Es algo extraño lo que está ocurriendo en las esferas policiacas a nivel nacional, desde la época del presidente Vicente Fox, donde en contubernio con las más altas autoridades del país se permitió o mejor dicho se autorizó, la fuga de Joaquín Archivaldo Guzmán Loera, alias “El Chapo”, es en estos últimos días donde adquiere una nueva relevancia el líder del cartel más poderoso del país. En vísperas de que termine la veda del silencio electoral se mueve en los diferentes medios la posibilidad de su captura, es el mexicano que ya figura en la revista Forbes como uno del selecto grupo de los millonarios del mundo.
Desconcierta la nota del lavado de dinero de 13 millones de dólares por un agente de la agencia antinarcóticos norteamericana la DEA. El descubrimiento de su refugio en Los Cabos y hasta un video donde supuestamente aparece el tristemente famoso “El Chapo” Guzmán. Toda esta promoción oficialista tiene una obvia razón política hacia los comicios presidenciales del primero de julio. Es una estrategia bien planteada para dar el golpe maestro de su captura y hasta se llega a especular que al igual que el caso de la francesa Florence Cassez, se podría montar un escenario donde las fuerzas públicas realizan de manera espectacular la detención del narcotraficante más buscado de la historia.
La cúpula del PAN está midiendo los tiempos electorales para presentar al Chapo Guzmán, el cual ya debe estar bajo custodia.
Tratar de esconder y tapar el desprestigio de la guerra mal planeada, en contra del crimen organizado emprendida por el presidente Felipe Calderón, que los propios Estados Unidos la consideran como inaceptable por el elevado número de muertos y el rechazo de la población mexicana.-
El general Charles H, Jacoby y el senador republicano John McCain reprobaron la forma de esta lucha. Al grado que no pueden estimar si están ganando o perdiendo.

SERÁN LOS INDECISOS

La segunda Encuesta Nacional Independiente realizada con entrevistas individuales en las plazas públicas del país, señala que existe un elevado número de indecisos, el 32.55 por ciento de los ciudadanos con credencial de elector que se abstiene de manifestar su intención del voto.
En esa investigación realizada durante la tercera semana de febrero señala que Andrés Manuel López Obrador es el puntero con un 26.55. Enrique Peña Nieto y Josefina Vázquez Mota registran un empate técnico de 20. 73 y 29,17 de los electores. Lo que indica que serán los comicios más competitivos de la historia y que definirán los indecisos cual de los candidatos estará en silla del Águila.

SE LE VINO EL MUNDO

Lo que realmente preocupó no es que estuviera vacío el estadio Azul, sino lo desértico de las ideas de la candidata panista, la diputada federal con licencia, Josefina Vásquez Mota. El problema es muy serio ya que se encuentra maniatada por ser la abanderada de un partido que no ha sabido gobernar. No puede criticar, cuando es ella parte de las administraciones panistas de los últimos doce años.
El discurso pronunciado fue hueco, inocuo e insulso, ante unos cientos de personas que por razones partidistas no pudieron salirse. El problema de la estampida de los acarreados es que no militan en el partido que los contrató.
Están prendidos los focos rojos de lo que pudiera ocurrir ante un debate, sobre todo como responder ante los cuestionamientos al gobierno de Felipe Calderón.
No puede tergiversar la realidad que se vive en México.
Es una situación que se le complica cada día más, con los problemas internos en la selección de candidatos, como el caso del Estado de Veracruz, la insistencia de anular los comicios, el destape de Manuel Clouthier, su simpatía por el dictador Augusto Pinochet .Ya no se le ve como una poderosa contrincante por razones de su género de ser mujer, lo ocurrido vino a demostrar su falta de experiencia en el manejo de una campaña electoral y su visible inhabilidad para contener las ambiciones e intereses de sus codiciosos partidarios.