No existen dudas con respecto a la inteligencia mostrada en la gran mayoría de los actos de gobierno del maestro Fidel Herrera Beltrán. La experiencia aumenta la sabiduría, pero no reduce las locuras cuando se tiene el poder.
Dentro de estos excesos en el manejo del poder durante el ejercicio político, destaca la propuesta increíble de crear la Escuela Nacional de Brujos, que estaría certificada por las autoridades educativas del gobierno fidelista.
Según los psicoanalistas, en sus momentos de lucidez, los locos son sorprendentes. En el caso del maestro Herrera Beltrán, la ciencia nos ha enseñado que la locura es lo más sublime de la inteligencia. La demencia a veces no es otra cosa que la razón presentada bajo diferente forma.
Es posible que para el común de la gente esta propuesta de crear una generación de brujos académicos como un logro de la agonizante administración estatal, la considere como una más de las tradicionales tomaduras de pelo del “tío Fide”.
El gobernante no trató de imitar a la famosa Escuela de Magia y Brujería de Hogwarts, del libro de Harry Potter. Fue un planteamiento real, hecho al entonces rector de la UNAM, doctor Juan Ramón de la Fuente. Sería un colegio de brujos al igual que la novela inglesa, pero al estilo veracruzano-mandinga y tendría como sede la Laguna de Catemaco, precisamente al lado donde se encuentra el Instituto de Biología de la UNAM.
Es tan formal la idea de la fundación de este centro de hechiceros y adivinos, que se firmó un convenio con Iresine Calzada, directora del Instituto de Capacitación del Trabajo y con Sergio Villasana, director del Instituto Veracruzano de Cultura, para que impartieran los cursos, biólogos, herbolarios y curanderos.
Resultaba complicado entregar con el aval del gobierno veracruzano, un certificado de brujo, por lo que se cambió como Técnico en Herbolaria. Por consulta cobrarían lo mismo.
El periodista de la revista Proceso, José Gil Olmos, en su libro número dos, de Los brujos del poder, relata que siempre le ha despertado un particular celo al gobernador Fidel Herrera los rituales y las limpias que acostumbra que le hagan en esa región de Los Tuxtlas. Él es un creyente natural, al igual que otros importantes políticos, de la fuerza extranatural que ejercen los hechiceros en modificar sus vidas para que alcancen lo que se proponen dentro de la compleja escala política.
Al cliente lo que pida. En el amor o en el dinero. Afirman que le enseñaron al tío Fide doblar de una manera muy especial los billetes de lotería, para que salgan premiados.
Hay razones de gran peso para que el gobernador Herrera Beltrán se comprometa con ellos que lo han sabido cultivar ensalzando su particular ego. Especialmente el brujo mayor, Héctor Betaza, alias el Cuervo quien asegura que el gobernante veracruzano tiene todo a su favor para ser el candidato presidencial en el 2012.
No le dijo por qué partido político. “Le estoy haciendo un trabajito muy especial para que llegue a Los Pinos”.
Según el Cuervo, el maestro Herrera Beltrán trasmite mucha fuerza espiritual a la gente y eso hace que lo sigan.
Decía el filósofo francés, Charles de Montesquieu, “se encierra algunos locos en el manicomio para hacer creer que los que están fuera son cuerdos”.