* Crónica de una elección negociada
* Se preservó la voluntad ciudadana y evitó violencia
EN LA LINEA. Final sentenciado a los Tiburones

Alrededor de las nueve de la noche del jueves, el pleno de la negociación se daba entre la dirigencia del PAN, los del PRI, y funcionarios de Gobierno del Estado.
Si bien se trataba de un tema poselectoral, el asunto es que la violencia estaba atrás de la puerta, luego del enfrentamiento suscitado el miércoles en las instalaciones del IEV, y esto hizo tomar conciencia a las partes que afortunadamente tomaron acuerdos rápidos e importantes. Pero preocupó más al gobierno estatal aunque en el marco legal no puede ni debe tener injerencia, sin embargo, el tema de una zacapela poselectoral si era su responsabilidad evitarlo.
Esto llevó primero a respetar estrictamente el conteto que finalizó el jueves, tras heber sido suspendido un día antes por los hechos violentos, con cinco votos a favor de Acción Nacional.
Esa misma tarde se le informó al candidato del PRI en José Azueta que había perdido, mismos resultados que ya había adelantado el Programa de Resultados Electorales Preliminares, PREP, el pasado domingo.
Esto generó por el contrario, la inconformidad de los priistas que sin embargo, ya estaban predestinados a la derrota con el resultado previo.
Y es que ante la situación tensa que se vivía desde el día de los elecciones en ese municipio había que preservar la gobernabilidad, calmar ánimos y darle una salida adecuada para evitar que la violencia estallara en la región.
Por eso, de acuerdo a las versiones, ambas partes con el testimonio del gobierno estatal acordaron sujetarse al conteto definitivo del Instituto Electoral de Veracruz, el IEV, dejar atrás los choques violentos y fue cuando apenas con cinco votos de diferencia, el candidato del PAN se alzó con la victoria.
El secretario general del PAN, Hermann Ortega aceptaría la intervención del gobernador, Javier Duarte en ese sentido. Buscar que la legalidad en el IEV se impusiera a cualquier reclamo de los partidos y sus intrereses.

EN LA LINEA
Lo que estaba sentenciado. Finalmente los Tiburones Rojos del Veracruz desaparecieron prácticamente al desafiliar la Federación Mexicana de Futbol su franquicia como sanción a los adeudos que no cubrió el empresario y dueño de la misma, Mohamed Morales.
Tradición futbolera de toda la vida. Nombre legendario de los Tiburones Rojos, fueron borrados de un plumazo.
Una negociación amañada entre el empresario y el anterior gobierno llevaron a este triste final al equipo rojo, del que hay seguidores finalmente que tienen entrega y cariño por su equiopo.
Ahora no hay opción más que el gobierno del estado debe recuperar y trasladar a Veracruz puerto la franquicia del diputado federal, Fidel Kuri Grajales, y quien también será sacudido de este negocio.
Y es que Kuri y Mohamed fue exactamente lo mismo. Se prestaron a una negociación en la que a camvbio de la franquicia debieron invertir, pero también a cuenta de ser beneficiados con obra pública y recuperar los millones de pesos que invirtieron en ellas.
Por eso, Kuri chantajea al PRI o más bien al gobernador Javier Duarte con salirse del tricolor si no le pagan sus cien millon3es de pesos.
Dinero que tiene asegurado por el lado de Acción Nacional, luego de que el plan es declararse diputado independiente y así jalar a favor de Acción Nacional en la próxima etapa electoral.
Así se mueven las cosas entre nuestros políticos. Hay de todo, menos interés por el futbol y el respeto a la afición, que finalmente es quien mantiene a un equipo.
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