Por Raymundo Jiménez
Columna: Al pie de la letra
El caso ortega
2010-04-28 | 22:30:45
Como cualquier atentado contra un comunicador siempre es un hecho política y mediáticamente muy estridente –máxime cuando ocurre en medio de un proceso electoral tan apasionado y candente como el que actualmente se desarrolla en la entidad–, el gobernador Fidel Herrera Beltrán ha tenido a bien solicitar al titular de la Procuraduría General de la República (PGR), Arturo Chávez Chávez, que sea esta institución federal la que atraiga la investigación de la desaparición del periodista Evaristo Ortega Zárate, quien hace ocho días fue visto por última vez al abordar, junto con otras dos personas –Andrés Anglada Morgado y Francisco Mota Uribe–, un vehículo al salir de un hotel de la avenida Ruiz Cortines de la capital veracruzana.
Con esta decisión, el gobernador Herrera le quita a su más enconado detractor, Miguel Ángel Yunes Linares, candidato del PAN a la gubernatura, una de las banderas electorales que más agita con motivo de la aparente inseguridad incubada supuestamente en el estado por la complicidad que le imputa al mandatario estatal con una organización criminal.
Ahora corresponderá a la PGR investigar el paradero y la causa de la desaparición del periodista de Colipa, de la cual –según versión oficial del Gobierno del Estado– la administración del gobernador Herrera no se ha desentendido, pues aseguran que las corporaciones polícíacas de Veracruz siguen colaborando en su búsqueda y localización.
Lo primero que las autoridades ministeriales de la Federación deberán de deslindar es si el comunicador fue “levantado” por causas vinculadas al ejercicio periodístico o si, como se presume, habría tenido que ver en realidad con su aspiración a un cargo de elección popular y las pasiones desbordadas por los intereses de su partido, el PAN.
Y es que resulta que el lunes 19 de abril, acompañado de Francisco Mota Uribe, (a) “Chito Mota” –un ex alcalde de Colipa que ha sido involucrado en crímenes y que en marzo de 2003 fue detenido en el malecón del puerto de Veracruz junto con el lugarteniente del Cártel del Golfo, Víctor Manuel Vázquez Mireles, alias “El Meme Loco”–, Evaristo Ortega habría acudido al CDE del PAN para dialogar con integrantes de la dirigencia estatal sobre la nominación del candidato a la alcaldía de ese municipio de la sierra de Misantla.
Su otro acompañante habría sido Andrés Anglada Morgado, aspirante del PANAL a la presidencia municipal de Nautla.
Según esta versión extraoficial, para Colipa el CDE del PAN habría elegido como candidato al ex alcalde Fernando Masegosa Hernández, desplazando a Mota Uribe, quien presuntamente era impulsado por Yunes Linares, el cual, por cierto, no ha hecho hasta ahora ninguna mención sobre el ex alcalde neopanista, también desaparecido.
En esa negociación, al periodista Evaristo Ortega le habrían ofrecido la sindicatura en la planilla municipal del PAN, cualquiera que fuera el candidato a la alcaldía.
Sin embargo, dicen que Masegosa habría vetado a Ortega Zárate debido a un conflicto con el periodista que el virtual candidato del PAN habría tenido cuando presidió ese ayuntamiento. Y es que en ese trienio municipal, a través del periódico “Espacio”, Evaristo fue un severo crítico de la administración de Masegosa y lo acusó públicamente de presuntas irregularidades.
Es más, trascendió que hace algunos meses, en una reunión de panistas llevada a cabo en Boca del Río, Masegosa habría insultado y cacheteado a Ortega Zárate.
Por este antecedente es que, dicen, Mota Uribe y Evaristo Ortega habrían acordado hacer una alianza para impedir la nominación de Masegosa. Según esta versión, el primero iría como candidato a la alcaldía y el periodista a la sindicatura.
En Colipa son de sobra conocidas las diferencias entre el ex alcalde Masegosa y Evaristo Ortega.
Incluso refieren que hace unos días aparecieron panfletos con la leyenda “Fernando (Masegosa) regrésanos a Evaristo”, implicando obviamente al ex alcalde como el presunto autor intelectual de la desaparición del periodista.
Ya corresponderá a la PGR investigar a fondo las causas del supuesto “levantamiento” del periodista y de sus otros dos acompañantes, a los cuales se vincula con la delincuencia organizada que opera en la zona de Martínez de la Torre-Nautla.
A Mota Uribe, por ejemplo, se le liga con Gerardo Ochoa Artesán, (a) “Lacaine”, quien meses después de los sucesos violentos de Villarín, municipio del puerto de Veracruz –donde en marzo de 2007 participó en un enfrentamiento con sicarios y capos del Cártel del Golfo que habían asistido a una carrera clandestina de caballos, entre ellos Roberto Carlos Carmona Gasperín, identificado por la PGR como el “Z-14”, uno de los fundadores del brazo armado de ese grupo criminal– desapareció misteriosamente del estado.
Ahora, a través del PAN, “Chito” Mota buscaba apoderarse políticamente de ese importante corredor por donde transitan los cargamentos de droga. Y es que además de buscar nuevamente la alcaldía de Colipa, para el municipio de Nautla impulsaba por el PANAL a Andrés Anglada Morgado. Actualmente, quien detenta esa importante alcaldía de la llamada Costa Esmeralda es Gumaro Ochoa Artesán, hermano del desaparecido “Lacaine” y presunto primo hermano de Tomás Ochoa Celis (a) “El Tommy”, detenido a mediados de diciembre de 2009 en Tamaulipas, el cual fue identificado como uno de los principales operadores del Cártel del Golfo en el trasiego de la cocaína que traía de Guatemala y la pasaba por los estados de Chiapas, Tabasco, Veracruz hasta llegar a Tamaulipas, donde era almacenada en bodegas para su traslado a Estados Unidos.Por eso, en el caso de la desaparición del periodista Evaristo Ortega, el gobernador Herrera hizo políticamente bien en solicitarle a la PGR que atrajera la investigación, pues temía que este lamentable hecho empezara a politizarse. Y es que este martes 27 un grupo de periodistas se plantó en la Plaza Lerdo para exigir la aparición del comunicador de Colipa. Pero entre dicho grupo, que se habría negado a subir a la Secretaría de Gobierno a petición de sus funcionarios para que se les informara acerca de este suceso, fueron identificadas como cabezas del movimiento dos reporteras que coincidentemente trabajaron como publirrelacionistas para los ex diputados locales Miguel Ángel Yunes Márquez y Cinthya Lobato Calderón, dos prominentes militantes del PAN.
Ojalá pronto haya buenas noticias y se esclarezca el paradero del comunicador. Por lo mientras, lo más conveniente sería evitar que los ánimos se exacerben por las pasiones del proceso electoral.

Nosotros | Publicidad | Suscripciones | Contacto

 

 

Reservados todos los derechos 2018

Nosotros | Publicidad | Suscripciones | Contacto

 

 

Reservados todos los derechos 2018