Columna: Se dice que...
Se dice que...
La tormenta polÃtica
Es una especie de tradición de los gobiernos priistas utilizar el primer mes del año como un llamativo inicio de renovación gubernamental que implica grandes cambios en su equipo de trabajo y espectaculares golpes mediáticos, donde muestran la mano dura del poder Ejecutivo.
No se puede perder de vista que el presidente Enrique Peña Nieto sigue la misma escuela de su principal asesor Carlos
Salinas de Gortari. En el mes de enero fue la planeada captura del lÃder nacional de los petroleros, JoaquÃn Hernández Galicia, que provocó la renuncia inmediata del dirigente magisterial Carlos Jonguitud Barrios y el surgimiento de maestra Elba Esther Gordillo, propuesta por Marcelo Ebrard, en aquel entonces secretario de Gobierno del Distrito Federal.
Fue también en un mes de enero cuando se les obligó a presentar sus renuncias a Fernando Gutiérrez Barrios, secretario de Gobernación y al procurador general de la República, Ignacio Morales Lechuga. Los tres mencionados son originarios de la entidad veracruzana.
Como el primer mes del año es muy negativo para los polÃticos locales, con estas remembranzas se especula fuertemente, en cÃrculos de esta ciudad de México, que se vienen situaciones difÃciles para la clase polÃtica veracruzana.
Y como clave para darle fuerza a esta versión es el deslinde abierto y público del gobernador Javier Duarte de Ochoa con respecto a su antecesor, el popular Fidel Herrera.
Al parecer, hubo lÃnea de muy arriba para que el ejecutivo estatal reprobara en todos los aspectos la pasada gestión del polÃtico cuenqueño.
No existe otra explicación para la redundancia del discurso duartista en lo desastroso en que se encontraba la administración fidelista, tanto en los aspectos financieros como la violencia e inseguridad existente.
Resulta difÃcil justificar de manera razonable el claro rompimiento entre los dos polÃticos, máxime cuando es del conocimiento que la carrera polÃtica del actual gobernante se la debe de manera Ãntegra a su antecesor.
Es sin duda una brutal tormenta polÃtica que sacudirá los cimientos de la estructura del gobierno estatal, donde la gran mayorÃa de los funcionarios actuales tienen la herradura indeleble del gobierno de Fidel Herrera. Esta acción tiene
el visto bueno de Los Pinos, lo que provocará un ensañamiento a lo que tenga el más ligero aroma del fidelismo.
No hay vuelta de hoja
Tienen plena seguridad los senadores del PRI y del PAN que la aprobación de la Reforma Energética es solo un simple trámite. No cuenta la consulta popular o la oposición que rechaza la privatización.
Para José Yunes y Jorge Luis Preciado hasta fijan la fecha donde quedará autorizada la participación extranjera.
ProhÃben espectaculares
En Puerto Vallarta, considerada como uno de los sitios preferidos por el turismo nacional y extranjero, tienen prohibido los espectaculares que tanto afean las avenidas de las ciudades. Las asociaciones de hoteleros obligaron a las autoridades estatales a que no permitieran este tipo de
promociones que a nadie interesan y de manera especial a los visitantes.
Si la idea es hacer de Veracruz y Boca del RÃo un polo de desarrollo turÃstico, serÃa un principio prohibir los espectaculares que por lo regular son utilizados por los polÃticos para promoverse o dar a conocer resultados que solo en su imaginación existen.