Cuando en noviembre del 2016, azuzados por el gobernador electo, Miguel Angel Yunes Linares, un centenar de alcaldes panistas y perredistas, tomaron el palacio de Gobierno, algo histórico, pues nunca se había visto una trasgresión a las instituciones de esa naturaleza, se pensaba equivocadamente que esa era la forma de resolver sus demandas como la entrega de recursos de las finanzas estatales.

Entonces el que encabezaba dicha “rebelión” fue el alcalde de Boca del Río, y a la postre candidato a gobernador del PAN, PRD y Movimiento Ciudadano, Miguel Angel Yunes Márquez, quien incluso buscó ser “trending topic” transmitiendo en vivo la descripción de Casa Veracruz donde vivió Javier Duarte, hecho también fuera la Ley al irrumpir en una propiedad oficial.

Acciones que sin duda llevaban un fin. Hacer campaña anticipada con este movimiento, porque de los recursos que tanto clamaron ni cuando llegó el PAN al poder a través de su papá Miguel Angel Yunes Linares, nada se supo y los ediles se fueron sin recibirlos en diciembre del mismo año cuando ya era gobernador.

Un nuevo grupo de los alcaldes que asumieron en enero de 2018, ante la derrota de sus partidos, conformó una asociación a inicios de septiembre de este año con la que pretenden sin duda querer “presionar” a través del membrete a las nuevas autoridades.

Apenas su segunda reunión fue cancelada porque la dirigencia de ese naciente organismo, Alianza Veracruzana de Alcaldes AVAC, que lidera el alcalde de Misantla, Othón Hernández, se habrá de reunir esta semana, según el propio edil, junto con algunos integrantes de su directiva en la ciudad de México con el presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado, Ricardo Monreal Avila.

Pero en su discurso se contradice el edil misanteco al señalar cuando la crearon, que la famosa coalición pretende convertirse en un contrapeso del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), y es precisamente con quien buscan el diálogo.

Por si fuera poco, con una desubicación geográfica, pues los ediles deberían sin duda, tratar primero con las autoridades electas de Veracruz,  ya que será con quien trabajarán de forma inmediata y directa y no en el Senado, donde por cierto no se definen los proyectos y liberan las obras para los distintos municipios.

En todo caso, sería la Cámara de Diputados en cuyas comisiones y a través de estos legisladores, es donde se gestionan recursos y demás beneficios. Por lo pronto han dejado plantado a sus aliados para irse a “tomar la foto” con Monreal y buscar cercanías personales.

Dando como prioridad que les confirmaron para esta semana dicho encuentro y bajo la promesa de compartirles los detalles para que “todos participemos” y de ahí convocar a una siguiente reunión, Othón Hernández se va a la capital.

Lo cierto es que no se trata más que de llamar la atención pues como en muchos sectores se acabó la bonanza, la dispersión y el influyentismo donde estos alcaldes pretendían sin duda seguir manejando recursos a manos llenas en común acuerdo con la instancia estatal.

Pretenden a través del “membrete” obtener canonjías y que se les perdonen los derroches que hicieron en campaña muchos de ellos, y seguramente buscarán amedrentar también al estilo de sus predecesores con la toma de instituciones como el propio palacio de Gobierno. Se verá pues si las entrantes autoridades lo permiten.

Por cierto que de los más de cien integrantes que esperaban aglutinar de los 212 alcaldes en la entidad, apenas y lograron arañar los noventa y eso por las siglas con las que llegaron y la presión estatal.

MUY EN CORTO

MOLESTA A EMPRESARIOS PRESENCIA DE ALCALDE YUNES. Sigue dando de que hablar la pasada reunión del Comité Organizador que prepara la Conmemoración de los 500 años de la fundación de la Veracruz, pues la presencia del alcalde, Fernando Yunes Márquez, no fue bien vista por todos  los empresarios presentes.

Y de alguna manera es natural porque sobre todo los poderes fácticos, salvo algunas excepciones, quieren congraciarse con las autoridades que van a llegar y no con los que se van y aunque al edil aún le quedan tres años de gobierno tiene la circunstancia que es hijo del aún mandatario y del ex candidato a gobernador.

Así que cuentan que mientras se explicaba el programa que hasta el momento se tiene contemplado para el magno evento a llevarse a cabo en abril del próximo año el alcalde porteño quiso romper el “hielo” con un chiste sobre un torneo que estaría organizando el club Tiburones Rojos de Veracruz para esas fechas.

“A ver si todavía hay Tiburones para entonces” dijo en tono de burla, pero su respuesta solamente encontró eco en su director de obras, Luis Román Campa, alabando la “vacilada” de su jefe, y en un empresario que estaba a su lado.

Los demás hicieron como que no escucharon nada.