* IVÁN, ‘EL TERRIBLE’

Aunque no se le pide una corte de ángeles bajados del cielo, pero el gabinete del gobernador electo Javier Duarte de Ochoa debería cumplir por lo menos con los dos atributos mínimos que los antiguos romanos le exigían a la esposa del César: ser honesta y parecerlo.
Una vez validada la elección y ratificado su triunfo por el máximo tribunal electoral del país, el ex candidato priista no puede olvidar su discurso ni los compromisos asumidos públicamente durante su campaña electoral que al final le valió el voto de confianza de aproximadamente 1.4 millones de electores veracruzanos, casi 80 mil más de los obtenidos por Miguel Ángel Yunes Linares, del PAN, cuya estrategia medular fue precisamente la de incitar a votar por un cambio real en el gobierno de la entidad, sin los mismos vicios y corruptelas que le imputa al agonizante régimen de la Fidelidad.
Sin embargo, hasta en la misma estructura del gobierno fidelista se han asustado de algunos siniestros personajes que han logrado penetrar el círculo íntimo de Javier Duarte y que se perfilan para desempeñar cargos relevantes en la próxima administración estatal.
Uno de estos casos es el del contador público Iván López Fernández, a quien mencionan como el más viable candidato para ser el próximo titular de la Contraloría General del Estado.
La relación de López Fernández con Duarte de Ochoa se fortaleció, al parecer, desde que el ex presidente del Colegio de Contadores Públicos, por encargo del Órgano de Fiscalización Superior (ORFIS), se encargó de revisar como auditor externo las cuentas de la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan).
Sin embargo, López Fernández ha sido denunciado ante el propio ORFIS por funcionarios municipales de algunos ayuntamientos que le atribuyen presuntos actos de corrupción maquinados a través de diversos despachos y empresas proveedoras y prestadoras de servicios de las que es socio, y que lo mismo han vendido a ediles paquetes informáticos para sus sistemas municipales del Registro Civil, que maquinaria pesada y hasta medicamentos de una sospechosa firma abastecedora con domicilio fiscal en la congregación de El Tronconal, de Xalapa.
En Perote, por ejemplo, durante la administración municipal 2004-2007, que presidió Heriberto Castillo, del PAN, hubo un tesorero que padeció un derrame cerebral por los líos administrativos en los que se le implicó.
Pero eso no es todo. Existe también una reciente indagatoria judicial en la que este aspirante a contralor de la administración duartista, en colusión con uno de sus socios, se prestó a jurar una declaración ministerial totalmente falsa para privar de su libertad a una indefensa mujer que fue acusada de difamar a un compinche de Iván López de ser supuestamente “gay”.
López Fernández rindió su declaración ministerial el 19 de octubre de 2007 ante el Agente 7° del Ministerio Público Investigador, Lic. Enoc Gilberto Maldonado Caraza y la Oficial Secretario Lic. Sarai Cancela Correa. El “declarante”, quien se identificó con la credencial para votar con número de folio 0000049756616, fue advertido por los representantes de la fiscalía “de las penas y sanciones con que la ley castiga el delito de falsedad de declaraciones ante la autoridad…”
Esta indagatoria fue consignada por el Ministerio Público al juez Florencio Hernández Espinoza, del Juzgado Tercero Menor, radicándose la Causa Penal número 92/2009/VI.
Pero la ex amasia del socio de López Fernández fue absuelta de los cargos que le imputaban, por lo que se inconformaron y volvieron a presionar para que se encarcelara a la mujer. Sin embargo, en agosto de 2009, mediante el Toca Penal número 75/2009-A, formado con motivo del recurso de Apelación interpuesto por el Ministerio Público, el juez Ignacio Ochoa Jiménez, del Juzgado Tercero de Primera Instancia del Distrito Judicial de Xalapa, confirmó el auto de libertad por falta de elementos para procesar por el delito de difamación a la indiciada.
Y es que el juez, para llegar a esta resolución, consideró que no llegó a acreditarse el cuerpo del delito de difamación. Puso como ejemplo el hecho de que el agraviado y sus testigos aseguraron que la acusada había divulgado que su ex pareja era “un homosexual, gay, porque anda en amoríos con personas de su mismo sexo, e incluso le ha imputado que mantuvo una relación amorosa con el difunto Alcalde del Municipio de Emiliano Zapata el C. Leonardo Retureta Salas, y que éste padeció a causa de una enfermedad y que él padece, esto es sida, y que contagió a esa persona, y que esa fue la causa de su muerte…”
Sin embargo, todo mundo sabe que el ex alcalde priísta de Emiliano Zapata no falleció de esta enfermedad sino a causa de un trágico accidente automovilístico ocurrido a mediados de septiembre de 2004, en el tramo carretero Xalapa-El Lencero.
Por eso, ante estos antecedentes, habría que preguntar si Iván López será realmente confiable para nombrarlo titular de la Contraloría General del Estado, la cual recibe no solamente las declaraciones patrimoniales de todos los funcionarios estatales sino que es la dependencia del Poder Ejecutivo que se encarga de vigilar la eficaz operación de los programas y recursos gubernamentales, y de prevenir desvíos y subejercicios administrativos.
Los malquerientes de López Fernández advierten que de sustituir éste a la contralora fidelista Clara Luz Prieto Villegas sería prácticamente como dejar a la Iglesia en manos de Lutero.
No faltan los que incluso lo llegan a comparar con el zar ruso Iván IV Vasílievich (1530-1584), mejor conocido como “Iván, El Terrible”, pues desde los 13 años comenzó a ser temido porque a esa edad ordenó a un grupo de leales suyos que capturaran al príncipe Andrey Shúisky para arrojarlo a una jauría de perros, los cuales lo despedazaron.
Este Iván –que se perfila como el zar de los contralores duartistas– ya se coludió para despedazar penalmente a una indefensa mujer sin detentar aún el poder que recibirá si llegara a formar parte del gabinete estatal. ¿Se imaginan lo que le aguarda a esta dama que actualmente es una modesta empleada del gobierno del estado, en caso de que a López Fernández se le haga ser el contralor en la administración de Duarte?
Que Dios la agarre confesada.