Salvo una o dos sorpresas, pero todo parece indicar que el gabinete que dará a conocer oficialmente el gobernador electo Javier Duarte de Ochoa el próximo martes 30 a las 20:00 horas no va a variar mucho de la lista de nombres de presuntos colaboradores que se han venido mencionando en las columnas periodísticas.
Y aunque todos los cargos son interesantes, pero por la difícil situación financiera que habrá de recibir la nueva administración gubernamental existe un marcado interés por saber quién será el funcionario duartista que habrá de asumir la titularidad de la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan).
En un principio trascendió que Duarte le habría hecho la invitación al actual diputado federal por el distrito electoral de Coatepec, José Francisco Yunes Zorrilla. La versión tenía lógica, pues el ex diputado local y ex alcalde de Perote es amigo cercano del secretario calderonista de Hacienda y Crédito Público, Ernesto Cordero Arroyo.
Además, entre Yunes Zorrilla y Duarte existe una buena relación familiar que data de la generación de sus abuelos. Por eso el peroteño, que también aspiraba a la candidatura del PRI a la gubernatura, jamás le jugó sucio al cordobés. A diferencia de otros aspirantes priístas, Pepe fue el primero en sumarse a la candidatura del ex titular de la Sefiplan, lo que le mereció ser nombrado coordinador general de su campaña.
Al trascender la declinación de Yunes, quien presuntamente habría optado por permanecer en la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, se dio por un hecho entonces que el secretario de Finanzas sería Tomás Ruiz González, que del staff duartista es el que cuenta con una trayectoria política y administrativa de mayor nivel, pues ha sido subsecretario de Ingresos de la Federación, director del Sistema de Administración Tributaria (SAT), director de Banobras y de la Lotería Nacional, diputado federal y dirigente nacional del Partido Nueva Alianza.
El afianzamiento de Ruiz se dio sobre todo porque unos cuantos días después de la elección del 4 de julio, el propio Duarte –sin que aún el Tribunal Electoral del Poder Judicial del Estado confirmara en primera instancia la validez de los comicios– lo presentó públicamente en una comida con radiodifusores de la entidad, a los cuales anunció: “Le he pedido al licenciado Tomás Ruiz González, un destacado veracruzano con gran trayectoria en la administración pública y particularmente en el área financiera, que a partir de hoy inicie los trabajos (de la transición administrativa)”.
“Tomás –remarcó Duarte– posee las mejores credenciales y el mayor prestigio en su ámbito profesional, además de mi absoluta confianza.” Y refirió que la de Ruiz era “la primera de una serie de encomiendas que iré haciendo públicas en las próximas semanas a destacados veracruzanos y veracruzanas” que obviamente estarían llamados a colaborar con él en su administración.
Pero dos meses después, a finales de septiembre, Tomás Ruiz protagonizó un escándalo en un restaurante de Boca del Río, donde en otra mesa departía casualmente un pariente cercano del gobernador electo.
Se sabe que este incidente irritó mucho a Duarte en cuanto se enteró de los detalles por el testigo que de manera accidental había presenciado el bochornoso sainete.
Quien sabe si por ello el sucesor del gobernador Fidel Herrera habría decidido ponderar la posibilidad de buscar a otro prospecto para la Sefiplan, pues en algunas publicaciones periodísticas muy cercanas a Palacio de Gobierno y al propio mandatario electo se han difundido versiones de que hasta al ex director general de PEMEX, Jesús Reyes Heroles, le habrían propuesto venir a despachar como secretario de Finanzas.
Pero, al parecer, Reyes-Heroles González-Garza –un ex asesor político y financiero del gobernador Herrera– no ha sido el único al que le habrían ofrecido sustituir a Salvador Sánchez Estrada en la Sefiplan a partir del 1º de diciembre. La semana anterior, por ejemplo, Susana Torres Hernández, quien ocupó la Contraloría General del Estado al inicio de la administración fidelista, asistió a Xalapa a una fiesta particular. Ahí, uno de los invitados le preguntó a la ex directora de Inversión Pública en el gobierno de don Fernando Gutiérrez Barrios por qué no aceptó la invitación para hacerse cargo de la Sefiplan en el nuevo sexenio. La política nativa de Los Tuxtlas solamente sonrió y respondió que había considerado que “no era el momento”.
Ni Yunes Zorrilla, ni Reyes Heroles y tampoco Torres Hernández habrían aceptado la invitación porque aparentemente saben de la gravedad financiera que la administración de Herrera Beltrán le heredará a la de Duarte de Ochoa. Como botón de muestra nada más habría que ver la crítica situación por la que están pasando también las administraciones municipales salientes, pues a decenas de ayuntamientos les déjale de transferir desde el mes de agosto las participaciones federales.
Sólo Tomás Ruiz estaría dispuesto a sacarse “la rifa del tigre”. ¿O acaso habrá otro más valiente?

MORENO CON YUNES
Por cierto, hablando de panalistas...
Este miércoles 17 causó revuelo una supuesta declaración del diputado local Gustavo Moreno Ramos, quien presuntamente habría dicho a un par de reporteros que no aceptarían en la bancada del Partido Nueva Alianza al diputado Fernando Yunes Márquez, del cual se había rumorado fuertemente esa mañana que se separaría del grupo legislativo del PAN.
Esto dio pie a diversas interpretaciones, entre ellas las del presumible rompimiento del ex candidato del PAN, Miguel Ángel Yunes Linares –padre del diputado Yunes Márquez–, con la dirigente nacional del SNTE, Elba Esther Gordillo Morales, a cuyos intereses responde Moreno Ramos desde que lideraba la Sección 32 de ese sindicato magisterial.
Precisamente el representante popular del distrito de Misantla acaba de sustituir al dirigente de la Sección 56 del SNTE, Ernesto Callejas Briones, en la coordinación del grupo legislativo del Panal que está formado además por el hijo y el yerno del senador Rafael Ochoa Guzmán, secretario general del CEN del SNTE y segundo de a bordo de la maestra Gordillo.
Ayer, jueves, Moreno Ramos difundió una aclaración en la que precisa que “solamente respondí amablemente a pregunta expresa de dos reporteros respecto de mis consideraciones al Informe del Gobernador del Estado pero nunca nada referente a la posibilidad de integración al partido y la bancada del Panal del legislador Fernando Yunes Márquez.”
“En descargo del mal intencionado perjuicio que en mis relaciones personales se me ha deseado ocasionar al ponerme en evidencia ante un compañero diputado electo por la mayoría de los electores de su distrito y quien, por su capacidad probada y su preparación profesional y política me merece todo el respeto tanto a su persona como a su investidura”, Moreno Ramos quiso aclarar que “en ningún momento he dicho a reportero alguno que si Fernando Yunes Márquez renuncia al PAN, en el PANAL nosotros no lo aceptaremos.”
El coordinador de los cuatro diputados locales de Nueva Alianza expuso que “si por alguna circunstancia se diera la solicitud de afiliación a nuestro partido y a nuestro grupo legislativo por parte del señor diputado Fernando Yunes Márquez, ciertamente lo consensaríamos considerando que quien es un verdadero representante popular con su posición ganada en las urnas, siempre podría ser bienvenido a nuestra tarea tanto partidista como legislativa; asentando que, en lo personal, no sólo me congratularía con su afiliación sino que abogaría porque fuera considerado militante distinguido de nuestro Partido Nueva Alianza  y de nuestra bancada.”
El ex priísta afirmó también que “en el PANAL nunca desfavoreceremos cualquier alianza con el PRI, PAN, PRD o Convergencia si en las iniciativas y posiciones legislativas al seno del Congreso se privilegian beneficios a favor de nuestros conciudadanos veracruzanos.”
Y luego de reiterar su respeto absoluto a la libertad de expresión, Moreno Ramos hizo notar que “coincidentemente, en dos diarios importantes del estado, la nota fue reproducida letra a letra y párrafo a párrafo, dando idea que corresponde a un boletín y no a la tarea de un reportero que acude a la fuente para informar a sus lectores.” ¡Sopas!