En el mismo PAN y entre los Morenistas existe seria preocupación y hasta enojo porque algunos llamados “sapos” como se les conoce en los cárteles del narcotráfico a los traidores, están mudando en busca de incrustarse al próximo gobierno estatal y, lo más delicado, en áreas estratégicas para la nueva administración.

Un caso es en la secretaría de Salud donde ha sido detectado que un alto funcionario con robo de información sobre aportación facturación “fantasma”, condiciones sueldos y otorgamiento de plazas, y supuestas “aviadurías” ha buscado garantizar un mejor y nuevo cargo en la dependencia que encabezará el doctor, Roberto Ramos Alor.

Si el gobernador electo Cuitláhuac García Jiménez mantiene la congruencia del discurso de campaña con la acción ejecutiva, habrá de evitar como lo ha dicho que arribistas pero también corruptos y traidores se apoderen de las posiciones estratégicas.  Y Salud es algo más que delicado pues ya demasiadas carencias y consecuencias fatales se han tenido por una criminal administración del área.

A panistas preocupa que un subalterno de Miguel Ángel García Ramírez, todavía Director de Administración en SESVER, bajo la titularidad de Irán Suárez Villa, y leales incondicionales de Yunes Linares, sin contar otros más que ya también estén preparándose para el brinco, esté prácticamente del otro lado, gracias a la traición al interior de la misma.

A los de Morena peor, pues se preguntan en qué manos quedará el manejo de los recursos para equipo, plazas y programas del sector salud, cuando el doctor Alor podría estar copado de ocupaciones al frente de la dependencia, estos se despacharán con la cuchara grande.

Y es que de acuerdo a las versiones, hace un par de semanas en tremendo “pachangón” el contador panuquense, Miguel Malagón que ya no se quita el calificativo de traidor y “sapo”;  anunció que será el próximo Subdirector de Recursos Financieros, para lo que cual fue ese festejo por adelantado, ya que tenía el nombramiento en sus manos, a partir del primero de diciembre, avalado por Ramos Alor, ex director del Hospital Regional, Valentín Gómez Farías en Coatzacoalcos y ya sabido, el próximo Secretario del ramo.

Resulta, según cuentan en los pasillos de Sesver, que Malagón quien era jefe del Departamento de Contabilidad, acordaba diariamente con García Ramírez pero al enterarse el poderoso funcionario lo que su paisano andaba haciendo y el tráfico de información para el doctor Alor y Morena, ordenó su cese fulminante. Y cuentan que, montado en cólera, a empellones lo corrió de su privado.

Si bien la intolerancia es parte del régimen yunista como se demostró en agosto de 2017, cuando siendo Ramos Alor director del hospital de Coatzacoalcos tuvo la osadía de tomarse una “selfie” con la hoy senadora morenista Rocío Nahle y ello desató la furia del gobierno panista para cesarlo, un traidor y “sapo” difícilmente es perdonado en cualquier instancia.

Aseguran que aún durante su gestión en SESVER para ganarse al futuro secretario quien ya había sido corrido en agosto, reveló toda la información de la dependencia que manejaba como encargado contabilidades, nóminas y compensaciones, pues mantenía encuentros privados y comunicación permanente.

El 10 de septiembre cuando se enteró que Ramos Alor sería el nuevo titular de los SS, a espaldas de su jefe García Ramírez y como buen Judas entregó senda carpeta con las cifras nominales, facturajes de empresas, plazas y nómina alterada.

También que en su pachanga y eufórico contó que con la valiosa información recibida, el doctor Alor le anticipó que sería el nuevo sub director de Recursos Financieros, además de revelar que el nuevo Director de Administración será Raúl Nuberg Santiesteban.

Por cierto que Santiesteban ha sido señalado en versiones periodísticas por la falta de comprobación de más de 7.5 millones de pesos de recursos propios del Hospital Gómez Farías de Coatzacoalcos.

De confirmarse estos hechos el equipo de selección y depuración de los colaboradores que tendrá el gobernador Cuitláhuac tiene mucho trabajo. Pues como se sabe el objetivo del futuro mandatario es dignificar la atención en salud y darle mayor credibilidad a las instituciones.

Pero, ¿Será posible con esta falta de discreción y honorabilidad con la que se manejan algunos próximos funcionarios como Malagón?

Qué futuro le depara al doctor Ramos Alor, al próximo gobierno, y a los veracruzanos que aspiran a mejor calidad en servicios y manejo de os recursos públicos con personajes como éste?.

Y es que aquella máxima de el que traiciona una vez traiciona siempre, puede seguir vigente y hacer mucho daño entre la cúpula del Sector Salud.