Por Maquiavelo
Columna: SE DICE QUE
Pemex , una piedra para el PAN
2013-05-15 | 22:15:22
El líder nacional del PAN, Gustavo Madero, estaba engolosinado con el caso de Sedesol en el estado de Veracruz, y Jesús Zambrano, del PRD, con la titular de la Secretaría de Desarrollo Social, Rosario Robles. Era como un pasaporte con visas para ambos dirigentes partidistas para presionar al presidente Peña Nieto.
Para Gustavo Madero era vital el pleito para sostenerse como responsable de la cúpula partidista de los azules. Parecía tener entre la espada y la pared al gobierno federal, un singular chantaje sobre la permanencia en el Pacto por México. La mala suerte que tenía el PRI tenía que terminar antes de que se iniciaran formalmente las campañas electorales en 14 estados del país.
El director de Pemex, Emilio Lozoya Austín, revivió un caso que ocurrió hace más de diez años sobre una corrupta operación millonaria realizada por el que fuera director del Jurídico de la paraestatal y ex líder nacional del PAN, César Nava.
Una nueva arma para defenderse de los embates panistas y para ello encontraron una serie de pruebas documentadas que fueron presentadas ante una corte de Nueva York, en la que exhibían torcidos manejos de los panistas quienes manejaban en aquellos años la principal empresa de la nación.
Intentaron defraudar a Pemex con la conspiración de reconocidas empresas trasnacionales Siemens y S.K. Enginering, con trabajos a precios elevados en la configuración de la refinería de Cadereyta.
Al fin, el PRI contaba con un as escondido en la manga para detener el problema de Sedesol que amenazaba el desarrollo del proceso electoral del próximo siete de julio.
El problema surge con César Nava que también realizó actos de venalidad con autoridades priistas en diversas entidades.
A César Nava no le interesaba si eran panistas o priistas, lo único que le importaba eran las sumas de dinero. Un tema que va a ser bandera de otros partidos políticos para desprestigiar tanto a los azules como a los rojos.

El pleito Yunes-Fidel

Para la revista Proceso no hay duda que el que recibía dinero, (hasta doce millones de dólares) era Fidel Herrera Beltrán para su campaña como candidato del PRI para gobernador de Veracruz por parte de Francisco Colorado Cessa, como intermediario de un grupo del crimen organizado, y para el periódico Indigo, una investigación en los Estados Unidos a través del FBI, la relación del mismo grupo con Miguel Ángel Yunes Linares. Es el mismo caso con enfoques muy diferentes y alguien detrás que mueve los hilos de estas particulares especulaciones que responden a intereses ajenos a un periodismo objetivo de investigación. Se han generalizado los casos de testigos protegidos que al final solo encuentran como excusa el “Usted perdone”. Se trata de notas que no llevan firma.
Por razones obvias no se entran en detalles por los riesgos que implican este tipo de suposiciones donde se pone en riesgo aspectos de seguridad de los supuestamente involucrados.
Prohibido enfermarse

La atinada respuesta del secretario de Salud, Juan Antonio Nemi Dib, merece un recuadro en la sala principal de esa dependencia. Ante el reconocimiento que el sector se encuentra en una seria crisis por falta de galenos y medicinas. El titular dio como brillante solución: “No se enfermen”.
La clave del documentado articulista está en la medicina preventiva. ¿Habrá alguien dentro del estado que a propósito se quiera enfermar?

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