Desde la semana pasada que hubo una reunión del exgobernador de Veracruz, Miguel Alemán Velasco, con el equipo que colaboró en su gabinete, se especuló que habría movimientos importantes en el gobierno de Javier Duarte de Ochoa.
Al parecer entre los comentarios que hubo en dicha junta se ventiló la grave situación financiera que confronta el gobierno de Duarte. Resultó más que obvio que se la endosan como principal culpable de esta crisis económica al exgobernador Fidel Herrera Beltrán.
No es secreto entre la clase política veracruzana la mala relación que existe entre Alemán Velasco y el oriundo de Nopaltepec.
Nada más faltó que durante ese gobierno fidelista la señora Rosa Borunda agrediera físicamente a Cristiane Magnani de Alemán. Así se recuerda la grave discrepancia existente.
Si se confirma la versión de algunos miembros del equipo alemanista, resulta natural que estuvo presente Fernando Charleston Salinas, quien trabajara como secretario del Trabajo en ese gobierno, por lo que se especula que allí se dilucidó que le manifestara a su hijo Charlestón Hernández, el entonces secretario de Finanzas, que lo más conveniente es que dejara ese cargo por los graves acontecimientos que se avecinaban.
Miguel Alemán cultiva una excelente relación con el presidente Peña Nieto y de allí el rumor sobre la posibilidad de que el subsecretario de Hacienda, Fernando Aportela Rodríguez, quien trabajara como secretario adjunto de ingresos en la administración alemanista, asuma el importante cargo de comisionado especial en asuntos económicos en el estado de Veracruz.
De acuerdo a ese importante nombramiento de comisionado se les califica como auténticos vicegobernadores, como ocurriera en el caso de Michoacán. Pero no se descarta que como titular de Finanzas sea designado Mauricio Audirac, contador originario de Cosamaloapan.
Por su lugar de nacimiento se entiende quien es su padrino.
La experiencia de Audirac Murillo para recomponer estados financieros y desaparecer desvíos y modificar contabilidades está más que certificada durante su paso por el Orfis. De allí que su nombramiento de titular de la Contraloría en la administración del gobernante Javier Duarte era obligado.
Es un asesor de lujo para los servidores públicos, él conoce el teje y maneje de las tesorerías y cómo se deben administrar los recursos públicos para que estos se reflejen en la adquisición de lujosas residencias y el enriquecimiento de un inagotable patrimonio familiar.

La disciplina del PRI
Para que nadie dude de la natural existencia de la libertad y del libre albedrío que existe en los seres humanos, es importante revisar cómo votaron los senadores del tricolor para que se aprobara la ley para el telecom.
De los 51 legisladores priístas no hubo ninguno que se abstuviera o que votara en contra. Es un extraño y rarísimo fenómeno de la naturaleza donde todos piensan igual.
Por la férrea defensa que hicieron de los intereses de Televisa, hace suponer que son americanistas de hueso colorado. Se sienten como gente del “piojo” Herrera.