
Perlasca debe bajarse de su nube y tocar el suelo terrenal. Veracruz, es cierto, es un estado con una gran biodiversidad y riqueza histórica, cultural, gastronómica, musical, poética, pero en comparación con otros destinos turísticos del país aún adolece de una moderna y funcional infraestructura carretera y aeroportuaria, mayor calidad en la prestación de servicios así como seguridad, confort y limpieza de sus playas y ciudades.
Precisamente en la de Madrid, que junto con la de Berlín son las ferias turísticas más afamadas de toda Europa, la secretaria de Turismo de Veracruz mostró el verdadero nivel en el que andamos.
Allá debió coincidir con el secretario de Turismo del Gobierno del Distrito Federal, Alejandro Rojas Díaz-Durán, de quien al menos se supo que el jueves 20 de enero organizó una conferencia de prensa en la Fitur, en la que declaró que este sector en México “se ha visto erosionado por la guerra del presidente Felipe Calderón contra el narcotráfico”, que le ha representado a la llamada industria sin chimeneas una merma de aproximadamente 120 mil millones de dólares en lo que va del sexenio. Sin embargo, el funcionario capitalino expuso que la espiral de violencia en distintas regiones del país ha tenido un efecto favorable para el turismo en el DF, donde afirmó que “nos ha ido bien”. Incluso presumió que se ha convertido “en el principal destino turístico del país”.
“Lamentablemente todo lo que sucede en el norte del país (la violencia) provoca que el turismo fluya hacia la Ciudad de México: congresos, exposiciones, visitas. Por eso cerramos 2010 con un crecimiento de13% en el sector, algo que no tuvo ningún otro destino de México. Pero no basta con que a la ciudad de México le vaya muy bien, tiene que irle bien a todo el país”.
Según las estadísticas ofrecidas por Rojas Díaz-Durán, el año pasado el DF tuvo 20 millones de visitas turísticas, de las cuales 3 millones 500 mil fueron de extranjeros, lo que se tradujo en una derrama de 5 mil 300 millones de dólares.
De acuerdo a su diagnóstico, lo que ayudó a que la capital mexicana tuviera ese crecimiento fue la oferta turística, de museos, el turismo de aventura, las rutas organizadas, la reconstrucción de la Plaza Garibaldi con el nuevo Museo del Tequila y el Mezcal y los trabajos en la Academia del Mariachi, que pretende certificar a esos músicos y que será la base para proponer la candidatura ante la UNESCO a fin de que el sonido tradicional mexicano sea considerado patrimonio de la humanidad.
Ante la equivocada estrategia del presidente Calderón de combatir a los cárteles del narcotráfico, el secretario de Turismo del GDF propuso un “relanzamiento” de México de manera diferente, no sólo como un destino de “sol y playa”, y recuperar la imagen “fuerte y bien posicionada” que el país tenía en el mundo.
En su opinión, “mucha gente tiene miedo de ir a México. Le tenemos que quitar el miedo al mundo diciéndole que los sitios turísticos están tranquilos y se pueden visitar”.
Precisamente, antes y después de la partida de Perlasca a la Fitur, en Veracruz se suscitaron sendos enfrentamientos del Ejército con bandas criminales en Xalapa, Poza Rica y el sur del estado.
Se ignora cuál fue el discurso de la secretaria estatal de Turismo en España, donde la semana previa a la feria de Madrid el gobierno ibérico lanzó una alerta a sus ciudadanos recomendándoles abstenerse de viajar a México, principalmente a ciudades como Monterrey, Ciudad Juárez, Chihuahua, Culiacán y a todo el estado de Tamaulipas, vecino de Veracruz.
A Madrid también acudió la secretaria calderonista de Turismo, Gloria Guevara Manzo, quien minimizó la alerta del gobierno español al declarar que “todos los países tienen mecanismos y derecho a emitir las alertas”.
“Hay que considerarlas, pero hoy en día los turistas y los viajeros son más conocedores, se informan, nos preguntan y sigue incrementándose el número de viajeros a nuestro país; los turistas saben que la gran mayoría del territorio está en paz”, añadió la secretaria del gobierno federal panista.
Sin embargo, al día siguiente, Rojas Díaz-Durán, de la administración capitalina que encabeza el perredista Marcelo Ebrard Casaubón, disintió de la opinión de la señora Guevara porque, adujo, “la gente hoy se informa más y tiene acceso a las imágenes que hacen ver a México como Bagdad, como si México estuviera en guerra. No es minimizando el problema como vamos a resolverlo. Tenemos que ofrecer soluciones reales”.
¿Nuestra representante en la Fitur qué hizo, qué dijo? Oficialmente poco se supo. Un escueto boletín dio cuenta de su encuentro con directivos del Buró de Turismo de la Ciudad de Valencia, considerada la de mayor crecimiento turístico en Europa, “al pasar de un promedio de visita de tres horas a tres días y de una oferta hotelera de cuatro mil 500 a nueve mil habitaciones en tan solo 20 años (sic).”
En comprensible que esta hazaña de los valencianos haya maravillado a Perlasca, pues Veracruz no ha logrado erigirse en un polo turístico de alto nivel. Tan es así que ahora que los secretarios del gabinete del presidente Calderón recorrerán en febrero la República Mexicana para hablar sobre los logros de la actual administración federal, la titular de Turismo, Gloria Guevara, no estará en Veracruz sino en los estados de Quintana Roo y Yucatán, dos de los destinos turísticos del país más atractivos para los visitantes extranjeros.
En Veracruz, en cambio, estará Heriberto Félix, secretario de Desarrollo Social, el titular de la dependencia federal encargada de combatir la pobreza. ¿Será porque en la entidad, más de dos millones de veracruzanos viven en pobreza extrema; o sea que a duras penas sobreviven con un salario mínimo al día? Algo que seguramente no ha de sorprender a la secretaria Perlasca, quien pretendió justificar que su viaje oficial a España no fue oneroso porque –aseguró ante los medios de comunicación– sólo tuvo en promedio un costo increíble de 40 mil pesos por persona, esto es, casi 800 minisalarios. Uffff.