Los analistas políticos llegaron a la siguiente conclusión: La demorada decisión que tome el Tribunal Electoral Federal sobre las impugnaciones de las elecciones en el estado de Veracruz, tiene sólo dos vertientes, la legal y la política.
Para el Presidente Felipe Calderón y su partido en el poder se la pusieron en bandeja de plata, si se toma la decisión política. La puede negociar a su antojo para que el PRI y sus legisladores le aprueben todo lo que pretende en cuanto a sus reformas e iniciativas de ley. Además el reconocimiento de algunas presidencias municipales cuyas procesos y resultados electorales no resisten la menor investigación.
Si la decisión Trife es de acuerdo a los estatutos legales no hay la menor duda que el ciudadano Javier Duarte de Ochoa estará tomando posesión legalmente el cargo de Gobernador constitucional a las doce de la noche del martes 30 de noviembre.
El telón de esta crucial decisión se corre en la presente semana. Se terminó el plazo y con ello la desazón y el nerviosismo que provoca el teorizar sobre lo que acuerdan y sentencian los magistrados federales.
Con la tragedia del cambio climático de Veracruz, la falta de recursos de la administración estatal y el final de un recusado gobernador priísta por el líder partidista y también presidente de México, es aprovechado por poderosos medios capitalinos y amargados columnistas locales para ensañarse con el maestro Fidel Herrera. Se le podrá acusar de cualquier cosa menos de su encallecido afán de servir y ayudar las personas en desgracia. Nunca ha vacilado el gobernador veracruzano en tender la mano a quien más lo necesita. Y si de algo se precia es su discreción cuando se trata de auxiliar.

Ajeno a la política
La lectura de cualquier libro o medio impreso es para la inteligencia, lo que el ejercicio es para el cuerpo. Nada es tan saludable para las fatigas corporales y sobe todo para el espíritu, que leer una buena novela.


Ahí la lleva Fidel

En la última encuesta realizada por el periódico El Universal, a nivel nacional, el gobernador Fidel Herrera se encuentra en el sexto lugar como uno de los mandatarios estatales con mayor aceptación entre sus ciudadanos. La importancia es que ocupa un primer lugar entre las entidades con mayor población del país. También se encuentra con un mejor índice de aprobación que el gobernador mexiquense Enrique Peña Nieto.
Según este estudio Fidel Herrera Beltrán tiene un empate técnico con el presidente Felipe Calderón en cuanto al reconocimiento por su forma de gobernar. Obviamente estar parejo con el mandatario panista, no gustó para nada.
En la gran mayoría de los estados se reporta como muy escasa la mejoría económica. Es interesante destacar que la simpatía partidista por el PRI se mantiene como hegemónica en 21 estados de la Republica Mexicana. En cambio para el PAN el escenario es desalentador, sólo en cuatro estados cuentan con tasas de simpatía mayor al 20 por ciento. El bastión panista se encuentra en Guanajuato y Sonora, la tierra de su exgobernador Manlio Fabio Beltrones. Con este escrutinio a nivel nacional el gobernador Herrera Beltrán esta mejor posicionado que Enrique Peña Nieto y el senador Manlio Beltrones, sus rivales a vencer para la carrera presidencial del 2912.
Aunado que a partir del próximo mes de diciembre va a disponer de todo el tiempo que requiera para trabajar y afinar su campaña. Y no habrá nadie que lo critique porque esta en su derecho de hacerlo. Sus rivales políticos no podrán por el impedimento legal de atender sus responsabilidades como funcionarios y servidores públicos.