Se ha especulado en varias columnas periodísticas que el exgobernador Fidel Herrera Beltrán está sujeto a investigaciones por las autoridades estadunidenses, versiones que se contraponen, ya que si así fuera, no estaría sometido a la serie de operaciones en un hospital militar especializado de El paso, Texas.

¿Quién estaría como paciente en los Estados Unidos si es reclamado por sus autoridades?

Lo cierto es, la particular inclinación del Tío Fide por vivir en el extranjero. Le gusta vivir en el primer mundo. Fue un visitante cuando columnistas veracruzanos trabajaban en un ambicioso proyecto periodístico en el estado de California.

Ese mismo sueño lo hizo buscar la representación diplomática en una nación del continente europeo. Cristalizar ese anhelo como lo hicieron dos ilustres veracruzanos, el exgobernador Dante Delgado Rannauro en Italia y el ex procurador general de la República, Ignacio Morales Lechuga en Francia. Tiene el destacado cuenqueño todo el derecho a soñar.

A pesar del deslinde con el gobierno duartista cuenta con todo el peso político que dejó establecido antes y después de su administración estatal. Lo interesante para Herrera Beltrán es conocer ahora que está fuera, quienes son sus verdaderos amigos. No es fácil que sean buenos amigos, dos políticos que venden el mismo artículo.

La única amistad que vale es la que nace sin motivos.

Cavan la tumba del IFE

Empezó la cuenta regresiva del Instituto Federal Electoral, para dar lugar al Instituto Nacional Electoral. El IFE pasará a la historia como una página negra para los principios democráticos que anheló el pueblo mexicano.

Es el primer paso para poner fin a los organismos electorales en los estados que lamentablemente se convirtieron en simples oficinas de los gobiernos locales.

El primer director del IFE fue el veracruzano Fernando Gutiérrez Barrios en su calidad de secretario de Gobernación.

Se tiraron al piso

Comentaban destacados políticos panistas que actualmente trabajan como legisladores federales que dan las gracias al PRI, por haber reclutado a ex miembros de su partido político, que les da vergüenza la actitud que asumieron de servilismo y entrega al gobierno estatal.

Se quitaron el disfraz y la careta para mostrar su verdadero rostro.
Se refieren en concreto a los legisladores locales José Ramón Gutiérrez de Velasco y Leandro Rafael García Bringas, los cuales fueron premiados con una diputación plurinominal, pero no por ese regalo deberían de asumir la lamentable actitud de simples tapetes. Se tiraron al suelo con sus pasadas declaraciones.

Del exalcalde del puerto de Veracruz no fue una sorpresa, ya que por su mala fama pública durante su gestión como munícipe y ahondada por el periodista José Reveles en su último libro “ El cartel incómodo” donde da a conocer graves pecados y terribles travesuras como el lavado de dinero de la Casa de Cambio Puebla, donde figura como socio.

Lo extraño es el triste papel del doctor García Bringas, persona que goza de una gran estimación entre la sociedad de Coatzacoalcos. Un candidato a puestos de elección popular con gran arraigo y por ende con posibilidades, por lo que resulta inexplicable, haber tirado por la borda toda una carrera política de prestigio.