Lo  hechó  a perder Rafael Loret de Mola todo lo previamente planeado con su declaración donde específicamente apunta que el emporio de Televisa corrió a su hijo Carlos, cuando se había llegado a un entendimiento que era un acuerdo que convenía tanto a la empresa como al conductor audiovisual que había encumbrado el medio televisivo.

No supo ocultar el coraje paterno que hayan despedido al orgullo de su nepotismo. Las gracias que se habían  dado de manera mutua la empresa y el propio comunicólogo por el trato preferencial y de reconocimiento de la institución y el reportero,  la tiró por la basura.

 El argumento mentiroso del también periodista Rafael Loret, hijo del exgobernador de Yucatán, -que sufriera una muerte misteriosa en una carretera-, es que la empresa televisora había recibido contratos millonarios del gobierno de López Obrador y que esa fue la razón de intereses económicos que provocaran que corrieran de los noticieros a su hijo.

De antemano se conoce que el gobierno de Morena no otorga los contratos de escándalo que existieron en las administraciones de los últimos seis sexenios donde Lamadrid, Salinas, Zedillo, Fox, Calderón y Peña tenían partidas extraordinarias para los señores Azcárraga, desde Vidaurreta, Milmo y Jean,  que se consideraban soldados por voluntad propia del PRI y siervos del PAN.

Deben estar apenados, el propio Carlos Loret de Mola y los directivos de la empresa de los abruptos verbales de don Rafael.

El daño que le provocó a su propio hijo al desmentirlo que se había salido por sus intereses personales a que le hubieran dado una patada.

La terrible realidad del PRD

Después de la última elección presidencial donde estuvo el partido del Sol Azteca aliado con el PAN y MC,  cuatro de cada cinco militantes lo abandonaron y renunciaron a tener cualquier contacto con Jesús Ortega y Jesús Zambrano, mejor conocidos como los Chuchos, quienes  se habían encargado de destruirlo al hacer a un lado principios e ideología por unirse con el gobierno de Peña Nieto y al final del sexenio priista con la extrema derecha de México.

Todavía el año pasado había registrado ante el Instituto Nacional Electoral (INE) a 5 millones 254 mil 778 militantes, al concluir su reafiliación hace tres meses, tres  millones 937 mil 931 no quisieron saber nada del PRD.

Con ese minúsculo padrón de apuradamente un millón de perredistas  decidieron desaparecerlo y crear un nuevo partido con el nombre de Futuro 21.

Es el momento de endeudarse

De acuerdo a vaticinios sobre el drástico cambio climático no faltan científicos de renombre que mencionan el final de este mundo, con este incierto futuro de la humanidad señalan algunos economistas que es el momento más adecuado  de endeudarse. Conviene a los bancos porque pueden colocar los millones de billetes guardados en bodegas y pueden tener una buena cantidad de esos recursos en intereses, para los hombres de negocios y ciudadanos en general pasar estos últimos días antes de que desaparezca la vida en el globo terráqueo en un  mejor status económico.

Hay que aprovechar la ocasión de lo que algunos es lo negativo de esta debacle mundial y para otros que ven el lado positivo de disfrutar a plenitud lo que resta del tiempo de la existencia de la humanidad.