La historia es la misma, casi parecida a la de todos los gobierno del mundo que buscan a como de lugar evitar la crítica y recibir solo halagos, es como una trama por demás anunciada, todo inicia con el afán de mejorar la comunicación social, hacer un gobierno creíble, de hechos y no de palabras -pero no con acciones- sino con imagen, erogando cantidades millonarias para enamorar con lo que proyectan.
Es alimentar el ego propio, es como decir “me veo bien, me siento bien”, pero la triste realidad es engañarse a sí mismo cuando el entorno es otro y así a principios de este año, la idea fue planteada y después avalada -el Gobierno de Veracruz decidió contratar una consultoría, pero no una de tantas- la idea era salir airosos del golpeteo, el descrédito y la poca aceptación de los veracruzanos a su gobernante.
La propuesta llegó del asesor súper estrella del gobernador Enrique Jackson (Jesús Enrique Jackson Ramírez), coordinado, por supuesto, con la Vocera del Gobierno, Gina Domínguez (María Georgina Domínguez Colío); y entonces, por una jugosa cantidad fue contratada AFAN CONSULTORES, dirigida por el jesuita, exguerrillero y exvocero del expresidente Vicente Fox Quezada, Rubén Aguilar Valenzuela, a quien le acataron todas sus recomendaciones,
De ahí vino la estrategia de recortar convenios a medios de comunicación, que según estudios de imagen pública, realizados por AFAN, no convenían al Gobierno de Veracruz y entonces empezó el recorte para quienes, de alguna u otra manera, mantenían un estilo de informar objetivo y no solo publicando los comunicados oficiales o esas notas “aclara todo”, muy al estilo del propio Rubén, con aquel estribillo que pasó a la historia de “lo que el presidente quiso decir”.
El lema de la consultoría del exvocero es “Comunicar lo que se debe, con el método adecuado y a quién corresponde hace la diferencia en el ejercicio de la comunicación, ¡claro! eso es en lo que se refiere a los servicios de comunicación que ofrece, pero también brinda servicios de análisis, diagnóstico, pensamiento estratégico, relaciones corporativas, diseño, formación, entre otros, además de talleres y conferencias.
Es este último rubro hay que destacar que apenas hace un mes, el propio Rubén Aguilar, ofreció también cursos de capacitación, imagen y adiestramiento a los alcaldes y diputados electos en la ciudad de Boca del Río, como parte de sus tareas, tras el convenio con el Gobierno de Veracruz y así el gobierno de Javier Duarte se deja llevar por una estrategia -según ellos- bien diseñada, armada y en alianza con Jackson y Gina.
La estrategia es mediática y nadie piensa en las consecuencias que traerá, y así mientras pagan jugosas cantidades a consultorías, como estas, siguen existiendo infinidad de cuentas por pagar a medios de comunicación y demás proveedores, quienes la mayoría han optado por disciplinarse y sumirse bajo el yugo gubernamental, siendo parte de la estrategia diseñada para mejorar la comunicación social y la propia imagen del ejecutivo estatal.
Como se sabe Rubén Aguilar Valenzuela es Licenciado en Filosofía, Maestro en Sociología y Doctor en Ciencias Sociales, socio y director General de Afan, Consultores Internacionales, S.C. Es profesor de Ciencias Políticas y de Comunicación en la Universidad Iberoamericana. Fue Coordinador de Comunicación Social y portavoz de la Presidencia de la República (2004 al 2006) y también de la Secretaría Particular del Presidente (2002 al 2004).
Ha sido consultor de UNICEF, UNESCO, OEA, PNUD, BID, BM, UE y agencias de cooperación de Holanda, Alemania y Estados Unidos. En México del: IMSS, DIF-Nacional, INI, la Secretaría de Desarrollo Social del gobierno de la Ciudad de México y de la Coordinación Presidencial para la Alianza Ciudadana. Fue editor de la revista Cuadernos del Tercer Mundo.
Editorialista de El Universal (México), El Financiero (México) y articulista de las revistas Estrategia y Proceso. Actualmente su columna se publica dos veces por semana en El Economista (México) y una veintena de periódicos de los estados. Escribe mensualmente en la revista Etcétera. Es autor de quince libros. Los más recientes: Los salados del narco: el fracaso de una guerra, en colaboración con Jorge Castañeda (2012), y La Sociedad Civil en México (2012) y es que hay que recordar que Rubén fue un jesuita guerrillero en El Salvador, convertido en vocero del gobierno de la alternancia en México -él tenía la delicada tarea de desactivar un probable conflicto con el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) en El Salvador- y hoy en día muy involucrado en la entidad.
@magzamu