Se podría decir que en tan solo un mes si lo trasladamos a resultados cuánticos o de competencia el hampa le ha pegado duro y tupido a Veracruz. Pero sobre todo que ha vuelto un tipo de delincuencia que antes no se veía tan activa en la entidad como son los asaltos bancarios.
El gobierno de Javier Duarte registró en el penúltimo año una racha de asaltos a mano armada a estas instituciones, principalmente a mediados del sexenio de noviembre o diciembre del 2013 a mediados del 2014, algunos otros ocurridos en el 2015, con más de una decena de atracos.
Y en septiembre del 2015 la Fiscalía General del Estado anunciaría que en la Zona Sur Coatzacoalcos se desarticuló una banda delictiva a la que se atribuyen varios robos a bancos de la conurbación Veracruz-Boca del Río, sur de la entidad y Tuxtepec, Oaxaca.
Pero es curioso que entrando el nuevo gobierno se hayan revivido este tipo de delitos. En diciembre y enero han sucedido más de una docena de atracos. Tan solo la semana pasada fueron 3 instituciones robadas y esta semana con el evento del banco Banamex en la avenida Circunvalación en el puerto de Veracruz otros tres.
Hay quienes en forma descabellada afirman que se trata de una “sombra” oscura que pretende desestabilizar al gobierno entrante. O algunas fuerzas oscuras que pretenden darle más chamba de la que tiene.
Apenas el 3 de diciembre dos sucursales fueron atracadas en el puerto de Veracruz. Una de Banamex en el Coyol y la otra sucursal de Scotiank frente a Villa del mar.
Un mes después el 2 de enero de este año, el gobernador Miguel Angel Yunes dijo al respecto:
“Son asaltados fuera del banco, y en algunos casos, un caso que yo recuerde en la calle de Independencia, adentro del banco, la banca se escuda que la ley federal señala que la responsabilidad en todo caso de los bancos, se suscribe a contratar policías a través de una institución que existe que se llama Sefoban, pero no hay normativa que obligue a los bancos frente a la ciudadanía o frente al gobierno del estado”.
Esto al referirse a los hurtos a mano armado sobre los clientes que acuden a depositar o retirar dinero. Sin embargo, el problema es más grave cuando se habla de que los delincuentes entran con el objetivo de apoderarse del botín en las instituciones bancarias pero también arrasan con los que se encuentran en su interior.
Y es que para Yunes los bancos deben contratar esa vigilancia para que resguarden no sólo a esas instituciones sino a los clientes.
Ha hecho hincapié en que no hay seguridad interna y por tanto pareciera que entonces los robos van a continuar. Es como un pasaporte sin limitantes para la delincuencia.
Y para terminar, lo que ha sido histórico, señala que existen sospechas de que algunos empleados bancarios están coludidos con delincuentes para atracar a las personas que acudan a retirar altas cantidades.
Esto obviamente ha sido un modus operandi pues con la complacencia desde el interior se facilitan los atracos. No es nuevo.
Lo que no se comprende es como es que estos robos se encuentren incontenibles. Y no haya siquiera algún anuncio de investigaciones u operativos para frenar la ola delictiva.
Pueden llevarse millones de pesos de los bancos finalmente las aseguradores o los mismos tendrán que cargar con la responsabilidad pero lo que no se vale es alterar la vida diaria de los veracruzanos. Por cierto que esta situación se está presentando con mayor frecuencia en Veracruz puerto y Boca del Río.
Así que Veracruz está bajo el imperio de los asalta bancos. Diez o 15 a cero. En la lona. Ya ni se sabe bien la cuenta.
FIDEL NO VIENE. Por cierto también que el llamado lado oscuro de la política, Fidel Herrera Beltrán no estará hoy como tanto se había vaticinado.
Aún con las bardas pintadas en el norte y zona centro del estado para darle su bienvenida. De las noticias como si fuera el Día de los Inocentes, de que anunciará su candidatura a la alcaldía de Veracruz y que encabezará alianza con el Verde, lo real es que de buena fuente se supo que hasta anoche estaba aún en Barcelona. Así que tampoco habrá rueda de prensa.
Su arribo y primera estancia será en la ciudad de México y aún ni confirmado si pisará tierras veracruzanas. Quizá Fidel sabe que deberá ser más cauteloso ahora que vio que la cosa va en serio desde el lado yunista. La detención del líder de los 400 pueblos, César del Angel, y la solicitud de desafuero del diputado federal, ex tesorero del Estado, Tarek Abdalá son dos avisos como para no confiarse.
Don Fidel deberá demostrar si viene “muy gallito” o le mete cálculo político.