Durante la administración de Miguel Ángel Yunes Linares se lograron recuperar importantes bienes y otros artículos que fueron adquiridos de manera ilícita, por el gobernador Javier Duarte y sus altos funcionarios.
El presidente López Obrador instituyó una dependencia para restituir al pueblo todo lo robado por la clase política. Se han realizado subastas de aviones, autos casas, joyas etc, etc.
En el caso del estado de Veracruz, la gente se pregunta, ¿dónde está todo lo que se rescató y que se le dio una amplia difusión en los medios?
Se supone que debe estar a nombre del gobierno de Veracruz lo que se encontró y debe ser subastado. De lo que se dio a conocer había ranchos, casas, pinturas, departamentos frente al mar y hasta propiedades en el extranjero.
¿Cuál sería el destino de esos lujosos bienes y de las fortunas de dinero que se obtuvo de los que habían saqueado al pueblo de Veracruz?
Es uno de los delitos más castigados cuando un ladrón roba a otro ladrón.
El exauditor de ASF, Juan Manuel Portal lo dijo: “No basta con encarcelar a los corruptos sino saber qué pasó con ese dinero”.
La madre de todas las batallas de Morena
La disputa por la dirigencia nacional de Morena que ocurrirá en noviembre, se califica como la madre de todas las batallas políticas de la izquierda de México.
Están bien definidos los grupos o tribus como se les quiera llamar. Por un lado, Ricardo Monreal y Marcelo Ebrard con su candidato Mario Delgado, el de Martí Batres y Yeidckol con su senador perdedor y el otro bloque el de Bertha Luján con el mayor apoyo de los lopezobradoristas.
A partir de septiembre estarán en la entidad veracruzana los aspirantes a presidir el liderazgo partidista nacional de Morena.
El pacto de silencio de los periodistas
Ningún comentario ha trascendido de los periodistas veracruzanos invitados a una cena privada con el gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García. Los únicos redactores que han escrito sobre ese evento son aquellos que no asistieron.
Los que no fueron convidados a este convite en la Casa Veracruz, son los que cumplen con su misión informativa de dar a conocer los eventos del gobernante.
¿Un pacto de silencio o no les gustó lo que cenaron?
Las respuestas reprobatorias
Por dignidad y orgullo periodístico, los columnistas de medios impresos capitalinos no ocultan en sus comentarios, sin ninguna fuente, su enojo y frustración por no recibir las cuantiosas igualas de los anteriores gobiernos federales del PRI y PAN.
Si se le ocurre al presidente López Obrador decir de lo que le consta en sus viajes de fin de semana a diversos estados del país que percibe en su contacto directo con el pueblo, que está feliz con lo realizado en este primer año de gobierno.
De inmediato viene la respuesta reprobatoria asegurando que: “miles de mujeres que, hartas e iracundas de ser violentadas, acosadas, abusadas y asesinadas, salieron a las calles de varias ciudades a gritar ¡ ya basta! a pintar, romper y destrozar como recurso desesperado para ser escuchadas”.
No se explica cómo lo harán las que el columnista afirma que fueron asesinadas, puedan destrozar sus espíritus monumentos históricos y comercios establecidos para ser escuchadas. Con estas conclusiones, el pueblo mexicano no está feliz.
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