La pesada lucha electoral

Sin duda, en el empate técnico entre todos los partidos políticos, por primera vez se debe a la mala imagen generalizada, que los tiene postrados a causa de los hechos en una gran estela de corrupción por de parte de los ex gobernadores de todos los colores, en donde aquí nadie escapa a los abusos de poder, inseguridad y desvíos de los recursos públicos con fines del clásico enriquecimiento inexplicable.

Todo esto, pone en la palestra a quienes estarán buscando acceder a poderes estatales y municipales, con resultados insospechados porque está en disputa el devenir de la política en el país el próximo año con la elección presidencial a donde llegan todos los partidos políticos desprestigiados a causa de la corrupción.

En el momento actual, surge MORENA como una opción, aunque tampoco escapa a la impregnación de los acuerdos sostenidos con la pasada administración duartista, en donde sin causa alguna han comenzado AMLO y sus huestes de sostener que les van a cargar culpas ajenas, relativos los apoyos económicos a este partido en la pasada elección estatal con el asunto de la danza de los millones en la abundancia.

Pero, sin darse cuenta del enorme plus logrado, Andrés Manuel López Obrador, está cayendo en lo mismo de los partidos tradicionales, a no dejar que surjan los operadores políticos de cara a apoyar su proyecto.

Por eso, el Peje anda muy sólo y no deja ver a nadie a su lado de los poderosos operadores de MORENA, y que también debe fortalecer los cuadros estatales, municipales, pero desde la dirigencia nacional no se permite que los auténticos operadores brillen y se puedan montar en su accionar político, porque AMLO, es el dueño del balón y no les permite ni acercarse a que le quiten un poco de luz de sus reflectores, y ese es su clásico error a su megalomanía que no ha podido superar.

Lo mismo sucede en el PRI, en donde para el 2018, no han dejado proyección para quien pueda ser postulado y por eso siguen perdiendo tiempo en una agónica espera en donde Miguel Angel Osorio Chong y José Narro Robles, siguen creciendo y esperan el momento que les den la salida de arranque.

A diferencia del PAN en donde hay tres grupos políticos dispuestos a buscar la candidatura presidencial para el 2018 a como dé lugar entre Ricardo Anaya, Rafael Moreno Valle y doña Margarita Zavala, se disputan la suerte de llegar fortalecidos y con algunas solidades posibilidades.

En el PAN y su aliado el PRD, estarán tratando de seguir unidos a fin de llegar fortalecidos en el 2018, aunque nada está escrito.

El PRI, puede resurgir a partir de que se conozca el resultado en la elección del estado de México, en donde Alfredo del Mazo, está haciendo lo propio para tratar de mantener la gubernatura del grupo político en el poder presidencial de Atlacomulco.

En el estado de México, Josefina Vázquez Mota del PAN y Delfina Gómez de MORENA tienen al PRI y su candidato en contra de las cuerdas, defendiéndose y luchando con mucha fuerza en un momento histórico de decisión muy importante.

En las candidaturas de las presidencias municipales, la mayor sorpresa ha sido postular para la alcaldía de Veracruz, al empresario Fidel Kuri, quién estará tratando de dar la lucha al PAN y MORENA, incluso hasta al PT, que le llevan ventaja en los tiempos políticos de sus aspirantes.

Pero como dicen que en la guerra, el amor y la política todo se vale, aquí va una carta importante, pero en donde el desprestigio de ser un personaje conflictivo, puede marcar la diferencia, pero los analistas no le encuentran la cuadratura al círculo a una candidatura inventada de última hora y sin ninguna base real, aunque sí de lucha electoral en una situación inusual que no aglutina ni a la propia militancia molesta y abandonada a su suerte.

Fidel Kuri, puede ser la salvación de los tiburones y hasta del PRI en la lucha por la alcaldía del puerto de Veracruz y como se dice no hay peor lucha que la no se hace y estaría por verse el manejo de su campaña política y la participación mediática que lo pueden posicionar de última hora y último recurso a lo que se dice es ya una causa perdida. Así las cosas.