La certeza informativa que otorga al periódico IMAGEN y DIARIO DEL ISTMO al informar con casi dos meses antes que Miguel Ángel Yunes Linares, sería el candidato del PAN a la gubernatura de Veracruz, confirma la credibilidad y trabajo periodístico de investigación que se realiza en estos medios.
A pesar de que los propios interesados nos desmintieron. Se les olvidó que en esta casa editorial cuando afirmamos algo, no es que tengamos los pelos de la burra, sino el animal completo. Una historia que se repite cuando fuimos los primeros en afirmar que Fidel Herrera Beltrán sería el candidato del PRI como sucesor de Miguel Alemán. Y para que la jornada fuera completa, en aquella época electoral, con 24 horas de anticipación dimos a conocer que el Tribunal Federal Electoral confirmaba el triunfo del político de Nopaltepec.
La mejor prueba de esta credibilidad informativa, están las ediciones impresas de esta antelación en el manejo de las noticias. Lo interesante y trascendente en este oficio es el de hacer un auténtico periodismo de investigación.
Es la satisfacción y orgullo de esta casa editorial.

Las reuniones en lo oscurito

A fin de que los conozcan y sepan lo que representa la clase política mexicana y en el caso concreto de los líderes nacionales y coordinadores legislativos del PRI y del PAN.
El gobierno de Felipe Calderón consiguió el apoyo y el voto del PRI para aumentar impuestos a cambio del compromiso de que no hubiera alianzas entre el PAN con el PRD, PT y Convergencia en los próximos comicios. Lo que era un secreto tuvo que ser revelado por el propio secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont y Francisco Rojas Gutiérrez coordinador de los diputados priístas.


¿Cómo se eligió a Yunes?

¿Que pasó en las últimas horas de que se tomara la decisión de sacar a Yunes Linares como candidato del PAN a la gubernatura de Veracruz?
Una comisión de arbitraje mando hacer encuestas y para esa tarde tormentosa se tenían los resultados, el promedio de las mismas era el siguiente: Gerardo Buganza obtenía el 46 por ciento de los apoyos, Miguel Yunes el 24 por ciento y Bueno Torio el 17 %. Antes hubo un importante cónclave, este se efectuó durante una comida en Los Pinos, donde Margarita Zavala y César Nava apoyaron al choleño y Rafael Jiménez y Patricia Flores se inclinaban por el cordobés. La designación de Yunes fue sorpresiva pues en la orden del día estaba planteado sólo el método de selección del candidato. Fue “un acuerdo político”.
El líder nacional César Nava tenía la orden expresa de sacar como candidato a Yunes Linares. Fueron varias horas de tensión, el cabildeo autoritario y las atemorizantes conminaciones lograba doblar de lo 52 miembros que componen el Comité Ejecutivo Nacional a 25 de 40 de los asistentes.
Se les presionó,--en aquella tarde de intensa lluvia--, a Buganza Salmerón y Bueno Torio que la instrucción era directa del presidente Calderón, --tal como se había informado en este periódico dos meses antes--, y que no había nada que hacer. Se les indicó por supuesto que por esta disciplina al “dedazo y pastelazo” no habría más que el reconocimiento del Jefe del Ejecutivo y que no se podían por dar mal servidos.
El argumento principal fue que habían detectado la intervención de Fidel Herrera en el proceso panista. De cualquier manera fue un expriísta de más de 30 años de militancia en el tricolor el que ganó.
Lo que bien se aprende no se olvida.