Pasaron cuatro sexenios de gobernadores priistas en el estado de Veracruz donde se anunciaba la construcción de la autopista México-Tuxpan y será precisamente durante la administración de Javier Duarte donde ésta súpercarretera sea inaugurada en el mes de abril, según el secretario de Comunicaciones, Gerardo Ruiz Esparza.
Una obra que se pregonó en múltiples ocasiones y que se afirmaba que eran unos cuantos kilómetros los que faltaban y pasaban los años para que nada pasara, al grado de que el pueblo tomaba a broma esta anhelada vía de comunicación.
En solo dos horas y media, esta vía terrestre permitirá el enlace entre la capital del País con costas mexicanas. Serán las playas más cercanas al Distrito Federal. Una obra que resultó muy costosa con varias decenas de miles de millones de pesos, ya que se tuvo que atravesar a través de puentes y túneles la complicada y abrupta Sierra Madre Oriental.
El progreso que tendrá el puerto veracruzano lo podría convertir en el más importante del País por la rapidez y cercanía que tendría con el centro de la nación. Zona que aún no se encuentra preparada para el arribo de grandes inversionistas que transformarían al puerto de Tuxpan en un importante polo de desarrollo para el norte de la entidad.
Esto permitirá el despegue económico de la Laguna de Tamiahua, considerada entre las mas trascendentes del País por su riqueza y variedad acuática.
El exalcalde tuxpeño, Alberto Silva, afirma que varias cadenas hoteleras están interesadas en construir sucursales porque advierten que habrá un rápido desarrollo por esta importante vía de comunicación.

El lodazal azul
La desfachatez del legislador panista Federico Döring, al afirmar que, gracias a él, al entregar los videos de Carlos Ahumada coptando a René Bejarano, logró que Andrés Manuel López Obrador no llegara a la Presidencia de República y permitiera el devastador arribo de Felipe Calderón y su cruenta guerra de más de cien mil muertos y una nación sumida en la miseria.
Qué dirá ahora que ha trascendido que el entonces expresidente Carlos Salinas le dieron 70 millones de pesos al empresario argentino por vender las grabaciones a través de Diego Fernández de Ceballos.

País de cínicos
El mes de marzo está sacudiendo viejos lodos de los laberintos de la política mexicana, provocando una nueva guerra de lodo donde se atacan todos contra todos. Pareciera que al fin se pelearon el PRI con el PAN y empezaron a sacar los trapitos al sol como en el caso de lavado de dinero de la empresa Oceánica, donde figuran los hijastros de Vicente Fox y la protección absoluta que tuvieron durante la administración de Felipe Calderón.
Parece raro que sea precisamente durante la administración de Enrique Peña Nieto que fuera destapado por Vicente Fox y lo considerara su candidato presidencial, traicionando a los panistas que lo llevaron al poder, y sea en la gestión peñista cuando se le persiga a través de los hijos del primer matrimonio de su esposa Martha Sahagún, los empresarios ligados a Pemex, Manuel y Jorge Alberto Bribiesca Sahagún.
Lo ocurrido en estos últimos días viene a comprobar que México es un País de cínicos.