Es una intensa campaña de desprestigio en contra de las empresas que realizan encuestas, tanto las nacionales como la veracruzana de Impulsos, aseguran los detractores que todas se equivocaron en sus pronósticos sobre los resultados de la elección del cuatro de julio.
Cómo explicar que Javier Duarte de Ochoa quien tenía cerca de quince puntos arriba de Miguel Ángel Yunes Linares y al final se redujo a sólo tres puntos.
¿Por qué no se equivocaron con Dante Delgado Rannauro y lo ubicaron perfectamente con el porcentaje señalado en estos estudios de opinión?
Lo que no pueden vaticinar las empresas encuestadoras es el dinero que se va a gastar en la compra de votos y de allí las grandes variantes. El derroche del PAN para subir doce puntos.
El que no invirtió un peso en la compra de votos, fue el ex gobernador Delgado Rannauro, de allí que se reflejó de manera exacta lo que decían las encuestas.
Por otro lado, nadie se podía imaginar que la burocracia estatal concentrada en la ciudad de Xalapa, estaba en desacuerdo con la gestión de Fidel Herrera y que esa empleomanía se desquitaba con el sufragio en contra.
En cambio sí apoyó a la candidata Elizabeth Morales, porque sabían los servidores públicos que no era propuesta del ejecutivo estatal, quien se había inclinado por Américo Zuñiga. Las empresas encuestadoras no pueden conocer esa situación discrepante y malestar entre el gran empleador oficial y sus trabajadores.
Cómo interpretar en un sondeo la singular agudeza y el ingenio de los pobladores de Nopaltepec, la cuna de Fidel, que pertenece a Cosamaloapan, para que en todo el municipio se votara en contra.
Ni los aprendices de brujo pueden augurar con anticipación cómo reaccionan los veleidosos veracruzanos.
Fidel Herrera entiende que va de salida y se esfuman los que él creía que eran sus grandes amigos. Toda amistad de carácter político tiene su finalidad, una vez alcanzada ésta, desaparece, y las nuevas circunstancias crean otros intereses.
No se puede olvidar el lema de Jesús Reyes Heroles, su padrino de boda: “El que bailó, tiene que sentarse”.

La liberación

Ha sido un largo peregrinar de los periodistas para dar el gran paso a fin de que los medios dejen de estar subordinados al poder y, en caso dado, saber enfrentar al poder político.
Tiene que transformar la función informativa, de pasar de las declaraciones del funcionario y de la objetividad de los hechos a la del análisis y la reflexión. Esta es la importancia de ejercer un periodismo auténtico que sirva a la sociedad.
Saber otorgar la trascendencia que tiene la transmisión de ideas que permitan la construcción de una responsabilidad. El periodismo es una actividad cuya función vital es informar y ésta no consiste en la simple repetición de lo dicho por el funcionario ni tampoco es la recolección de hechos.
La auténtica tarea del periodista es proporcionarle al lector una información inteligente que le permita tomar libremente sus mejores decisiones.

La traída experiencia

Formación política es lo que se requiere para un cargo dentro de la administración pública. El caso en México fue muy grave y dañino, cuando llegaron los funcionarios sin estos antecedentes de contacto popular y sin ningún puesto previo de elección popular. Hay que recordar que Díaz Ordaz, López Mateos y Miguel Alemán contaban con esa formación política.
Pero ni Echeverría, López Portillo, Miguel de la Madrid, Carlos Salinas y Ernesto Zedillo la podían acreditar. De allí el derrumbe del país.
Fidel Herrera es el gobernador con mayor formación política que ha tenido Veracruz: cinco veces legislador, director de empresas paraestatales, oficial mayor y asesor de secretarios de Estado, entre otras tantas actividades públicas.