Algo muy extraño le pasó al secretario de Finanzas, Antonio Gómez Pelegrín, para que diera marcha atrás y reconociera que sí existe un fuerte adeudo con la Universidad Veracruzana y que se firmará un calendario de pagos para resarcir a la máxima casa de estudios de la entidad los recursos millonarios que no les han entregado. ¿Se equivocó en las cuentas o le cambiaron las órdenes?

Le dio la razón a la rectora Sara ladrón de Guevara y dejó con un palmo de narices al secretario de Gobierno, Flavino Ríos Alvarado, quien junto con él, habían asegurado que la deuda era al revés y que la UV era la que tenía que pagar 3 mil millones de pesos entregados para solventar sus compromisos con los pensionados y los adeudos fiscales que no habían sido cubiertos.

Para dar este viraje de 180 grados hubo que venir una contraorden de algún lugar de la ciudad de México, con ello posponer las marchas y manifestaciones multitudinarias que se habían preparado por parte de la comunidad universitaria como protesta por la falta de pago y con ello la sobrevivencia de la única universidad pública que es reconocida a nivel nacional por sus grados académicos.

Lo único que ahora pide Gómez Pelegrín es que le den tiempo para renunciar y que sea otro el que venga a solventar este problema en los próximos meses. La rectora Ladrón de Guevara denunció que en varias ocasiones el gobernador Javier Duarte de Ochoa le ha prometido que se cubrirá el adeudo y todo ha quedado en simples palabras.

Despidos masivos en Pemex

La salida de Emilio Lozoya Austin de Pemex tiene mucho que ver con la pésima gestión realizada donde incrementó la deuda de la paraestatal en un mil por ciento, sólo en los dos últimos años es de cerca de los 300 mil millones.

El llamado para dirigir Pemex al economista veracruzano, José González Anaya, es por su experiencia en reducir pasivos y el recorte de gastos como lo hiciera en el IMSS, donde incluirá ahora una reducción drástica de personal, tomando en cuenta, que la producción actual estimada para los próximos años se reducirá a algo más de la mitad.

Para el nuevo director de Pemex el tema petrolero es de familia, su padre el ingeniero José Antonio González Pereyra, fue uno de los contratistas consentidos cuando el director general fuera Antonio Dovalí Jaime, quien había sido su maestro en la Facultad de Ingeniería en la UNAM.

Para González Pereyra su afición es por los barcos de vela donde ha realizado varios viajes transoceánicos con el constructor de la Marigalante, Vital Alzar, que fuera construida en Alvarado y que se encuentra en Puerto Vallarta.

La adicción que tenía el popular líder petrolero Chava Barragán por los relojes de oro Rolex, se le encontraron 40 de ellos el día que lo detuvieron, el ex director Emilio Lozoya prefiere los Patek Philippe, que son igual de caros.