Cuando el gobernador de Chiapas, Manuel Velasco vino a Veracruz y oficialmente se afirmó que fue para discutir temas de seguridad con Miguel Ángel Yunes, por supuesto que pocos creyeron la razón del encuentro entre ambos mandatarios de los estados vecinos preocupados también, según esto, por la migración de ilegales, pero casi nadie sabía la verdad sobre lo que ambos políticos, uno del partido Verde Ecologista, y el otro del PAN, habían discutido.
Si bien se han corrido versiones en torno a que el “güero” Velasco vino a tender un puente con AMLO, lo cierto es que más bien se trató de dos personajes a los que el mandatario chiapaneco puso en la mesa para que Yunes no los siguiera incriminando, y esta es la versión más acertada.
Primero, el ex gobernador Fidel Herrera Beltrán no habría de ser tocado. Es decir, toda la furia y supuesta sed de justicia del “Robin Hood moderno” del palacio de Gobierno desde hace casi 2 años, no llegaría al oriundo de Nopaltepec.
Incluso se ha confirmado que, lo que algunos columnistas sí alcanzaron a plasmar, es que Velasco, sentado frente a un lechero y una canilla en el café La Parroquia aquel 10 de junio intentó comunicar a Fidel Herrera con Yunes Linares a fin de establecer un pacto de paz, un sello de no agresión y así, darle espacio libre al camino que pretende tomar el hijo de Herrera con el Verde Ecologista, virtual aliado de Morena en los próximos seis años.
Pero cuando tocó el turno del siguiente punto que era retirar también los procesos legales contra el aún entonces diputado federal y ex coordinador de Comunicación Social con Javier Duarte, Alberto Silva Ramos, la negativa fue contundente.
Lo de Fidel sí, procede, diría Yunes, pero lo de Silva, para nada. A la insistencia de Silva, amigo cercano de Velasco, el Yunes azul prefirió abandonar todo intento de negociación.
Esto a cambio de que se bajara la intensidad en la campaña en sus dos vertientes:
Primero, dejar de presionar a todo tipo de actores políticos del estado y sectores para respaldar a su hijo Yunes Márquez con miras a la gubernatura, incluso con el uso de la fuerza pública, el sello de la casa, y que durante las elecciones por cierto, fue más que notorio que no fueron desplegadas.
Y segundo, bajar la intensidad de ataques y descalificativos en contra del entonces candidato presidencial de Morena, Andrés Manuel López Obrador y cualquier represión que tuviera que ver con morenistas.
Sabedor Yunes que no habría reversa en el inminente triunfo del tabasqueño, accedió a la petición. Al menos a dos, pero en el caso de Silva las cosas quedaron sin acuerdo. Hoy, el también ex alcalde de Tuxpan, Silva Ramos, se encuentra, afirman, en alguna de sus propiedades en Chiapas pero custodiado por un equipo de Manuel Velasco a fin de no ser detenido.
Esperando, igual que otros duartistas, a que el sexenio de Yunes Linares concluya. A que lo que ellos llaman “persecución” y aplicación de la justicia según el gobernador, amaine conforme venga el nuevo gobierno encabezado por Cuitláhuac García.
El acuerdo, Manuel Velasco, Fidel Herrera y AMLO, surtió efecto. El Verde en la entidad quedará en los próximos meses en manos del hijo de Fidel, Javier Herrera, operador del mismo a nivel nacional y más que cercano al gobernador chiapaneco, para trabajar de la mano con Cuitláhuac en el estado y con López Obrador en el país.
Así, los tejidos de la política. Así los pactos impunes y los intercambios del botín político, todo, a cambio de salvar el pellejo y de mantener el poder.
MUY EN CORTO
TUMBAN A YUNES MÁRQUEZ. El ex candidato a la gubernatura de la coalición PAN, PRD y MC, Miguel Angel Yunes Márquez se queda fuera del Comité Ejecutivo Nacional del PAN.
El yunismo habría presionado para que el ex alcalde boqueño fuera a la secretaría general, pero la propuesta no prosperó, los grupos en México ni siquiera lo tomaron con seriedad, menos cuando le siguen refutando al hijo del gobernador que en plena campaña dejaron solo al candidato presidencial, Ricardo Anaya.
Con el impulso de nueve gobernadores y de Roberto Gil Zuarth, Héctor Larios Córdova –de origen yunquista– y el ex priista Rafael Moreno Valle buscan ser candidatos a presidente y secretario general del Partido Acción Nacional (PAN), respectivamente.
Planilla que será para enfrentar al grupo de Ricardo Anaya Cortés y a su “candidato de la continuidad”, Marko Cortés Mendoza. Lo que deja ver que de ganar éste último, la secretaría general sería para Héctor Larios y así anteponer la unidad.
Lo que ha sido confirmado a Yunes Márquez, y está que no lo calienta ni el sol, es que ya fue notificado para integrarse como Vocal en la dirigencia nacional. Ni la presidencia ni la secretaría general. Su estrepitosa derrota y la traición al joven Anaya fueron su lápida si acaso creyó que merecía algo.
|
Nosotros | Publicidad | Suscripciones | Contacto
Reservados todos los derechos 2018 |
Nosotros | Publicidad | Suscripciones | Contacto
Reservados todos los derechos 2018 |