El diputado federal Fidel Kuri Grajales acaba de proponer que sea el Instituto Nacional Electoral (INE) el que organice los comicios locales del 2018 en los que se renovarán la gubernatura y el Congreso local de Veracruz porque, dijo, el Órgano Público Local Electoral (OPLE) no garantiza certeza ni equidad por la intervención que hará el Gobierno del Estado a cargo del panista Miguel Ángel Yunes Linares a favor de los candidatos del frente PAN-PRD-Movimiento Ciudadano.

El legislador federal puso como muestra el reciente caso del “Yúnete”, en el que funcionarios yunistas fueron exhibidos de aprovechar los desastres naturales para sumar “clientelismo político” a la causa del alcalde de Boca del Río, Miguel Ángel Yunes Márquez, a quien su papá quiere heredarle la gubernatura para el periodo 2018-2024.

Para reforzar su argumento, Kuri Grajales refirió que como candidato en el proceso electoral municipal de junio pasado, “fui testigo de cómo se manejó la elección del puerto de Veracruz, donde jugó su hijo Fernando, y si hizo todo para conseguirle casi cien mil votos, que no sabemos de dónde los sacó, ahora imaginen qué hará por el otro vástago de candidato a gobernador, por eso el INE es el único que puede transparentar y garantizar equidad”, afirmó el exaspirante a la alcaldía porteña, quien pidió el apoyo de otros partidos a su petición “por el bien de la democracia”.

El empresario de origen orizabeño advirtió que si el INE no toma el control de la próxima elección local, es seguro que después del proceso electoral habrá en Veracruz un “Estado fallido”, ya que, apuntó, no se tendría certeza en el resultado que dé a conocer el OPLE y persistirá la sospecha de la manipulación de programas sociales en favor del partido del gobernador, poniendo como prueba el caso de la asociación civil yunista “Yúnete”.

Sin embargo, la petición del diputado priista Kuri Grajales pudiera resultar contraproducente, ya que desde agosto de 2016 llegó a presidir la Junta Local del INE en Veracruz Josué Cervantes Martínez, el cual ha sido señalado en otras entidades como “pro panista”.

En junio de 2006, por ejemplo, la dirigencia estatal del PRI en Colima exigió la renuncia de Cervantes Martínez como vocal ejecutivo de la Junta Local del Instituto Federal Electoral (IFE), al considerar que no garantizaba el cumplimiento de dos de los cinco principios rectores del organismo: imparcialidad y objetividad.

Luis Gaitán Cabrera, presidente del tricolor en Colima, solicitó formalmente ante el Consejo General del IFE la salida del funcionario electoral, pues dijo que Cervantes Martínez había mostrado una actitud parcial a favor del PAN en el estado, pues mientras informaba puntualmente al Consejo General del IEE sobre declaraciones del gobernador Silverio Cavazos ante cuestionamientos de los medios, él ocultaba la campaña publicitaria que en las estaciones de radio mantenía el ayuntamiento panista de Colima.

En agosto de 2006, luego de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación ordenó el recuento de 254 casillas de la elección presidencial en Colima, el dirigente del PRI declaró que ello confirmaba la parcialidad con que había actuado la mayoría de funcionarios del IFE en ese estado. Gaitán recordó que su partido había pedido, apenas iniciado el proceso electoral, la destitución de cuatro consejeros locales del IFE, así como de Cervantes Martínez, a quienes consideraron “pro panistas” y de quienes dijeron que no garantizaban la equidad ni imparcialidad en el proceso electoral.

El sexenio antepasado Cervantes también estuvo en Veracruz, pero el gobernador priista Fidel Herrera Beltrán promovió de inmediato su salida por lo mismo.