La llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos, fue para promover la guerra con fines xenofóbicos y de dar impulso a la economía de la industria armamentista en el orbe, que es la que genera más ingresos.

Aunque ahora, se dice que como país EU no busca ser el policía del mundo, pero ya tiene a la humanidad al borde de la peor catástrofe bélica en toda su historia y por lo pronto con la más delicada tensión de la diplomacia, que se dio entre Rusia (entonces Unión Soviética) y EU, en la crisis de los misiles en tiempos de John F. Kennedy.

Las agresiones unilaterales de EU a Siria y Afganistán, han sido parte del inicio de las hostilidades que ya puso en alerta máxima a la humanidad.

La ONU se adelanta supuestamente a dar el anuncio, de que ya está en marcha la tercera guerra mundial, de la que se dan muestras de las grandes armas de amplio espectro destructivo como la lanzada en los días santos de los cristianos en contra de Afganistán que tiene un costo de 16 millones de dólares por lo que le llaman la Madre de las Bombas y Rusia, dicen que tiene otra de mayor tamaño el padre de todas las bombas.

Las acciones sin la previa declaración de guerra por parte de EU, genera una problemática que se extiende en todo el orbe, en donde desde los espacios mediáticos ahora en la era del ciberespacio se conocen en tiempo real y por lo mismo es poco lo que se puede esconder y censurar en una nueva época que nadie ha querido que llegue.

Lo lamentable, y lo crítico es que ya en pleno siglo XXI y con los más grandes avances tecnológicos y de información, estos se utilicen para el exterminio de a quienes se ha pretendido ver como enemigos a causa de las diferencias religiosas, principalmente.

El fantasma de la guerra arrastra al mundo, cuando apareció un nuevo Hitler que osa decir que no es el mismo, pero si actúan de la misma manera, primero llegar al poder político y luego de inmediato agredir bélicamente a otros países.

Lo más grave, es que la humanidad vive de ciclos y de esa forma se han dado ya a lo largo de miles de años el fin de varios imperios. Ojala y no se trate de ese momento ahora porque la vecindad con EU, nos arrastra.

Donald Trump, primero agredió a los mexicanos migrantes en Estados Unidos, luego ha pretendido afectar al comercio con su vecino más débil, al final estará pidiendo ayuda para la guerra. Al tiempo. “El futuro ya no es lo que era”.

Mientras en los medios de comunicación, como el cine y la televisión, siguen sin dar cuenta en la visión apologética de la guerra con dimensiones insospechadas. Así las cosas.