Veracruz se ha convertido en el estado más peligroso para los inmigrantes al grado que varias naciones centroamericanas planean instalar consulados en el corredor del istmo para proteger a sus connacionales.
El embajador de El Salvador, Hugo Roberto Carrillo, afirma que las ciudades de Acayucan y Tierra Blanca es donde se cometen las mayores violaciones a los derechos humanos al grado de registrar grandes atrocidades que afectan seriamente las relaciones diplomáticas de aquellos países con México.
Por los mismos motivos de violencia se instalará una subprocuraduría en esa zona del Istmo.
Si bien existe un consenso de repudio al trato discriminatorio que sufren los latinos en los Estados Unidos, la realidad es que son mayores los agravios que afrontan los inmigrantes en territorio mexicano.

Publicidad grotesca

Sobre advertencia no hay engaño. En este mismo espacio abordamos el caso de la excesiva publicidad externa de las campañas electorales que se realizan en el estado.
De una manera geométrica crecieron el número de espectaculares. Sin ningún control se fueron instalando en cuanto espacio de terreno o azotea que pudiera ser habilitado este tipo de estructuras. Lo anterior motivó que columnistas políticos señalaran que están tapizadas las calles hasta niveles grotescos. Si se contabilizan, no hay duda que rebasaron los topes de campaña.

Tema prohibido

Es un tema que casi ningún candidato al gobierno de Veracruz ha querido abordar de una manera abierta el referente a la corrupción. El costo de esta medida en nuestro país representa para los hombres de negocios casi el de un billón de pesos en promedio anual, cifra equivalente entre el 7 y 9 por ciento del Producto Interno Bruto.
No hay una cifra exacta de lo que ocurre en la entidad veracruzana, se habla sobre los “pagos” del sector privado a diferentes instancias de la administración estatal.
Las empresas que operan en Veracruz consideran un diez por ciento de sus ingresos en sobornos y medidas parea influir en decisiones administrativas y el famoso “diezmo” es rebasado en la manipulada licitación de obras que realiza el gobierno fidelista.
Conocen los grupos de contratistas quienes son los empresarios consentidos, a los que se les encarga de manera directa disfrazada la realización de las más importantes y costosas obras.
En Veracruz se realiza todo tipo de corrupción, desde influir en decisiones administrativas como la adquisición de toda clase de documentos que van desde licencias hasta actas civiles. El otro sector importante es el judicial para mover de manera favorable la opinión de los jueces.
La ineficiencia gubernamental, regulación y burocracia conducen hacia una mayor corrupción.
Para esta nueva etapa de gobierno veracruzano, se plantea que las empresas adopten una postura ética y de cero tolerancias contra este negativo fenómeno.