Nuestra reportera en la ciudad de México, Paulina Ríos, nos hizo llegar una sólida versión sobre una documentada especulación que circula en los círculos políticos federales sobre una decisión cupular donde el PRI acepta perder en el estado de Veracruz a cambio de recuperar otras entidades, donde figura en primer lugar la gubernatura de Puebla.

Son estrategias electorales que tiene como fin posicionarse en los comicios del 2018, lo que justifica los medios adoptados.

Por los compromisos adquiridos en el Pacto por México con el PAN y el PRD están de acuerdo que dicha alianza partidista en la entidad veracruzana sea la beneficiada en los sufragios del año entrante.

Aunado que consideran en las esferas políticas difícil y complicado que el partido tricolor obtenga el triunfo por el rechazo existente entre la ciudadanía hacia el partido mantenido en el poder durante más de ochenta años y la recriminación popular hacia las administraciones estatales.

Dentro de ese compromiso que se mantiene en el secreto figura que el PRI propondría un candidato débil que facilitaría la llegada del abanderado de la coalición de los azules y los del sol azteca.

Dentro de todo ese marco especulativo se apunta también bloquear que el candidato de Morena, el diputado Cuitláhuac García, tenga menos posibilidades de obtener la gubernatura. Les preocupa el apoyo que le van otorgar la gran mayoría del magisterio veracruzano. Es un acuerdo político de los docentes locales porque existe un abierto rechazo a los líderes estatales del SNTE. Los problemas de pago a los jubilados y el retraso en los bonos inclinó la balanza hacia la izquierda de los casi doscientos mil profesores.

Otro aspecto, es la nula importancia que se otorga en esferas políticas de esta ciudad capital a la figura de los candidatos independientes de Veracruz. Hay un desconocimiento de quienes son Gerardo Buganza y Juan Bueno Torio, en cambio si le dan relieve a Elías Miguel Moreno Brizuela quien ocupara un importante cargo en el gobierno capitalino de Marcelo Ebrard.

El manejo mediático que se pretende dar destaca la intención de que en el gobierno de Peña Nieto sí existe la democracia y se pone como ejemplo la entidad veracruzana y por otro lado el gobierno federal tiene la intención de manipular a columnistas políticos como una especie de castigo al mal manejo financiero y la impopularidad de los gobiernos estatales.

Sobre este polémico caso de las posibles elecciones arregladas participan directivos de Televisa y otros medios que contarán con instrucciones para otorgarle mayor importancia ascendente al candidato de la oposición e intrascendencia y pobreza a la propaganda del aspirante priista.

La periodista Paulina Ríos asegura que sus fuentes son confiables y que podría afirmar que al parecer la gubernatura veracruzana está pactada. Ciertas declaraciones como la del senador Yunes Landa, quien afirma que aun no hay candidato del PRI fortalecen la versión de la reportera.