Populista y demagogo como otros mandatarios estatales del PRI que le precedieron, el panista Miguel Ángel Yunes Linares acudió este lunes a la inauguración del Ciclo Escolar 2017-2018 de la Universidad Veracruzana, donde públicamente confesó que aspira a que cuando termine su gubernatura, la comunidad universitaria lo acepte como maestro honorario, sin cobrar.

“Me encantaría regresar a las aulas de la Universidad a dar clases, como lo hice ya en alguna ocasión, en la Facultad de Derecho”, dijo con aparente emoción buscando impresionar a las decenas de alumnos de nuevo ingreso que obtuvieron los más altos puntajes en el examen de admisión.

Pero qué podría enseñarles Yunes Linares a los estudiantes de Leyes: ¿Cómo violentar el Estado de Derecho? ¿Cómo vulnerar la autonomía de los poderes Legislativo y Judicial y de otros entes constitucionalmente autónomos como la Fiscalía General del Estado? ¿Cómo no respetar los derechos humanos ni las garantías individuales? ¿Cómo manipular las leyes para evadir alinearse al Sistema Nacional Anticorrupción o fomentar la opacidad gubernamental?

Y es que, por ejemplo, hace poco más de un mes, en sesión efectuada el 11 de julio pasado, el Comité de Transparencia de la Oficina de Gobierno –un área burocrática que él creó exprofeso para empoderar a su compadre y administrador de toda su vida, Manuel Muñoz Gánem– se negó “con fundamento en lo dispuesto en los artículos 55, 56 y 60 fracción I y 68 fracción I de la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública para el estado de Veracruz” a proporcionar al reportero Rafael Meléndez Terán, del portal informativo Alcalorpolitico.com, la relación de los viajes realizados por Yunes Linares desde diciembre de 2016 hasta el mes de julio pasado.

Meléndez Terán solicitó como ciudadano los datos desagregados por fecha (día, mes y año) y motivo del viaje. Asimismo, pidió las copias de la versión pública en forma digital de todos los comprobantes (facturas, tickets, recibos o cualquier otro documento) que justificara el monto gastado por transporte, comidas y cualquier otro gasto realizado durante el viaje.

En vez de cumplir la petición del solicitante, el Comité de Transparencia de la Oficina de Gobierno resolvió que toda esta información relacionada con los viajes del gobernador y sus acompañantes, incluida la comprobación de dichos viajes, sería clasificada como reservada por un periodo de hasta cinco años contados a partir de esa fecha, con los limitantes y previsiones que establezca la legislación anteriormente invocada.

Según argumentaron, la información solicitada no era posible entregarla porque “contiene datos muy sensibles que pueden poner en peligro la vida, integridad y seguridad del gobernador del estado y sus acompañantes”.

¿Ya se les olvidó el mensaje que como gobernador electo envió Yunes Linares desde Pánuco el sábado 17 de septiembre durante el último foro del Plan Veracruzano de Desarrollo 2016-2018?

“Le digo a la delincuencia desde Pánuco: se van a encontrar a un Gobernador que tiene los pantalones bien puestos y la mano muy firme para combatirlos, de correr todos los riesgos. ¡Ya basta de complacencias con los delincuentes, porque ya basta de desaparecidos!”, expresaba Yunes hace 11 meses, lanzando la siguiente interrogante a los centenares de asistentes: “¿Nos toca acostumbrarnos a que toda la vida vivamos con miedo? ¿Nos tendremos que acostumbrar a vivir en la inseguridad? ¿Nos tenemos que acostumbrar a vivir en el terror? ¡La respuesta es no!”.

Eso debería recordárselo a su compadre Muñoz Gánem, quien, por lo que se ve, hasta el chillido de una rata del parque Juárez puede hacerlo zurrarse en los pantalones.