Una y otra vez sufre albiazul traiciones
García Escalante, Batalla, Renato, etcétera
EN LA LÍNEA. Penales, el coco y reto de Reynaldo
Una vez más el Partido Acción Nacional ha padecido las consecuencias de su pragmatismo y ha vuelto a tropezar con la “misma piedra”.
Hay que recordar que la renuncia del diputado local por Pánuco, Ricardo García Escalante, a la fracción parlamentaria del blanquiazul en el Congreso local fue una historia que ya habían vivido en el fidelismo.
Abanderar priistas no ha sido la mejor opción, pues aunque en las elecciones obtuvieron triunfos y votos al final de cuentas les pasó el efecto “boomerang”.
Un caso que no olvidarán fue el del famoso legislador local por Papantla, Francisco Herrera Jiménez, mejor conocido como el “magazo”.
El ex candidato Gerardo Buganza Salmerón y su entonces asesor Miguel Angel Yunes Linares apoyaron la postulación de este maestro y con su triunfo le dio una curul más a Acción Nacional.
Pero después enseñó el “cobre” cuando apareció votos de más para como por arte de magia hacer que Emeterio López Marquez tuviera la mayoría calificada y fuera ratificado como procurador de justicia. Eso fue vital para la designación del maestro Emeterio.
Luego Paco Herrera regresó el PRI y actualmente es diputado federal por el distrito líder en la producción de vainilla.
Otro caso en esa sexagésima Legislatura fue el de Blanca Armida Batalla, quien se declaró independiente cuando en el PAN no le dieron la candidatura a la alcaldía de Alamo Temapache.
Fue otra alianza transitoria que solamente sirvió para ganar en su momento un espacio en el Congreso, pues así como llegó fácil, fácil se fue.
Uno más se dio en la sexagésima primera Legislatura con el caso de Renato Tronco Gómez, quien en el 2004 fue abanderado como candidato externo para la presidencia municipal de Las Choapas y posteriormente fue postulado como candidato a diputado local por Coatzacoalcos II donde obtuvo el triunfo.
Pero apenas a unos días de tomar protesta se declaró independiente y debilitó más a la bancada azul, la cual se quedó con 11 curules.
Hoy la historia se repite con Ricardo García Escalante, quien fue llevado al PAN por el ex candidato a la gubernatura Miguel Angel Yunes Linares y como lo hemos consignado, ahora que su “padrino” ya perdió “gas” decidió junto con su padre Ricardo García Guzman regresar al tricolor.
El PAN debe replantearse muy bien si va a seguir abriéndole las puertas a priistas resentidos, pues las experiencias demuestran que solamente usan las siglas como si fueran “kleenex” y después lo desechan de acuerdo a sus intereses.
Tienen que recordar el dicho de que quien traiciona una vez lo hace siempre, pues al final son mercenarios de la política.
EN LA LÍNEA
El desorden en el sistema penitenciario veracruzano no es nuevo.
Es el coco de los gobiernos en turno. Es también muchas veces, el negocio redondo para quienes son los titulares.
En el sexenio de Fidel Herrera Beltrán hubo por lol menos siete directores diferentes, hasta que el abogado Samuel Juárez López logró perdurar casi los últimos dos años, pues al final de ese periodo se realizó el último cambio, para darle paso luego al hasta ayer titular, Víctor Flores.
Hasta el 2008 estuvieron Martha Montoya Barradas, Harry Jackson Sosa, Cirilo Rincón Aguilar y, José Luis Arcos Jiménez.
Luego vino el caso de Ceferino Uscanga, quien se sacó la rifa del trigre, y no tardó mucho en renunciar al cargo, tras las presiones que una y otra vez sufría por su encargo al frente de esa dependencia.
Desde la época de Arcos se habló de la falta de control en el interior de los ceresos, de los autogobiernos y de la necesidad de reubicar presos de penales como Cosamaloapan, Amatlán, Perote, Jalacingo, Orizaba, Miasantla, y Veracruz, que a la postre fue cerrado.
Es sin duda un área que requiere de mano enérgica, del control absoluto del Estado, y lo ocurrido ayer no es nuevo.
En el sexenio de gobierno fidelista también hubo fugas. También se realizaron operaciones concertadas para sacar a los maleantes de prisión, pero la diferencia es que en ese tiempo, salvo con la renuncia o remoción de los funcionarios bajo la responsa bilidad del entonces secretario de Gobierno, Reynaldo Escobar Pérez, no ocurría nada.
Por lo menos, ahora, se registró el inmediato cese del titular de Prevención y Readaptación Social, Víctor Flores Hernández, previamente ya habían sido detenidos cuatro directores de área de los tres penales inmiscuidos en las fugas de reos.
Toca también a Reynaldo Escobar pero ahora como Procurador ir a fondo en las indagatorias al respecto, pues el triple hecho perpetuados entre dos y cuatro de la mañana, deben tener una misma línea de investigación. Algunos de ellos, fueron sus colaboradores o por lo menos dependían de la secretaría de Gobierno de la que él era titular. Así que será interesante conocer hasta donde llega y con el lineamiento de un gobernante que al parecer no dará tregua a la impunidad.
Es así, como se explica, la rápida acción, al reaprehender a catorce de los treinta y dos reos.
Un ajuste importante requiere esta parte del gobierno duartista, sin duda.