OPLE EN QUIEBRA. INDOLENCIA

Revelador ha resultado el audio que circula por la red donde se hace referencia a Jorge Alberto Hernández y Hernández, actual Consejero Electoral del OPLE, donde se deja en claro el hartazgo de escuchar a los integrantes de los Consejos Distritales por la insistencia de estos últimos en querer saber la fecha en la que se les cubrirán los adeudos de hasta cinco quincenas derivado de los trabajos del pasado proceso electoral.

Ha sido más que escuchado el audio donde se deja en claro que este personaje ya quiere que llegue el 31 de agosto "para mandar a la chingada a esos revoltosos y se rasquen como puedan..."
En días pasados los integrantes de los 30 Consejos Distritales fueron recibidos por el pleno del Consejo General y allí expresaron su preocupación por los adeudos salariales.

Además dejaron en claro que en sus instalaciones carecen de lo elemental para trabajar: luz, agua, Internet y personal. En muchos distritos se debe además la renta de las casas que fungen como oficinas. Diríamos que el OPLE se encuentran en bancarrota.

Ante ello, el Consejero Presidente del OPLE Alejandro Bonilla Bonilla, les dijo que "estaban haciendo lo posible para que SEFIPLAN libere el recurso pero hasta la fecha no han tenido éxito". El adeudo de nómina es de 40 millones de pesos. Si a ello se le suman los servicios básicos, el adeudo total asciende a 85 millones de pesos.

Calificado por los miembros del OPLE cómo auténtico nefasto, Hernández y Hernández les dijo en esa reunión -a la que por cierto se le bloqueó acceso al prensa- que no podían más que insistir en finanzas y por lo tanto se llevarían un bote de saliva y un costal de esperanzas de vuelta a sus casas (sic).

Lo que dejó más molestos a los consejos distritales fue que no se aceptó ninguna de las propuestas para abonar a sus sueldos vía no cubrir las prerrogativas a los partidos políticos, vender activos como vehículos o equipos de cómputo.

También se propuso no cobrar un mes los empleados del OPLE en Xalapa o si quiera hacer una rueda de prensa para presionar al Gobernador y a su Secretario de Finanzas a pagar.

Eso sí, acusan que les siguen encargando trabajo como si no se les debiera su salario. La actitud indiferente de todos los Consejeros Generales deja de manifiesto que la autoridad electoral no tiene ganas de buscar alternativas de solución; les resulta irrelevante esta situación pues ellos muy cómodamente reciben quincena tras quincena sus sueldos superiores a los 90 mil pesos mensuales más otros bonos y beneficios.

Lo peor es que ya se avecina el siguiente proceso electoral para renovar los 212 ayuntamientos y con estos antecedentes será muy difícil que los ciudadanos quieran participar.

El desgano de los funcionarios electorales puede extenderse a la ciudadanía. Pues son los ciudadanos que conforman este organismo los primeros en sentirse agredidos por la "democracia". La poca legitimidad que tenía el OPLE se acaba de ir al caño. Y es que solo le recuerdan al Consejo Estatal y a su presidente que quienes se fletaron contando voto por voto y casilla por casilla fueron los distritales y ahora sienten que les dan una patada por el trasero.

La democracia ha sufrido un fuerte embate y quien es un representante de ello parece no importarle mantener la cohesión al interior pues con esos despistes le ha dado al traste a la confianza de sus integrantes.

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