Antonio Williams, un empresario de Coatzacoalcos que votó en 2016 por Miguel Ángel Yunes Linares, posteó anteayer una carta en Facebook titulada “Se vale decir ‘no puedo’”, en la que invita al mandatario panista “a incluir a la sociedad en el diseño de estrategias para sacar adelante a nuestro estado”, sugiriéndole que “si no quiere o no puede, mejor retírese… se vale… es más honesto que seguir hundiendo a Veracruz”.

“¿Qué pasa Gobernador? Nos quejábamos del anterior gobierno de Veracruz. Lo elegimos a usted con la esperanza de un cambio. Los veracruzanos estábamos hartos de la corrupción, del saqueo, del cinismo, de la miseria, de las carencias y de muchas cosas más, pero en especial de la inseguridad.

“¿Qué pasa Gobernador? De qué sirvió este cambio lampedusista? ¿En qué nos beneficia Javier Duarte preso si todos sus cómplices y el botín están a salvo? Los hospitales siguen con las mismas carencias, los caminos y carreteras están destrozados, la economía está colapsada, las deudas del gobierno siguen aumentando, las empresas siguen cerrando, los empleos siguen perdiéndose y a los veracruzanos nos siguen robando, secuestrando y asesinando”, increpa Williams al excandidato de la alianza PAN-PRD con quien todavía conversó en julio de 2016 exponiéndole el grave problema de la inseguridad en una reunión de empresarios en Coatzacoalcos.

“Hoy, 14 meses después y con 10 meses como gobernador constitucional de Veracruz, el único resultado tangible que he visto que haya originado esa reunión es el premio que le dio al organizador de la misma con un cargo al frente de un organismo estatal”, le reprocha el comerciante, quien le expuso el dramático caso de una familia amiga, que el domingo pasado fueron salvajemente golpeados por cinco facinerosos que allanaron y robaron su hogar.

Este lunes, otro empresario, el presidente de la Canacintra, Juan Manuel García González, le pidió “con todo respeto” al gobernador “ponerse a chambear y punto”, porque dijo que a diez meses de iniciada su administración no cuentan todavía con un plan rector de cómo pagarán las deudas institucionales con proveedores y prestadores de servicios.

Y es que Yunes salió a desmentir que haya cancelado la deuda del gobierno estatal con los empresarios como se había difundido en los medios de comunicación, advirtiendo que “se pagará lo que se deba pagar en el momento en que se pueda pagar, pero no permitiremos que por la vía del chantaje periodístico o político se pretenda que desviemos recursos públicos de los veracruzanos para pagar lo que no se debe.”

Sin embargo, en este caso Yunes no tiene excusa porque tuvo tiempo suficiente para revisar estos adeudos pendientes que le dejó la administración anterior. Además, como se recordará, en un acuerdo con el gobernador interino Flavino Ríos, él propuso a Clementina Guerrero para que ocupara desde noviembre de 2016 la Secretaría de Finanzas y Planeación, ratificándola al mes siguiente en cuanto asumió constitucionalmente la gubernatura.

Pero no sólo en materia de finanzas y de seguridad pública ha fallado el gobierno yunista. En otras áreas, como la educativa, también se vienen dando casos absurdos de parálisis administrativa.

En el Instituto Tecnológico Superior de Xalapa, por ejemplo, ¡tardaron más de siete meses para nombrar oficialmente al Director!, negligencia que afectó a más de 200 egresados de diversas carreras que no han podido titularse, lo que tiene muy enojados a sus familiares porque les han conseguido trabajo en otras entidades que sí generan empleos bien remunerados, pero no han podido ser contratados porque no cuentan con documentos que acrediten sus estudios.