A más tardar el lunes de la próxima semana, el diputado federal con licencia, Javier Duarte de Ochoa sabrá qué tan efectivas fueron las “limpias” que los brujos y chamanes de Catemaco y Platón Sánchez le dieron hace unos días en su primer periplo por la entidad como precandidato oficial del PRI a la gubernatura del estado.
Y es que, ayer, el diputado local con licencia Héctor Yunes Landa anunció que su caso ya está en manos del Tribunal Federal Electoral (TRIFE) y que confía en que antes del 8 de marzo le otorgue la reclamada precandidatura priista que le fue asignada a Duarte.
“Espero que sea una decisión justa, equitativa y apegada a derecho y que los magistrados reconozcan mi derecho a participar como precandidato del PRI a gobernador de Veracruz”, comentó Yunes Landa en una rueda de prensa realizada en un popular café porteño.
Según informó el ex líder del Congreso local, el pasado sábado 27 presentó el recurso de inconformidad ante la Comisión de Procesos Internos del PRI estatal por la negativa del registro como precandidato a la gubernatura y, al día siguiente, este domingo 28, se desistió ante la Comisión Estatal de Justicia Partidaria a fin de estar en condiciones de recurrir al TRIFE.
Yunes Landa, quien tiene fama de ser un buen abogado, explicó que enseguida solicitó a la Comisión de Procesos Internos del CDE del PRI el Juicio de Protección de sus Derechos Políticos Electorales del Ciudadano, y que esta instancia partidista disponía de 24 horas para presentarlos ante la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
Precisó que “el día de hoy lunes (1 de marzo) el Comité Directivo Estatal del PRI está obligado a remitir al TRIFE este Juicio de Protección de Derechos Políticos Electorales que presenté ayer”. Y detalló que el Tribunal Federal Electoral tiene un plazo para resolver hasta que aún sea reparable el presunto daño causado, lo que tendría que ser antes de la convención priista para elegir al candidato a gobernador.
Yunes Landa consideró que a más tardar este miércoles 3 el TRIFE debe publicar en estrados la admisión de este juicio y que en los siguientes días, dado que el tiempo de precampaña está en marcha, a más tardar el viernes 5 o el próximo lunes 8 pueda resolver.

El ex subsecretario de Gobierno dijo tener “mucha confianza en que (el TRIFE) lo hará favorablemente y se me reconozca mi derecho a participar como candidato a gobernador”.

El próximo lunes, entonces, llegará a su fin esta telenovela que lamentablemente para Yunes Landa no ha despertado el gran interés que esperaba al interior del partido tricolor, pues la “bufalada” del Revolucionario Institucional, del PVEM y hasta del PT --como ha sido el caso de Catemaco, donde gobierna el alcalde petista Jorge Alberto González Azamar– se ha desbordado en torno de Duarte de Ochoa.

El rating de Héctor Yunes ha sido igual o peor de decepcionante que el bodrio de Televisa “Amor Salvaje”, cuyos capítulos han tenido que recortar precisamente por su escasa audiencia.

Sin embargo, en unos días se sabrá si el de Yunes Landa también tendrá un final feliz de telenovela o si, en cambio, el TRIFE le da pauta para prolongar su dramático “culebrón”.

OTRO HÉCTOR ‘INFIEL’
Este Héctor no es Yunes Landa sino Héctor Pérez Morales, pero a ambos los une coincidentemente la infidelidad.
Y es que en la elección de 2004, Pérez Morales apareció como candidato a presidente municipal de Paso de Ovejas por el partido Convergencia. Había intentado ser postulado por el PRI pero no recibió el respaldo que necesitaba del gremio cañero. Molesto, durante toda la campaña arremetió en contra de los priistas y particularmente del entonces candidato a gobernador Fidel Herrera Beltrán.
En toda la región se recuerda cómo Héctor Pérez quemó la propaganda de Herrera Beltrán y cómo influyó para que el municipio fuera gobernado por el panista Daniel Villalobos, un músico que lo mejor que hizo fue endeudar al Ayuntamiento. Apoyado por Héctor Yunes, también candidato fallido en esa elección, Pérez Morales fue “premiado” y llevado a la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Rural, Forestal y Pesca (Sedarpa) y colocado como jefe del Departamento de Recursos Humanos.
Desde ahí Pérez Morales se ha dedicado a crear conflictos y promover intereses que nada tienen que ver con el espíritu de la fidelidad y los compromisos que Fidel Herrera ha hecho con los hombres del campo. El más reciente fue del lunes 18 de enero, cuando más de 350 trabajadores sindicalizados de la Sedarpa tomaron las instalaciones y acusaron a Héctor Pérez de querer robarles algunas plazas que legítimamente les correspondían.
Tuvo que intervenir el propio secretario Juan Humberto García Sánchez para resolver el problema y detener la voracidad del subordinado. “No es posible que este problema sólo lo tengamos en la Sedarpa, porque en ninguna otra se nos ha presentado una situación similar, nos han respetado a nosotros como trabajadores y no han pasado por encima de nuestros derechos”, expresó ese día la secretaria general del Sindicato Democrático de Trabajadores al Servicio del Poder Ejecutivo, Margarita Carmona Cortés.
Pero la historia de Héctor Pérez Morales no concluye ahí. A finales del mes de diciembre, con la mano en la cintura, palomeó la lista de empleados de la Sedarpa e injustamente dio de baja a algunos trabajadores sin avisarles, como es el caso de un señor de 84 años que se desempeña en el vivero “La Unidad”, del municipio de Paso de Ovejas y que después de un mes y 18 días de laborar se enteró que está dado de baja por la sencilla razón de que Pérez Morales así lo decidió.
¿Sabrá de estas injusticias el secretario García Sánchez? ¿Sabrá de estos detalles el gobernador Fidel Herrera, quien tantos compromisos ha hecho con los hombres del campo? ¿Estas son las estrategias que Héctor Pérez utiliza para ayudar a llegar a la presidencia municipal de Paso de Ovejas a Adolfo Ramírez Arana, el hijo del ex alcalde Adolfo Ramírez Peña que tan malos recuerdos dejó en esa demarcación?
Presuntamente Héctor Pérez se ha involucrado en ayudar a su amigo a ser alcalde porque éste le habría prometido que en el 2013 lo dejará de sucesor, pero el funcionario de la Sedarpa se ha olvidado de cumplir las responsabilidades que sigue teniendo en este gobierno que le dio la mejor oportunidad de su vida a pesar de la memorable quema de la propaganda priista de Fidel Herrera, a quien hace seis años le jugó las contras como candidato a gobernador.