El municipio de Tamiahua era de las pocas poblaciones veracruzanas donde no se conocía la menor señal de violencia. Durante décadas no hubo un solo hecho de sangre. Era considerado como un pequeño paraíso de pescadores, reconocido por ser el lugar donde se consumen los mejores ostiones del país.
Hoy en día es un sitio peligroso para vivir, agitado por grupos y mafias del crimen organizado, que obligó este fin de semana hacer presencia de las fuerzas militares, ante la serie de secuestros, amenazas y extorsiones para las otrora tranquilas familias, que viven de los productos de la laguna y del mar.
Otro municipio del norte de la entidad que vive la misma pesadilla es el de Chinanpa. Donde el alcalde Baltasar Avendaño está decidido a dejar el cargo ante el temor de perder la vida o a alguien de su familia.
Reconoció que en los últimos quince días la situación se agravó de manera peligrosa por lo que los propios habitantes establecieron el “toque de queda” a partir de las seis de la tarde.
Es preocupante la coincidencia de un considerable aumento de hechos criminales a partir de la entrada del nuevo gobierno.
El acuerdo que había con Fidel Herrera había que renovarlo.



En chino para Mota
China enseña a México, nación que no por contar la mayor población más numerosa del mundo, no es necesariamente una maldición que garantiza miseria y desempleo. La gran diferencia entre los dos países es el alto nivel de competitividad y de una manera muy especial, la importancia que se le da al sistema educativo en los países orientales.
El ex secretario de Educación de Veracruz, Juan Maldonado Pereda, señala la urgencia de una reforma educativa donde se instituyan nuevas materias que apoyen al crecimiento y desarrollo y la desaparición de otras que no aportan gran cosa para la formación de las nuevas generaciones. Censuró la criminal condescendencia del gobierno hacia el sindicato magisterial, donde los días de paga y las continuas reuniones con los caciques del magisterio, se les otorgan permisos a los maestros para no asistir a las aulas.
Mientras en China son diez horas diarias de clases creativas y de gran rendimiento, en México es sólo la mitad del tiempo que dedican al desarrollo de estas actividades escolares.
En China crean estudiantes que superan en matemáticas y ciencias exactas, a los egresados de las universidades de E.U.
Lo grave en Veracruz es la dependencia estatal encargada de la enseñanza, la cual ha entrado en un franco declive.
Un medio solicitó una entrevista para otorgarle el privilegio al funcionario estatal, Adolfo Mota, de conocer oportunamente la grave información sobre la lista de los profesores “aviadores” y de esta manera que se publicara al día siguiente las dos versiones, tanto la información oficial como la investigación periodística.
Han pasado los días y resulta para las ocupadas secretarias de la SEV una misión imposible localizar tanto al titular de la dependencia como al señor Jefe de Prensa.
Un reportero de la fuente lo intentó y lo pusieron en espera más de una hora. Eso le permitió enterarse de ciertas intimidades de los jefes de la “educación” estatal. Abochornado de lo que escuchó decidió mejor colgar.
Si esto ocurre con el responsable de la educación veracruzana, los cientos de maestros tienen el mejor argumento para seguir disfrutando de estar comisionados en sus hogares o entrar a la creciente fuerza aérea docente.
No hay nada que pare a los chinos para ser la primera potencia de la economía mundial, ellos tienen en efectivo un millón de millones de dólares de los bonos del Tesoro de los Estados Unidos, son por lo tanto el futuro casero del pueblo estadounidense, ya que están a su entero capricho aumentarles la renta o sacarlos de las casas.