Seguridad es una responsabilidad del estado
Ante los lamentables hechos de violencia cometidos en contra de migrantes por grupos delincuenciales, el gobernador del estado de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, anunció una estrategia política y exclusivamente mediática, pero totalmente improcedente, consistente en denuncias, que la Procuraduría del Estado presentará en contra de las compañías ferroviarias que pasan por la entidad, ante la Procuraduría General de la República, con el pretexto de la responsabilidad que recae sobre ellas al permitir el tránsito de ilegales.
Las denuncias serán improcedentes porque el tema de los homicidios y vejaciones cometidos en contra de migrantes no es responsabilidad de las compañías ferroviarias, se trata de una omisión de Federación y Estado, debido a que lo anterior deriva de un problema de seguridad y carácter migratorio, así es que una vez más alguien asesoró mal al gobernador, para salir al paso con temas mediáticos, con acciones que suenan escandalosas, pero que en ningún momento se apegan a derecho.
Las empresas ferroviarias solo transportan carga y no personas y, si en su paso, los migrantes utilizan de manera ilegal dicho medio, conocido como “La Bestia” para tratar de cumplir su sueño americano, es una circunstancia que rebasa la competencia de las mismas.
Duarte precisó que dichas denuncias se presentaran a partir de esta semana ante la PGR en contra de las compañías, en “donde se generan los hechos de violencia en contra de migrantes a bordo”.
En su tradicional conferencia de prensa, dio a conocer lo anterior y cuestionó por qué no se ha preguntado a las compañías ferroviarias sobre su responsabilidad, pues son éstas las que permiten que se suban los migrantes, de manera que se debe hacer un deslinde de responsabilidades.
Y la pregunta aquí sería ¿cuál sería la responsabilidad del Estado por no combatir las bandas delincuenciales que asesinan a migrantes, tras exigirles una cuota?
La Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Publica -emana de lo establecido en el articulo 21, párrafo séptimo de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos- establece en su artículo segundo, párrafo primero, titulo primero de disposiciones preliminares que:
“La seguridad pública es una función a cargo de la Federación, el Distrito Federal, los estados y los municipios, que tiene como fines salvaguardar la integridad y derechos de las personas.
“Así como preservar las libertades, el orden y la paz públicos y comprende la prevención especial y general de los delitos, la investigación para hacerla efectiva, la sanción de las infracciones administrativas, así como la investigación y la persecución de los delitos y la reinserción social del individuo, en términos de esta ley, en las respectivas competencias establecidas en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos”.
Además en su párrafo segundo, del mismo artículo, de la citada ley, también se precisa:
“El Estado desarrollará políticas en materia de prevención social del delito con carácter integral, sobre las causas que generan la comisión de delitos y conductas antisociales, así como programas y acciones para fomentar en la sociedad valores culturales y cívicos, que induzcan el respeto a la legalidad y a la protección de las víctimas”.
Por lo que resulta improcedente y hasta ridícula, la pretensión de cargar responsabilidad a las compañías ferroviarias de la inseguridad que prevalece, al ser una responsabilidad completamente de las entidades federativas, al no combatir a las bandas delincuenciales que operan en las inmediaciones de las vías extorsionando y asesinando a los migrantes.
Los indocumentados, ante la falta de oportunidades, transitan por territorio mexicano en busca de mejores oportunidades, al igual que lo hacen los mexicanos al emigrar a los Estado Unidos de Norteamérica.
Se trata de problemas migratorios y de seguridad que son responsabilidad de las autoridades y no de las compañías; así es que una vez más los asesores del gobernador se equivocaron al enviar al Ejecutivo a una conferencia mediática con un tema rimbombante que puede ocasionar primeras planas, pero que en temas de estricto derecho es totalmente inverosímil, débil o improcedente.

@magzamu