Las personas inteligentes tienen un derecho sobre los ignorantes, el derecho a instruirlas. Es el peculiar caso de dos distinguidos abogados, Carlos Campos Echeverría y Fernando Vázquez Rigada, quienes en un especial documento titulado “Por un México con Energía” plantean que nuestro País debe cambiar sin demora y por ende tiene la urgencia de mejorar diversos ámbitos de la vida nacional para generar riqueza. No se concibe al México presente con más de medio centenar de millones de pobres, cuando es una nación que posee los recursos, pero no los utiliza correctamente. Los dos destacados veracruzanos proponen que ha llegado el momento de construir un país en donde los sueños se puedan cumplir y las promesas honrar.
A tono con la reforma energética que se disponen a aprobar en el Congreso de la Unión, señalan que México requiere eslabonar las cadenas productivas a favor de las empresas nacionales y de los mexicanos. Pemex en lugar de financiar a los burócratas que financié a estudiantes, y en vez de alimentar el gasto público del gobierno que alimente a los mexicanos.
“Para eso necesitamos un nuevo modelo energético. Como tal se requiere de la generación competitiva y suficiente de energía para convertirla en una palanca del desarrollo, de un catalizador del crecimiento, de la equidad social, del equilibrio ecológico y del porvenir de la nación”.
Si contamos con grandes reservas de petróleo y gas, a diferencia de los Estados Unidos y Canadá, el incrementar la participación de inversionistas privados no tiene ningún sentido. Estas empresas no pagarían los impuestos que eroga de manera religiosa la paraestatal. La tendencia mundial es fortalecer la presencia estatal no en disminuirla.
Se requiere una segunda expropiación que implica recuperar Pemex, dejando fuera los intereses políticos para que sea el articulador del desarrollo nacional. Los excedentes petroleros que fueron de 134 mil millones de dólares no desaparezcan en el tobogán de la burocracia y de la corrupción.
Pemex no puede seguir siendo un monopolio sin control, requiere una nueva normatividad y para ello modificar sus reglas. Esta nueva practica tocará grandes intereses enquistados que van desde los negocios de sus directivos y las costosas prebendas a los líderes sindicales.
No hay que olvidar que cuando México abrió sus mercados financieros perdió la banca. Cuando privatizó diversos sectores creo gigantescos monopolios. Antes que cometer los mismos errores y graves equívocos del pasado hay que darle la oportunidad a Pemex de refundarse.
El engaño turístico
Compañías de Viajes más importante de la Ciudad de México asegura que se cancelaron varias reservaciones al puerto de Veracruz, al enterarse que existen retenes de las fuerzas armadas dentro de la ciudad de Boca del Río que provocan demoras de hasta dos horas de embotellamientos para salir del centro comercial ”El Dorado” a la zona conurbada.
No se explica dicha empresa nacional cómo el titular de la Secretaría de Turismo, Harry Grappa, puede asegurar que existe seguridad en esa zona turística cuando los medios dan a conocer la ola de secuestros y asaltos a los restaurantes, aunada a los bloqueos en las principales avenidas de Veracruz y Boca del Río.
El señor Grappa Guzmán ya es motivo de burlas en los medios y las redes sociales al afirmar que el puerto de Veracruz recibe el doble de visitantes que Cancún, con solo ver el número de vuelos, el aeropuerto de la ciudad del estado de Quintana Roo quintuplica al movimiento del Heriberto Jara del puerto jarocho.
Los políticos veracruzanos ya se acostumbraron a decir mentiras como una burda imitación de sus ejecutivos estatales de las últimas administraciones.