Los artífices del
encubrimiento
En los últimos casos
de las denuncias
formuladas en
contra de los malos
manejos de los
dineros públicos
de los exgobernadores
de Aguascalientes,
Tabasco,
San Luis Potosí y
Jalisco, han sido
las propias contralorías
estatales
y los sistemas de
justicia locales,
las autoridades
que han presentado
documentadas
acusaciones que
delatan a los ejecutivos
estatales.
La única coincidencia en estas delaciones es
que las nuevas administraciones estatales pertenecen
a partidos políticos diferentes a los que
antecedieron. El pacto de impunidad e encubrimiento
es sagrado entre los priistas.
Han pasado por las contralorías veracruzanas
una cauda de políticos comprometidos con los
gobernantes que los nombraron y que por razones
de muchos pe$os y principios partidistas, no van
a presentar ninguna denuncia en contra de sus
benefactores.
Son puestos hechos exprofeso para ayudar a
encubrir, ocultar, disfrazar y proteger a los funcionarios,
no son cargos para delatar, descubrir,
desacreditar o denunciar, aunque así lo establezca
la función pública.
Ya el contador Mauricio Audirac demostró su
eficiencia y discreción en estas singulares actividades
durante la administración de Fidel Herrera
en su cuestionado paso en el Orfis, ahora en la
contraloría no existe la menor duda que su forma
reservada, cautela, circunspección, capacidad,
talento e ingenio estará al servicio del encubrir el
complejo sistema financiero de la administración
estatal.
El problema del anterior contralor Iván López
Fernández es que aprovechando el puesto, inventó
nuevas empresas constructoras y de común
acuerdo con los titulares de varias secretarías,
donde desfilaron Marcelo Montiel, Guillermo
Herrera, Raúl Zarrabal y una lista de miembros
del poder, empezó a trabajar negociando la protección
de los funcionarios a cambio de jugosos
contratos para sus compañías. El sistema de
siempre de encubrimientos con complicidades.
Veracruz tiene la gran ventaja que los responsables
de las contralorías y auditorías son
manejadas con tal eficiencia de que no corren el
menor riesgo de que cualquier anomalía financiera
sea descubierta. Son los héroes anónimos
de las finanzas estatales.
Los técnicos no juegan
La generalizada opinión de exjugadores profesionales
sobre la pésima actuación de la selección
mexicana de futbol en la búsqueda de llegar al
próximo campeonato mundial, todos coinciden,
que el estar cambiando de director técnico es la
peor estrategia.
Ningún país lo hace, porque se reconoce que
el director elegido es la persona idónea y éste
debe tener años de experiencia en el manejo de
los seleccionados.
Son los jugadores a los que hay que estar renovando.
Es la misma técnica que se sigue en los
equipos cuando tienen una mala temporada y se
contratan nuevos jugadores para reforzase.
Se vislumbra un régimen totalitario
Es la opinión de reconocidos analistas políticos
internacionales quienes llegan a la conclusión de
que México está transitando hacia un gobierno
totalitarista donde la democracia está dejando de
existir. No les sorprende a estos investigadores,
ya que es resultado de las políticas neoliberales.
Se han perdido todo tipo de restricciones y los
economistas neoliberales operan libremente. No
importa que partido político gane, pues se trata
de un régimen totalitario que tiene un control
hegemónico y domina todo el sistema.