Da tristeza que en el estado de Veracruz, que fuera cuna de servidores públicos que alcanzaron los máximos puestos de elección popular, ahora en el complejo quehacer polÃtico nacional no es tomado en serio.
Aquellos años donde funcionarios de origen veracruzano ocupaban puestos importantes dentro del gabinete presidencial, eran mencionados como posibles candidatos a la gubernatura, ahora, cualquier burócrata de tercer nivel, se considera con derechos para ser nominado.
Como irreflexivo pretexto mencionan, que si Javier Duarte de Ochoa llegó a la gubernatura, ellos, se consideran que también lo pueden lograr.
El primero en atajar estas designaciones de Ãndole local fue Jesús Reyes Heroles, considerado como el ideólogo del PRI, cuando ocupaba la presidencia del Comité Nacional priista, se opuso al nombramiento de Manuel Carbonell, subsecretario de Gobierno de Rafael Murillo Vidal.
No tenÃa Carbonell de la Hoz carrera polÃtica dentro de las selectas esferas del gobierno federal. El caso de Rafael Hernández Ochoa, que brinca de una diputación federal a la gubernatura, fue relevante, pero antes habÃa ocupado la SecretarÃa del Trabajo, durante esa misma administración de la presidencia de Luis EcheverrÃa.
Cuestión de niveles dentro de esta actividad polÃtica.
Lo que está ocurriendo en este proceso electoral del próximo año es frustrante, por el bajo valor profesional de los participantes, en muchos casos se consideran como neófitos e inexpertos en esta complicada actividad electoral de alcanzar un puesto de relevancia e importancia como es la selección del próximo gobernador de Veracruz.
Considerando las difÃciles circunstancias que existen en la entidad.
Para el candidato a gobernador veracruzano todo lo que tendrÃa que prometer, para solucionar falta de empleos, la inseguridad, los recortes en las dependencias estatales, falta de pago a maestros universitarios y pensionistas, deuda multimillonaria con los proveedores y la realización de urgentes obras que reactiven el desarrollo de la entidad.
Es una auténtica rifa del tigre.
Contrate mejor a un ingeniero
El problema de la fuga del Chapo Guzmán, es ahora para los abogados, los reos que se encuentran en proceso y que han sido injustamente sentenciados piensan mejor en contratar a un ingeniero que los saque de la cárcel que al mejor jurisconsulto.
Con toda la información que han proporcionado las autoridades sobre la construcción de un túnel y lo que se requiere para construirlo, desde equipos y costos, hasta la propia Elba Esther Gordillo planea mejor convenir con estos técnicos en ingenierÃa que estar batallando con la burocracia legal de los abogados.
Tema que da pena
Es toda una vergüenza que el diez por ciento de los veracruzanos sean analfabetos. Según la cifra del Consejo de Comunicación son 600 mil personas mayores de quince años que no saben leer y escribir.
La campaña nacional de alfabetización tiene más de setenta años que se inició y al parecer los resultados no existen. En Cuba tienen décadas que no existe ningún analfabeta .