Como todos los presidentes que ha tenido el PRI, han establecido la costumbre de que en los primeros meses de iniciar su gestión para dejar establecido que existe un nuevo mandatario con todo el poder, daban un fuerte golpe político, que lo bautizaban como un “mazazo” en el escritorio de Los Pinos.
Carlos Salinas de Gortari metió a la cárcel al líder nacional de los petroleros, el veracruzano Joaquín Hernández Galicia y obligó a renunciar al dirigente magisterial Carlos Jonjitud, dejándole el puesto a la secretaria del mismo, Elba Esther Gordillo.
Fuertes versiones existen en los círculos capitalinos, que el presidente Enrique Peña Nieto tiene planeado meter a la cárcel algunos gobernadores de su partido y posibles cambios en los liderazgos sindicales del magisterio y petroleros, al igual que lo hiciera su tutor político, Salinas de Gortari.
La bandera prioritaria que tendrá el nuevo gobierno es el combate a la corrupción y para demostrar que va en serio, se empieza por casa. Desaparecer la Secretaría de la Función Pública para la creación de una dependencia federal que se dedique a terminar con la corrupción en los tres niveles de gobierno y con la nueva reforma laboral con los permanentes y sórdidos liderazgos sindicales.
Como fortaleza de estos rumores se dejó con un cargo legislativo plurinominal a Carlos Romero Deschamps, que le provocó un serio daño a su candidatura presidencial el derroche de su hija en aviones privados. Para rematar, la grave declaración sobre la explosión de la gasera en Reynosa: “No tenemos que maximizar un evento que no lo merece”. 30 trabajadores muertos y más de 40 heridos y para el señor ni siquiera sus compañeros petroleros son acreedores a una esquela de la sección a la que pertenecieron.
La misma fórmula de compensación hiciera con la líder Gordillo Morales del SNTE, que le dejara tanto a su hija como a su nieto posiciones partidistas en el Congreso de la Unión.
En el caso del STPRM, se maneja una terna de cuatro, uno de ellos está jubilado; se repite la historia que condujera a Sebastián Guzmán Cabrera a la Secretaría General. En aquel entonces pesó en serio la recomendación de Fernando Gutiérrez Barrios, secretario de Gobernación.
Por pura coincidencia, Peña Nieto seguirá con la misma barredora en contra del “charrismo” sindical que usara Salinas de Gortari. Y con ese ejemplo a seguir hay que tener memoria que cambió a cinco gobernadores que estaban en funciones y con una simple llamada por la red telefónica de Los Pinos, los ejecutivos estatales pedían licencia por razones de salud, desde la mental hasta la fisiológica. Los argumentos eran de lo más variados como ciertos motivos personales. Y vaya que eran muy personales.

En marcha la alianza PRD-PAN

La alianza entre el PRD y el PAN les permitiría ganar el próximo año arriba de 120 ayuntamientos, estima el líder de la coalición de los partidos progresistas, señor Juan Vergel. De acuerdo a estas versiones, el PRD sin ninguna coalición obtendría treinta municipios rurales, en cambio con Acción Nacional quedarían incluidos más de un centenar de los ayuntamientos más importantes de la entidad.
Como ejemplo de lo ocurrido en las últimas elecciones presidenciales, en los estados donde hubo coalición como Puebla, Oaxaca, etc, el candidato López Obrador resultó con una gran ventaja sobre Peña Nieto. También se hubiera ganado el Estado de México si Alejandro Encinas hubiera aceptado la alianza con Acción Nacional. En política todo estriba en sumar.