El líder empresarial, Jesús Castañeda, hace un llamado al gobernador Javier Duarte a fin de que les amarre las manos a los miembros de su gabinete que compran artículos y servicios a nombre del gobierno del estado; la propia Secretaría de Finanzas desconoce el monto de estos compromisos.
Son los altos funcionarios que hacen compras fuera del presupuesto y carecen de capacidad de pagar. Están acostumbrados a cargar al gobierno toda clase de prestaciones y trabajos que en numerosas ocasiones son ajenos a los servicios de la dependencia, se podrían considerar como gastos de índole personal.
El presidente del Consejo Coordinador Empresarial se abstuvo de dar nombres de los secretarios que ocurren a estos excesos, pero dijo que son la mayoría.
El problema se agudizó este fin de año, provocando que las empresas no puedan pagar aguinaldos y no cumplir con otros compromisos.
Simplemente el gobierno estatal a nadie le paga excepto a sus funcionarios.
Lambiscón para un cargo
El Movimiento Regeneración Nacional (Morena) ya es partido político. Andrés Manuel López Obrador en su calidad de presidente nacional de ese organismo resaltó que no se busca su constitución para tener legisladores en los congresos o para cargos públicos. Quien piense que Morena servirá de trampolín están equivocados. “Para ocupar un cargo público es demasiado fácil. Con ser medianamente inteligente y un poco lambiscón es más que suficiente”.
No caben dirigentes que pierdan el piso o políticos que “llegan a un cargo y cambian de manera de hablar, la forma de vestir, de caminar, se pavonean, se sienten muy importantes. ¡Ridículos son!”
Aprovechó la ocasión para fustigar a los líderes locales que se dicen de izquierda. Abandonaron ideales y principios. Nada más están pensando en los cargos, en el poder por el poder, en el dinero. El tabasqueño conocía el caso de los regidores del sur de Veracruz que se les exigió una “cuota” de medio millón de pesos en el momento que tomaran posesión.
Las valiosas precampañas
Los gastos de posicionamiento de los aspirantes locales a la gubernatura de Veracruz ascienden a varios millones de pesos que se les entregan a los dos punteros más visibles que son los secretarios Alberto Silva y Erick Lagos. Según versiones dadas a conocer de manera extraoficial por parte de funcionarios relacionados con la Contraloría del Estado. No es secreto para la burocracia estatal que se manejan recursos en dichas dependencias.
De acuerdo a la diferencia del volumen del dinero, se puede conocer quién de los dos se encuentra en un mejor estado de ánimo del que toma la decisión de este reparto.
Una costumbre económica que se estableciera en anteriores administraciones y que permitía viajar a diferentes puntos de la entidad y sufragar recursos que se entregaban a personas de íntima confianza, quienes a nombre de estos precandidatos fueran creando una serie de compromisos preestablecidos para cuando se acercaran los tiempos electorales.
La secretaria de Gobierno, Nohemí Quirasco, en la época del gobernador Miguel Alemán tenía esa encomienda de apoyo al entonces senador Fidel Herrera Beltrán, que le permitió con el tiempo que fuera el que estaba mejor posicionado. Ayudas económicas muy diferentes a las fuertes sumas que se otorgan en la actualidad.