Las versiones de que el subsecretario de Turismo del gobierno del Estado, Guillermo Herrera anda prófugo, cobra fuerza. En los pasillos de palacio es el comentario actual.
Y es que incluso en su momento esto ya se comentó y por varias razones, como desvíos o desfalcos cuando estuvo al frente de la Siop. En esta ocasión algo tiene que ver con esa secretaría y la situación del ex titular, pero no sería por razones financieras.
La segunda circunstancia que tendría al conocido, ex colaborador de Dante Delgado, ¨Memo Herrera¨ es la complicación del caso del empresario del norte, Francisco Colorado, quien enfrenta una denuncia penal en Estados Unidos. Y en ella se le menciona al funcionario veracruzano.
El primer caso estaría relacionado con la detención del empresario Mohamed Samir Morales Álvarez, aprehendido por elementos de la Policía Ministerial del Estado de Veracruz.
El ex dueño de los Tiburones Rojos enfrentará desde el penal de Misantla la acusación de fraude por obras que no realizó en el estado.
El caso de millones de pesos lo lleva la Procuraduría General de la República (PGR), bajo la averiguación AP/PGR/XAL/II/232/201 que fue ratificada el 6 de septiembre del 2013, debido a que son recursos del Fonden. Desde la secretaría de Comunicaciones entonces, hoy SIOP, la empresa del poblano recibió un sin número de contratos a través de Constructora Corporativo Galis S.A de C.V.
Estas fueron pagadas con dinero del Fondo de Desastres Naturales, pero no fueron entregadas. Un ejemplo fue una obra de 12 millones 800 mil pesos, de los cuales recibió un anticipo de 11 millones, pero, al supervisar dicha carretera estaba en obra negra, sin avance alguno.
Y quien otorgó toda esta serie de contratos y obras fue el hoy subsecretario de Turismo. El tema es que se le puede fincar responsabilidad al respecto por no haberse apegado a derecho la normatividad que marca este renglón.
Precisamente Herrera estaría implicado en este tema. Y esa es una de las dos circunstancias.
El otro caso, sería el más delicado tiene que ver con el reciente segundo juicio contra Colorado, que se abrió tras haberle revocado la sentencia inicial, y que dio inicio el 30 de noviembre con los testimonios de ocho testigos, entre ellos varios capos de los Zetas.
Esto no tendría que preocupar a Memo Herrera si no es que está señalado desde un principio en la averiguación previa contra Colorado, y de quien se pensaba precisamente en este diciembre podría salir libre. Con su liberación los que fueron “embarrados” estarían cantando victoria, pero de nueva cuenta aparecen en el ojo del huracán y el fantasma de que les alcance la justicia estadunidense o la mexicana, que es lo peor, no se ha diluído.
Uno de ellos es Guillermo Herrera de quien se dice ya no se para en sus oficinas de la secretaría de Turismo, y esa es la razón. Más que ello, podría ya no hacerlo pues estos casos legales lo mantienen más que ocupado y presionado.
MUY EN CORTO
PRI NERVIOSO Y BRONCO. Algo que tienen muy claro los priistas es que una derrota en Veracruz pondría al priismo nacional en la antesala de un fracaso en el 2018, lo que obviamente no les conviene ni al sistema estatal ni nacional.
Es por ello, que aquí toma auge aquel espaldarazo que le diera el jefe de Los Pinos en su última visita al gobernador Javier Duarte en el sentido de que tiene toda la confianza para dirigir los destinos de esa elección y primeramente, obvio, la candidatura.
No se puede negar ni por los de adentro del priismo ni fuera de él, que el primer priista veracruzano ha entregado resultados específicos en los procesos electorales que le ha tocado vivir como mandatario.
Y es que mucho se cuestiona sobre las decisiones que ha tomado en los diversos momentos Duarte de Ochoa pero para su fortuna, y no tanto, para sus detractores, siempre con resultados hacia su partido, prueba de ello, fueron las 16 diputaciones federales obtenida de 21 distritos disputados recientemente.
Lo que le ha validado que Peña le haya reconocido públicamente a Veracruz los triunfos que han conseguido en las urnas durante comicios federales y estatales, más que nada, la recuperación de manos de la oposición de esos sus principales bastiones para devolverlos al tricolor.
Hay quienes opinan que se está excediendo en los discursos broncos en cada evento del priismo estatal, sin embargo, parece que esa es la medicina duartista que prepara en el trance de aquí a la madre de todas las batallas, que será la elección para gobernador en junio del 2016. Y que la medicina y la anestesia política que se requiere es al nivel de la cirugía electoral que se avecina.
direccioneditorial@hotmail.com