Las fantasías de los gobiernos

El presidente Enrique Peña Nieto anunció que el año pasado se crearon más de 714 mil nuevos empleos, según cifras dadas a conocer por el propio INEGI y que fueron debidamente registradas por el IMSS.

Son trabajos reales que no se puede negar que existen.

Al ser dados de alta ante el Seguro Social dichos trabajadores y sus familiares directos cuentan con esa valiosa protección, sin regatear que el servicio que se presta tienen sus asegunes.

De acuerdo a estas cifras oficiales, se ha logrado un gran avance en el desempleo y en el desarrollo. Lo que no se sabe es que la mayoría de dichos trabajadores que fueron incorporados tienen un salario mínimo.

Está comprobado que no se puede sobrevivir con ese dinero. Dentro de esta categoría existe un elevado número de connacionales.

Más de seis millones de mexicanos solo cuentan con dos salarios mínimos que significan 4 mil 37 pesos mensuales. Con esa suma apuradamente puede comprar la canasta básica de alimentos, siempre y cuando no gaste en otras necesidades como la necesidad de transportarse, ropa de trabajo, pago de renta, energía eléctrica, gas, escuelas, uniformes y artículos escolares.

Solo por considerar algunos gastos elementales. Para ellos no existe alguna actividad de recreación dominical.


Todo cambia en política

El problema que confrontan los políticos veracruzanos es la falta de memoria. En un reciente desayuno el senador Héctor Yunes Landa criticaba acremente al dirigente estatal del partido Alternativa Veracruzana (AVE), biólogo Alfredo Tress Jiménez, porque lo había visto salir de la Casa de Gobierno y cómo un ayudante colocaba discretamente en su vehículo un maletín.

Como se venden estos dirigentes de la oposición, afirmó molesto el legislador.

Ocurre que el mismo dirigente partidista de AVE asistió a la comida que organizara el sábado pasado la agrupación Alianza Generacional que maneja Yunes Landa y de la reprochable censura al mercader político pasó al verlo presente en el presídium al desmedido elogio ensalzador del que fuera líder estatal del partido Convergencia, ahora Movimiento Ciudadano.

Antes no había mencionado que era su compadre, ahora era más que su hermano.

¿Quién los entiende?

En el quehacer político de los veracruzanos todo depende la circunstancia.


Hasta la iglesia acusó a los chapulines

Para que la Iglesia Católica Mexicana a través de su máximo dirigente, el arzobispo Norberto Rivera Carrera criticara a los políticos chapulines es que se llegó a un hartazgo social por la cínica actitud asumida por estos funcionarios.

No hay antecedente que el Arquidiócesis se lanzara para acusar a los partidos políticos y sus candidatos a puestos de elección popular al grado de denunciarlos que “actúan como mafias del poder y solo ven por sus intereses grupales y personales”.

Es evidente que existen lagunas y falta de normas en los marcos electorales legales que permiten el “oportunismo de los políticos chapulines que brincan de puestos sin rendición de cuentas”.