¡Qué modo tan infame de empezar la semana! ¡Con un cuento del peor gusto posible! Las personas que no gusten de leer cuentos del peor gusto posible sáltense éste y empiecen la lectura donde dice: “Al Presidente Peña Nieto se le está enredando la pita”…
Don Vitolano sufría una adicción tremenda: el puro. No podía vivir sin traer uno en la boca. El doctor Duerf, psiquiatra de gran fama, le recomendó que antes de dormir se pusiera el puro en salva sea la parte. Con eso se le quitarían las ganas de llevárselo a los labios el siguiente día. El tratamiento dio resultado: don Vitolano dejó el puro.
Días después, sin embargo, le dijo con lamentoso acento a su mujer: “¡Extraño mi purito!”. Ella lo amonestó, severa: “¡No se te ocurra volver a ponerte uno en la boca!”. “No lo extraño en la boca –replicó don Vitolano-. ¡Pero ahora no puedo dormir si no tengo uno en salva sea la parte!”…
Al Presidente Peña Nieto se le está enredando la pita. El problema planteado por la CNTE, ese grupo que se dice revolucionario y es en verdad absolutamente reaccionario, se complica más cada día. Igual sucede con el conflicto que por estos días –, semanas, meses, años, décadas- afronta la UNAM. A eso se sumó una frase sumamente infortunada dicha por el Presidente: “No te preocupes, Rosario”. Sus palabras dieron idea de autoritarismo y prepotencia ante los reclamos de la oposición, e hicieron pensar en un regreso a los viejos usos priistas, aquellos de “Ni los veo ni los oigo”.
Ahora hay quienes piensan que el orgullo mayor del nuevo régimen, el Pacto por México, ha perdido su brillo y eficacia, y aun que está en riesgo de desaparecer. La denuncia hecha por el dirigente del PAN acerca del uso electorero de recursos públicos en Veracruz fue un rudo golpe para la administración de Peña Nieto. En un país más democrático que el nuestro la responsable de la correcta aplicación de esos recursos habría sido separada ipso facto de su cargo. Aquí el Presidente le dio su apoyo y la puso por encima de las reclamaciones.
El panorama en verdad se ve sombrío. Impunidad para los que se dicen maestros de la CNTE; impunidad para los encapuchados de Rectoría; impunidad para quienes por acción o por omisión hacen que los programas sociales se conviertan en políticos.
Desde luego en este caso el dirigente panista carece de autoridad moral para poner el grito en el cielo, en la tierra y en todo lugar: durante los sexenios de Fox y Calderón las delegaciones estatales de las secretarías se convirtieron en enclaves para fortalecer al PAN. Tampoco el PRD se salva de estas culpas. El mayor problema de México es que aquí hay demasiada política y muy poca aplicación de la ley.
De ahí los abusos constantes de la CNTE; de ahí las acciones trogloditas de quienes tienen en jaque perpetuo a la máxima casa de estudios del País; de ahí la malversación de fondos que deberían llegar a los mexicanos pobres y van a parar en manos de los políticos ricos. Y ya no le sigo, porque estoy muy encaboronado…
Don Chinguetas y doña Macalota decidieron ir de compras al supermercado. Hacía un calor de infierno, de modo que don Chinguetas se puso un short ligero, y su mujer un vestido de organdí. Al llegar al estacionamiento el señor oyó un ruido extraño bajo el coche. Le dijo a doña Macalota que hiciera las compras mientras él revisaba el vehículo.
Al salir ella del supermercado vio un corro de personas que muy divertidas veían algo y lo comentaban entre risas. Se acercó. ¡Horror! Lo que la gente estaba viendo era la entrepierna del hombre que estaba abajo del coche, y cuyo short dejaba ver todas sus partes pudendas. Azarada, doña Macalota se agachó, y con sus manos acomodó las dichas partes de modo que no se vieran ya.
Ya no se vieron, pero la señora pudo ver otras dos cosas: a su marido, con cara de sorpresa entre la gente, y al hombre que estaba abajo del coche, y que salió de ahí con expresión de susto y sangrando profusamente por el golpe que se dio en la frente cuando se enderezó al sentir una mano extraña en su región más íntima…
Eran dos matrimonios muy cercanos entre sí. En el curso de una de sus charlas coincidieron en que su vida sexual era muy aburrida. Uno de los esposos propuso que cambiaran de pareja; seguramente eso pondría interés en su relación. Esa noche, en la cama, el marido le preguntó a su nueva pareja: “¿Qué crees que estarán haciendo ahora nuestras esposas?”… FIN.

mirador
armando fuentes aguirre

Clamó un predicador en su sermón:
-¡Huid de las tentaciones de la carne!
Sus feligreses comentaron al salir del templo:
-Es un gran predicador.
Dijo otro predicador en su sermón:
-Vuestros vestidos y vuestros zapatos están hechos con las vidas de trabajadores a quienes no se les paga un salario justo. Aquí el pan es muy caro, y la carne y la sangre del hombre muy baratas.
Sus feligreses comentaron al salir del templo:
-Está loco.
¡Hasta mañana!...


manganitas
por afa
“…Escandaliza la hija de un funcionario…”.
Esas niñitas malcriadas
que salen de la política
no merecen una crítica:
merecen unas nalgadas.